Del Mercado de Jamaica a Bosque de las Lomas, las dos caras de Santiago Taboada

17 abril, 2024

Taboada come esquites que le obsequian en su recorrido por los pasillos de Jamaica. Foto: Isabel Briseño

Santiago Taboada recorrió el mercado de Jamaica y más tarde se reunió con integrantes del sector inmobiliario. A los primeros les prometió mejorar los centros de abasto, y a los segundos certeza jurídica y eliminar las instituciones que se encargan de vigilar las irregularidades

Texto y fotos: Isabel Briseño

CIUDAD DE MÉXICO.- César, un hombre de tez morena con mandil y playera del América fue el primero en estrechar la mano de Santiago Taboada.

“Me dijo que era la mejor opción para darle al mercado una mejor imagen”, comentó, luego de que el candidato del PRI-PAN-PRD a la jefatura de gobierno pasara de largo en su recorrido por el Mercado de Jamaica. 

Taboada le preguntó al hombre del mandil de mezclilla sobre las problemáticas en el mercado. El vendedor, que lleva toda su vida en el negocio familiar, le dijo que el mercado se estaba convirtiendo en un punto rojo con la venta de droga.

Taboada, genéricamente, dijo que mejoraría todos los centros de abasto en la ciudad, y continúo su reccorido.

Con flores, esquites, globos y muchas selfies, Santiago Taboada recorrió algunos pasillos del Mercado de Jamaica en la alcaldía Venustiano Carranza

A su paso por los pasillos, el candidato recibió regalos como globos, diversas flores, elotes asados, esquites y nieves.

Junto a él caminaron las candidatas a la Alcaldía Venustiano Carranza y a la diputación local, Rocío Barrera y Claudia Ramos. Ellas, quienes entre las flores repartieron propaganda con la leyenda “Hagamos mejor las cosas”.

La gente que tuvo suerte pudo saludar a Taboada, y hasta tomarse la foto en medio del cerco de seguridad instalado por decenas de hombres que en su mayoría portaban gorra, una bolsa cruzada de esas que llaman “mariconeras” y cubrebocas. Estos hombres empujaban a la prensa, y a quien fuera necesario, con tal de abrirle paso al candidato entre los angostos pasillos de Jamaica.

La señora Maribel Mendoza Ubaldo abrazó a Taboada, lo saludó de mano y aprovechó para tomarse fotos con el aspirante a gobernador  de la Ciudad de México.

–¿Qué le dijo?

–Yo fui la que hablé, no lo dejé hablar. Le dije que dios lo bendiga y que nos conceda este cambio.

Después, Maribel Mendoza aclara que ella pide a dios que el PAN recupere el poder y la presidencia del país.

La señora Mendoza recuerda que fue el presidente Adolfo Ruiz Cortines quien entregó el Mercado de Jamaica cuando sus padres se quedaron al frente del negocio de flores. Ya son 5 generaciones las que han trabajado en el negocio familiar, y ahora son sus hijos quienes llevan la administración del establecimiento.

La señora, conmovida por la presencia y la oportunidad de cruzar unas breves palabras con el candidato, dijo que no le gusta nada del gobierno actual.

–¿Ni con su pensión?

–Ah, eso sí– respondió la mujer.

Los hombres vestidos de negro que hicieron de la seguridad de Taboada un caos, también sirvieron como valla humana para que el candidato panista llegara hasta donde tenía que detenerse a posar, saludar, besar, estrechar la mano o recibir algún presente.

Algo parecido ocurrió semanas atrás en Iztapalapa, cuando el candidato también recorrió un mercado en medio de la multitud. Aunque ahí, sí le recordaron sus vínculos con el cártel inmobiliario cuando fue alcalde de la Benito Juárez.

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“Ellos ya traen mercancía de Ecuador, ya importan. Son flores preservadas y pueden durar hasta 10 años”, le dijo el ayudante del recorrido mientras le entregaba al candidato una flor en una caja individual. 

“Luego duran más estas flores que los matrimonios, ¿no?”, bromeó Taboada mientras pasaba las flores que le regalaron a sus ayudantes. Las risas se escucharon.

“¿Cómo estás mi querido Rodrigo?”, preguntó Taboada a otro locatario.

“¡Vamos a ganar!”, respondió Rodrigo.

“Taboada tu hija te espera en casa”, le gritó desde lejos una mujer al candidato.

«Ya traes un beso aquí»,  le dijo un reportero al panista.

«Por eso ya le llevo flores», respondió el aspirante a jefe de gobierno entre risas y más empujones. 

“Ahorita vienen y prometen y luego se olvidan”, se escuchó decir a una mujer que compraba en un puesto de abarrotes mientras miraba el tumulto que ocasionó el recorrido de Taboada, que a su paso también dejó mucha mercancía magullada.

Como ella, muchos otros locatarios y trabajadores del mercado no dejaron de atender lo que les deja para ir a amontonarse por una selfie, un mandil, o una bolsa de tela.

Después de probar en el mercado de comidas un plato con pulpo, el exalcalde de la Benito Juárez salió del mercado para abordar una motocicleta, no sin antes conceder la última foto que le exigía una señora. La foto, dijo, era para su hija pequeña.

Santiago Taboada abordó una moto al terminar su recorrido por el mercado de Jamaica. Foto: Isabel Briseño

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Santiago Taboada saluda a empresarias del sector inmobiliario a su llegada al Club de Empresarios. Foto: Isabel Briseño

Contrario al tumulto que se desató en el mercado de las flores, en el Club de Empresarios todo lucía en calma y en perfecto orden.

Ahí Taboada ya no iba arremangado, sino con saco y traje.

El evento fue en Bosque de las Lomas, una de las zonas con mayor plusvalía en la Ciudad de México, muy lejos de la Venustiano Carranza. Ahí, no hubo entrega de bolsas azules, amarillas o rojas representando el color de cada partido de la alianza. Aunque sí hubo otro tipo de bolsas, las de las asistentes que portaban Coach, Calvin Klein, Tommy Hilfiger, Michael Kors, así como el servicio de meseros que repartió regalos más propios para la ocasión como termos y llaveros.

No hubo caldo de pulpo, pero sí bebidas y palomitas embolsadas a los asistentes.

Aunque no todo fue dispar, pues aunque en el mercado las mujeres le gritaban diversos piropos a Taboada, en Bosque de las Lomas las asistente de Grupo Inmobiliario Zona Poniente tampoco perdieron oportunidad para retratarse con el candidato.

Aquí, sí hubo preguntas y respuestas, y compromisos concretos, aunque repetitivos.

Las promesas a los desarrolladores

Luego de leer el currículum de Taboada, el candidato presentó su propuesta de gobierno a desarrolladores inmobiliarios. Propuso crear zonas de usos mixtos en la ciudad para reducir el costo de la vivienda.

“Ustedes, como sector estratégico de la economía de esta ciudad, es importante que sepan cómo estamos pensando”, les dijo Taboada.   

Después, presentó una serie de datos de rezago económico en la capital, y culpó al actual gobierno morenista de dichas pérdidas.

El candidato afirmó que no hay un solo peso de inversión nueva en la ciudad. Aseguró que todo es prácticamente flujo de reinversión. “No hay un solo proyecto nuevo en la ciudad”, dijo, como lo ha hecho desde el inicio de su campaña.

Según Taboada, la preocupación real es el empleo precario y el empleo informal. Ambos, dice, tienen que ver con la imposibilidad de acceder a servicios de salud y a una vivienda digna.

“A una ciudad como la Ciudad de México la hace atractiva la certeza jurídica, cosa que hoy no pasa en la ciudad. Hoy de un plumazo, y ustedes lo saben bien, te cancelan un proyecto simple y sencillamente porque no es del gusto del gobernante en turno, y ahí están los interminables amparos”.

Los meseros desfilaban con más tazas de café, refrescos o agua simple. Mientras, el aspirante a Jefe de Gobierno continuó con su larga exposición donde no dejó de abrillantar la que dice, ha sido una mala gestión.

Luego de exponer las diversas desigualdades que de acuerdo con su percepción existen en vivienda, salud, educación y seguridad, el candidato se comprometió a pelear contra el modelo que las generó: Morena, según su análisis.

El panista, también volvió a promocionar su estrategia de la famosa “ventanilla única”, para evitar la corrupción inmobiliaria. Algo que ya existe, que de hecho promovió Morena, y que Taboada impugnó cuando era diputado.

“¿Qué pasa? ¿Por qué la vivienda en la Ciudad de México muchas veces es inaccesible?”, preguntó el aspirante a los empresarios.

Él mismo respondió que se debe a que a quien le trasladan prácticamente todo ese costo financiero es al usuario final, quien paga durante dos años los créditos y los intereses.

“Ese es un problema que tiene que ver con la tramitología, y lo hemos dicho”, reiteró.

Luego de recalcar que a la ciudad le urge un replanteamiento en sus reglas y certezas, mandó un mensaje a posibles inversionistas y de paso recordó que estamos a dos años  de tener el evento deportivo más importante del planeta, la Copa del Mundo, mismo que dejará una gran derrama económica.

Pero no habló de los riesgos para los pueblos y colonias de Santa Úrsula de Coapa.

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“Quienes pueden y quieren invertir, sepan que la capital es un lugar seguro para hacerlo, y no por un mal cálculo político prácticamente al otro día queden canceladas sus inversiones”, aseguró Taboada a los empresarios.

También, resaltó que las visiones son opuestas.

“No pensamos igual, porque el Gobierno no es un generador de empleos, esa es mi visión, el Gobierno genera condiciones para que ustedes (empresarios) generen los empleos”.

Después de 45 minutos de exposición, se abrió el micrófono para dar lectura a las preguntas que los empresarios y empresarias escribieron en una hoja blanca.

Taboada se reunió con representantes del Grupo Inmobiliario Zona Poniente (GIZP), la Asociación Mexicana de Profesionales inmobiliarios Ciudad de México (AMPI) y de la Asociación de Profesionales en Comercialización Inmobiliaria (APCI). Foto: Isabel Briseño

La amnesia del candidato

–¿Qué opinas sobre la necesidad de que la ciudad crezca verticalmente?

–Hay un gran déficit de vivienda social en la ciudad. Solo déjenme decirles que en estos años cero viviendas del Infonavit Ciudad de México.

“Por supuesto que tenemos que hacer una gran inversión, y por eso hablaba de la planeación de la ciudad, porque hoy la ciudad no puede seguir creciendo prácticamente a las orillas donde no hay servicios, donde no hay transporte público, tiene que crecer en zonas conectadas con servicios y también cercanas a los lugares de trabajo.

“No es porque a la gente le guste vivir prácticamente a las orillas, sino porque no tiene opción. El promedio de una vivienda en la Ciudad de México es de un millón 800 mil pesos”.

Su respuesta muestra su distancia con la política ofrecida por la campaña de Clara Brugada, quien apuesta a la urbanización y mejora de las zonas periféricas de la ciudad.

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–¿Qué opinas de los proyectos del Plan General de Desarrollo Urbano y Programa General de Ordenamiento Territorial? ¿Cómo ordenarías los usos de suelo de la ciudad?

–Sobre el Programa General de Desarrollo Urbano, en verdad es un fracaso que en seis años no hayan podido, con mayoría en el Congreso, hacer un esfuerzo por tener un plan que replantee a la ciudad. Tenemos el mismo Plan de Desarrollo Urbano del 2005.

“Prácticamente tenemos 20 años de retraso, si no tienes un nuevo plan de desarrollo, si no estás pensando en cómo se está moviendo la ciudad o qué necesidades de crecimiento tiene la ciudad, pues entonces surge toda esta telaraña de trámites entre Seduvi, entre la Paot, entre La Sedema, entre el Sistema de Aguas de la Ciudad de México y luego pasas al Registro Público la Propiedad.

“El gran paso que tenemos que hacer el día después de la elección del 2 de junio es convocar a que se piense, se haga, se consulte un Programa General de Desarrollo de la ciudad, porque necesitas tener ese instrumento para replantear la ciudad en todo sentido. Por supuesto, consultar a los pueblos y barrios originarios, cosa que no hicieron, quisieron imponer un modelo de desarrollo que prácticamente lo acabaron cancelando, se acabaron echando para atrás primero el del Instituto de planeación, lo desconocieron, y el segundo que preparó el jefe de Gobierno con calzador, se tuvo que echar para atrás”.

Cuando fue alcalde de la Benito Juárez, Santiago Taboada inuauguró, entre protestas, el centro comercial Mítikah. Ese día, los vecinos de la Juárez, y concretamente del pueblo originario de Xoco, le recordaron que no les consultaron para realizar esa obra.

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En cuanto al combate a la corrupción, Taboada propuso cerrar tantas ventanillas y desaparecer el INVEA, el Instituto que vigila y clausura los comercios y construcciones irregulares.  

“Lo único que está generando esa autoridad intermedia es intimidación, corrupción y por supuesto termina siendo el brazo que amenaza cuando el Gobierno quiere apretar las tuercas a algún sector de esta ciudad”, dijo el exalcalde acusado de pertenecer al Cártel Inmobiliario.

Finalmente, a los empresarios del sector inmobiliario les prometió reuniones cuatro o cinco veces al año, pero, por andar prometiendo, se resbaló un poco el aspirante a la gubernatura, dejando entrever el tipo de amistades que tiene.

“Como decía un amigo, quieres que algo no salga, hazle una comisión. Y yo no quiero eso, yo se los digo: tenemos que ser muy dinámicos, en cómo nos podemos comunicar y en cómo empezamos a encontrar las soluciones con agendas muy puntuales. Por supuesto que creo que ustedes tendrían que participar en las mesas para repensar el plan de la ciudad”.

Tal vez, la misma oferta se la hizo a Juan Diego Gutiérrez Cortina en marzo, cuando se reunió con él y otros empresarios del Grupo 21 en privado.

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Nunca me ha gustado que las historias felices se acaben por eso las preservo con mi cámara, y las historias dolorosas las registro para buscarles una respuesta.