Asesinos de la luna nos muestra el nivel al que puede llegar el racismo, en este caso, hacia los pueblos indígenas. Los Osages son víctimas de la ambición por el petróleo que hay en su territorio

Texto: Andi Sarmiento

Foto: Tomada del trailer oficial

CIUDAD DE MÉXICO.- El nuevo largometraje del director Martin Scorsese narra sucesos reales ocurridos en Estados Unidos entre los años 1910 y 1930 en el estado de Oklahoma, el cual había sido recientemente fundado. 

Esta es una historia sobre la comunidad Osage, un pueblo indígena que se mantuvo en resistencia ante la conquista de los hombres blancos. Al inicio, fueron desplazados a la Reserva Osage, en donde se dice que aceptaron vivir pensando que así no serían molestados, ya que era una tierra que se veía completamente desolada, pero no contaban con que en ese territorio encontrarían yacimientos de petróleo.

Tras este descubrimiento, los Osage se convirtieron en gente de clase alta y ganaron algunos privilegios sociales, aunque siempre tuvieron ciertas limitaciones; pero los nuevos colonos no tardaron en poner el ojo sobre los Osage y comenzaron a idear estrategias para adueñarse de la riqueza de sus territorios. 

La cinta está basada en el libro de David Grann, que nos cuenta el caso de un hombre que, con ayuda de su familia, busca heredar este dinero contrayendo matrimonio con unas hermanas Osage, para después fragmentarlas y quedarse con la fortuna.

La narración comienza con Ernest Burkhart, un veterano de guerra que regresa con su tío William Hale a vivir. William es un hombre conocido entre la comunidad, gracias a su apoyo económico se ha ganado el respeto y cariño de los Osage, logrando integrarse entre ellos. Además, bajo su cuidado crecieron las hermanas indígenas Anna, Mollie, Minnie y Reta.

Por influencia de su tío, Ernest y su hermano Byron buscan acercarse más a las chicas por mero interés económico. Se dice que la esperanza de vida de los Osage es menor por lo que es común que los hombres busquen contraer matrimonio o relacionarse de alguna manera con tal de heredar sus riquezas.

En un inicio Ernest sirve a Mollie como su chofer y poco a poco van entablando una buena relación. Genuinamente se nota que él va desarrollando sentimientos hacia ella, incluso forman una familia. No obstante, el cariño que pueda sentir no le quita ser cómplice conscientemente de los crímenes organizados por su tío para quedarse con su dinero. La película nos hace ver que a pesar de querer a su esposa e hijos, esta emoción siempre fue menor ante la ambición.

Mientras avanza la trama va aumentando el miedo en la familia y la comunidad en general debido a que han sucedido varios asesinatos hacia esta población que ascienden cada vez más rápido, homicidios los cuales han sido ignorados por las autoridades y el resto de citadinos.

No solo deben lidiar con el ser exterminados paulatinamente, igualmente con un sistema de justicia indiferente que no les voltea a ver. Mollie debe viajar a la capital para exigir que se atiendan estos casos y es hasta que la situación se agrava que entra la Oficina Federal de Investigaciones (Federal Bureau of Investigation, es decir, el FBI, que estaba en sus inicios). Es entonces cuando se empieza a indagar en los homicidios y se descubre que muchos están relacionados, pero aún el FBI se topa con burocracias y autoridades corrompidas que guardan silencio encubriendo a los asesinos.

Asesinos de la luna nos muestra el nivel al que puede llegar el racismo, en este caso, hacia los pueblos indígenas. Los Osages solo reciben algo de respeto debido al petróleo en su territorio, sin embargo, esto no los exime de tratos denigrantes ni de la violencia de quienes buscan robarles lo que les pertenece. En lugar de ser vistos con dignidad, son tratados como un estorbo del que hay que deshacerse. Cuando los estadounidenses se dirigen a ellos de buena forma es pura apariencia con malas intenciones de fondo.

La cinta refleja una parte de lo que el ser humano es capaz de hacer por avaricia, principalmente, el hombre blanco que ha dominado durante siglos. Lo que vemos en esta historia es solo una parte del problema, pero es esta misma ambición la que ha desatado grandes guerras y crímenes de odio que no han quedado solo en el pasado, pues se han arrastrado hasta la actualidad.
Asesinos de la luna está disponible en cines y se encuentra para comprar o alquilar en Amazon Prime.