Monster: la cadena de los chismes y prejuicios

21 diciembre, 2023

Monster es una película que retrata un dilema del siglo XXI: la era de la posverdad en un mundo donde la inmediatez no siempre es la realidad

Texto: Andi Sarmiento

Foto: Tomada del trailer oficial

CIUDAD DE MÉXICO. – Dirigida por el japonés Hirokazu Kore’eda, esta es una cinta que nos cuenta los mismos sucesos pero narrados desde distintas perspectivas de forma que la historia que se nos presenta en un inicio, termina no siendo lo que parece y conforme conocemos la versión de cada persona, nos damos cuenta que lo que a simple vista es un problema sencillo, realmente es un poco más profundo.

Asimismo, nos muestra cómo estas perspectivas son influenciadas por comentarios ajenos, los cuales en su mayoría no son más que rumores.

La cinta es protagonizada por Minato, un niño que vive con su madre y que se está acostumbrando a la ausencia de su padre luego de que este falleciera. Minato es el factor común en cada uno de los relatos y nuestra percepción hacia él cambia cuando empatizamos con cada uno de los personajes.

Monster inicia con un incendio en un burdel el cual es en cierta parte el detonante de varias cosas. Cerca del lugar habitan Minato y su madre Sori, entonces nos comienzan a explicar el contexto familiar y entendemos un poco lo que ha implicado para ella mantener la armonía en el hogar para su hijo.

Eventualmente nota un cambio en la actitud de Minato y además, observa algunas lesiones físicas. Ante su preocupación empieza a indagar en el tema y llega a la conclusión de que el culpable es el maestro Hori; entonces va a la escuela para hablar con la directora y se encuentra con respuestas inservibles, con unas autoridades que parecen robotizadas y que no conocen lo que es el diálogo.

Por esta falta de comunicación el conflicto se vuelve cada vez más grande, pues ante los ojos de Saori, Hori es un profesor abusivo en una escuela que lo encubre y por ende reacciona como lo haría cualquier madre para defender a su hijo.

Pero después se nos presenta cómo lo vivió el profesor y después, Minato junto a su amigo Yori y vamos uniendo puntos hasta llegar al final, donde encontramos por fin el por qué de las cosas y entendemos que las reacciones de cada uno son entendibles dependiendo de perspectiva.

La cinta genera un efecto interesante en el cual pareciera que hay un investigador que poco a poco va resolviendo el caso, pero en lugar de este ser un personaje, el detective es el público, ya que desciframos varias causales que entre ellos nunca se llegan a enterar. Esto nos mete en una especie de dilema, pues entendemos que todos tienen una justificación para responder como lo hacen, pero estas respuestas perjudican al otro y al no haber una buena comunicación, reacciona de una manera también entendible pero también, perjudicial para el de al lado.

Conforme crece el problema se van generando muchos rumores al respecto, principalmente por parte de los estudiantes que sacan conclusiones adelantadas que se difunden por toda la comunidad hasta llegar a los adultos, quienes poco se detienen realmente a examinar lo que cuentan los niños y se quedan solo con la idea superficial, creando más dilemas a base de chismes que no solo tergiversan la realidad sino que algunos vienen cargados de prejuicios e ideales misóginos y homofóbicos.

Lo que se  genera es un efecto dominó fundamentado en falacias, en el que es difícil clasificar a los protagonistas como buenos o malos, pues cada uno actúa como puede con lo que entiende.

Monster nos enseña lo peligrosa que puede ser la desinformación o en este caso, la información inmediata, esta en la que nos enteramos de un hecho pero no indagamos verdaderamente en el tema, más bien creemos saber lo que sucede en base a lo que la gente cuenta sin saber el trasfondo.

Esto es un fenómeno muy común en la era tan acelerada en la que nos encontramos y si tomamos y si llevamos estas situaciones a lo masivo, podemos utilizar a la película como ejemplo para analizar cómo funciona la comunicación en el mundo.

Si bien los chismes siempre han existido, con las redes sociales adquieren un mayor alcance es cada vez más sencillo que nuestra opinión se vea trastornada por lo que dice el resto. Vivimos en la época en que un tweet, un tik tok o incluso un comentario pueden ser considerados como una fuente de información aún si se desconoce en qué se fundamentan. Nos acostumbramos a recibir videos, imágenes o textos cortos que carecen de detalles y nos hacen pensar que con eso es suficiente para conocer un tema y opinar al respecto.

Como en la película, actuamos y opinamos de acuerdo a falacias y noticias incompletas, pues no nos damos el tiempo de estudiar un tema a profundidad. Lo que no vemos, es el daño que le podemos provocar a otros si nos seguimos dejando llevar por lo primero que escuchamos y no nos hacemos a la tarea de investigar bien antes de hablar.

Monster está disponible en distintos cines.

Andi Sarmiento

Me gusta escribir lo que pienso y siempre busco formas de cambiar el mundo; siempre analizo y observo mi entorno y no puedo estar en un lugar por mucho tiempo