Pobladores afectados por la posible operación de la termoeléctrica que anunció el presidente López Obrador niegan que haya interlocución y detallan las imprecisiones presentadas en la conferencia. Solicitan una hora para dialogar en su conferencia matutina sobre las repercusiones del megaproyecto
Texto y fotos: Daliri Oropeza
Tres hombres llegaron al plantón que impide la construcción del acueducto que conectaría el agua a la termoeléctrica de Huexca. Se ubica en Cuautla, la parte del municipio donde atraviesa el río. “Nos vamos a llevar el agua para la termoeléctrica” les dijeron a los activistas. Les tomaron fotos y se fueron. Al día siguiente, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció en su conferencia matutina la activación de la termoeléctrica el próximo diciembre.
El incidente lo narra Teresa Castellanos, defensora del territorio de Huexca, quien desde hace más de ocho años difunde las repercusiones y el daño ecológico, económico, social y de salud que tendría este megaproyecto en su tierra y en la región.
“¿Por qué no resuelve la investigación del asesinato de Samir Flores antes, ya pasaron 20 meses? ¿Por qué no resuelve la situación de inseguridad que hay en Morelos por bandas del crimen, los feminicidios, la violencia contra las mujeres? Antes de querer operar un megaproyecto”, reclama Castellanos.
De acuerdo con Teresa, Huexca está tranquilo en este momento. Pero con toda la organización de la región, además de los amparos, junto con la defensa del agua de los ejidatarios, de la tierra de los pueblos que se defienden del gasoducto, ve inviable el arranque de la operación de la planta de ciclo combinado (se activa con gas que se enfría con grandes cantidades de agua).
Recuerda que Huexca es un pueblo con usos y costumbres, y ahí decide la asamblea. Ésta ya ha decidido por concenso, por más de ocho años que no quieren la termoeléctrica. Recuerda que cuando la activaron para pruebas, s escucharon los 110 decibeles de ruido que hace la estación en todo el pueblo.
Las pruebas duraron tres meses, suficientes para que quienes ahí viven constataran: “perdimos la audición”. Salía gas gris de las turbinas, “nos enfermamos de gripa por meses”. Las aguas con químicos contaminaron las barrancas de guayabos y papayos, “ya nació un niño con un solo ojo”.
Los habitantes ven que la termoeléctrica es una muerte lenta: “sería mejor que nos den un balazo”.
El testimonio contrasta con lo que dijo el titular de CFE en la conferencia, Manuel Barttlet, que «la planta (termoeléctrica) tiene la virtud de consumir gas y por tanto la CFE va a aportar la energía más limpia del país».
Contrario a lo que informó el gabinete presidencial este jueves, el abogado Juan Carlos Flores explica que el pueblo de Huexca cuenta con el amparo 1823/2014‐III que dicta suspensión definitiva del funcionamiento de la obra, que prohíbe a la CFE descargar aguas residuales contaminadas por la termoeléctrica en el Río Cuautla.
No es el único amparo interpuesto por este megaproyecto. De acuerdo con el abogado, hay por lo menos 15 amparos activos contra el Proyecto Integral Morelos, entre ellos, ocho suspensiones con efectos definitivos y siete con suspensiones vigentes.
De estos amparos, cinco son por el agua y el acueducto de la termoeléctrica; tres de ellos interpuestos por los ejidos de Moyotepec, Tenextepango y Valle Velázquez. Sobre el gasoducto está la suspensión de plano, para Amilcingo, vigente para que no funcione el gasoducto. También la sentencia de amparo a favor de cuatro comunidades de Atlixco, Puebla, en la que ordenan una consulta indígena y tienen efecto de suspender el gasoducto.
Los siete amparos que tienen suspensión del Proyecto Integral Morelos son: uno de la termoeléctrica, dos de gasoducto, cuatro del acueducto.
Algo que no mencionaron los funcionarios federales en la conferencia presidencial es que, para activar la termoeléctrica, tendría que funcionar el gasoducto que rodea el perímetro del volcán Popocatépetl en zonas de riesgo uno y dos de tres estados. Además, deben terminar de construir un acueducto subterráneo. Enuncian que la consulta del 2019 salió positiva a favor de su activación. Sin embargo, aunque habitantes de otras zonas de las entidades implicadas dijeron que sí, los pueblos afectados directamente dijeron que no.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo: “Jurídicamente están resueltos todos los juicios de amparo y puede continuarse el proyecto”.
Aseguró que “los ejidatarios se ampararon, argumentando que implica el disminución del caudal para el riego (…) se realizaron estudios periciales en hidrología forense. Las cuales arrojaron que no causa falta de agua en los suministros de agua en los distritos de riego, dicen los peritos muy profesionales. Actualmente los juicios de amparo se sobreseyeron”.
El abogado de los pobladores, sin embargo, denuncia que no es así.
“Es mentira lo que dice la exministra. La conferencia del presidente fue un montaje teatral lleno de mentiras para justificar una represión para imponer la termoeléctrica”, dice Flores. Asegura que hay atropellos legales pues la perito que avaló la investigación que sobreseyó los amparos pertenece a la Comisión Nacional del Agua, Conagua, “y no se puede ser juez y parte”.
Incluso, Flores detalla que la la Secretaría de Gobernación solicitó hace seis meses que los amparos y recursos que tienen del megaproyecto estén en un solo tribunal. Es legal, afirma, «en teoría esto ayuda para que no haya sentencia contradictoria. Para que sea la justicia mas efectiva. Pero en la practica, puede derivar que solo es un juzgado; solo un tribunal, que se puede corromper. Perdemos la diversidad de los poderes juciciales, de los tribunales que dictan la justicia», y fue el el primer tribunal colegiado en materia administrativa de Morelos el que permitió un peritaje de la Conagua como juez y parte. Esta cuestión la denunciaron legalmente.
En la conferencia, la subsecretaria de Bienestar, Diana Álvarez, aseguró que han estado en diálogos con los ejidatarios de Asurco. Afirmó se les ha reiterado el apoyo con obras públicas para los ejidos. Esta es la asociación de ejidatarios creada para distribuir el agua de riego entre los 32 ejidos campesinos. Sin embargo, de acuerdo con el testimonio del ejidatario Flavio Plascencia Abundes de Ayala, ha habido acercamientos e invitaciones del gobierno, pero solo asisten algunos ejidatarios.
“Yo no quiero coquetear con el gobierno, ya les dijimos que no queremos que se lleven nuestra agua; ni que regresen el agua contaminada, según tratada, al río, ni que encienda la operación de la termo”, aseguró el ejidatario.
Plascencia confirmó que un grupo de ejidatarios viajó con una comisión del gobierno a la termoeléctrica en Hidalgo, como informó la subsecretaria Álvarez. Sin embargo, dijo que la mayoría no asistió pues no están de acuerdo con la activación de la termoeléctrica. Tampoco que algunos ejidatarios de Asurco intercambien obras públicas y dinero por el arranque de la operación.
De acuerdo con lo que describe el abogado Juan Carlos Flores, la asociación de Asurco no puede comprometer el agua ni los recursos de los ejidatarios que de por sí les pertenecen a los campesinos. Solo tienen injerencia para el agua que se reparte. Todos los ejidatarios son propietarios de la tierra y el agua, y la tienen por decreto del entonces presidente Lázaro Cardenas desde 1926. Las decisiones se toman en asamblea.
“Son dueños del agua tres veces. Una por ser pueblos originarios que desde sus ancestros se asentaron en la rivera del río. Han mantenido el lugar, mucho antes de la constitución del Estado mexicano; por defenderla, por el derramamiento de sangre de sus abuelos directos que lucharon junto a Zapata. La tercera es la concesión por 25 años que tienen del agua ante la conagua, por medio de Asurco, donde cada ejido es socio”.
Son primordialmente los ejidatarios quienes sostienen el plantón de Apatlaco. Ellos fueron amedrentados y fotografiados por personas desconocidas. El mismo día que la CFE y Conagua realizaron una inspección en la termoeléctrica.
“Sigue la persecución en contra de los luchadores sociales, de los defensores del territorio”, denuncia Teresa Castellanos. Señala que no es el único incidente que han tenido en los últimos seis meses tratando de amedrentar e inhibir su lucha.
El abogado Juan Carlos Flores, la Asamblea Popular Pueblos de Morelos, el Frente de pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua Morelos Puebla Tlaxcala concluyeron que lo que sucedió en la conferencia matutina de AMLO da pie a una represión, para una imposición sangrienta del Proyecto Integral Morelos.
“Recordemos que AMLO dijo que se va a someter a consulta la operación de la termoeléctrica. Luego desacreditó a los defensores, los llamó radicales de izquierda, y luego asesinaron a Samir. ¿Qué podemos esperar ahora?». Piden a la sociedad civil estar pendiente.
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