La CNTE dialoga con el presidente en la recta final de su sexenio. Con por lo menos 11 demandas pendientes, emplazan a un paro nacional indefinido. AMLO tiene la última posibilidad de solucionar las promesas incumplidas al magisterio democrático

Por Daliri Oropeza Alvarez / X: @Dal_air 

El profesor Héctor Torres es hijo de docentes. Decidió seguir con la tradición de su papá por convicción y al ver las condiciones educativas de su pueblo me’phaa (tlapaneco) en Guerrero. Tiene un comparativo histórico de los derechos laborales y compensaciones logradas por generaciones de docentes rurales que luchan. Actualmente es secretario general de la sección XIV de la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG).

Cuenta cómo las bases del movimiento magisterial guerrerense propusieron un paro nacional indefinido, hartas de esperar aumento de salario y mejores condiciones laborales prometidas por AMLO. Docentes tomaron la decisión de elevar la exigencia, propusieron al movimiento nacional de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), en su Congreso Extraordinario, iniciar el paro el 15 de mayo. 

La CNTE salió fortalecida de su sexto Congreso Extraordinario, coinciden varios maestros asistentes entrevistados. Hace ocho años que no había un paro así.

La propuesta fue aprobada de manera unánime y la advertencia está hecha por parte del magisterio democrático: Habrá paro si no hay respuesta del presidente. AMLO puede evitar este paro, pues sostendrá un nuevo diálogo con integrantes de  la Comisión Nacional Única de Negociación (CNUN) el próximo 9 de mayo del 2024. 

El magisterio enumera por lo menos 11 demandas fundamentales, distribuidas en cinco ejes temáticos. Hay cuestiones que urgen a nivel nacional, como la derogación de la reforma neoliberal de Enrique Peña Nieto que creó organismos como la Unidad del sistema para la carrera de las maestras y los maestros (USICAMM); la derogación de la ley del ISSSTE de 2007 que extiende el acceso a la pensión; el incremento del salario, la basificación de miles de docentes, el equipamiento de escuelas, infraestructura, internet; la exigencia de justicia en casos como la masacre de Nochixtlán y la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. 

La CNUN se creó en mayo del 2019, con la primera reunión que sostuvieron con AMLO siendo presidente. Tuvieron 18 reuniones hasta marzo del 2020, pues en el marco de la pandemia de Covid 19 el presidente canceló las reuniones… Las demandas se acumulan hasta el 1 de abril de 2024. En este año, han sostenido cuatro reuniones. Esta quinta visita es definitoria. 

En aquel 2019, el presidente elogió al magisterio democrático, le dijo que el movimiento es “depositario de principios éticos que comparto”. Pero el líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE ), Alfonso Cepeda, obtuvo una candidatura plurinominal por Morena y hace campaña por Claudia Sheinbaum. Pero las y los maestros organizados van más allá de coyunturas electorales. 

“Hay respuestas parciales, sin embargo el tema del salario aún no se atiende y por eso hemos definido empujar el paro indefinido a partir del 15 de mayo que tradicionalmente es el Día del Maestro”, cuenta el profesor Pedro Hernández, secretario de la sección IX de la CDMX, integrante de la CNUN. Las demandas trascienden a todos los estados.

El pueblo del profesor Héctor se encuentra en Malinaltepec, región de la Montaña alta de Guerrero. Cuenta cómo ha sido en la educación pública y rural de Guerrero el abandono de los gobiernos tanto estatal como federal. Hay un rezago del USICAMM de pago en cientos de plazas de maestras y maestros que actualmente dan clases. Un órgano que parece poner trabas burocráticas con evaluaciones en vez de servir para la carrera docente. No hay aumentos a directivos que ganan como maestros. No hay compensaciones. Prevalece el modo neoliberal. Anuncia el presidente que México seguirá aplicando la prueba PISA. 

“Nosotros tenemos claro cuáles son las necesidades, porque hemos estado frente al grupo. No somos prófugos del pizarrón, al contrario. Hemos sido maestros que terminando nuestros periodos tenemos que hacer varias actividades, marchas, plantones, aquí, en la capital del estado, o del país, por la desesperación de no ser atendidos”, asegura el profesor de la CETEG. 

Es una problemática en Oaxaca, cuenta la maestra Yenny Pérez, secretaria general de la sección XXII de Oaxaca. Los salarios, como el equipamiento de las escuelas han sido de las demandas más sentidas desde las y los maestros rurales. Además de que se formalice el Plan para la Transformación de la Educación de Oaxaca (PTEO).

En las cuatro mesas realizadas este 2024 con el presidente y varios integrantes de su gabinete, la estrategia ha sido patear el bote hacia adelante. AMLO y los funcionarios han dicho que hay demandas que no se pueden resolver porque no hay recursos, porque dependen del PEF2025, porque queda poco tiempo, pero pueden incidir en el gobierno que quede después de las elecciones.

La demanda de justicia ha sido una de las más resonantes en este sexenio por los crímenes de lesa humanidad cometidos por el gobierno de Enrique Peña Nieto. Quedan en el limbo las demandas por la masacre de Nochixtlán, por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Se suma la demanda de justicia por la represión que ha recibido la sección VII de la CNTE en Chiapas, bajo el gobierno vigente de Rutilio Escandón. 

“Como un acto de justicia, exigimos la reparación integral del daño. Hemos insistido, hay justicia si hay castigo a los autores materiales e intelectuales. Sabemos claramente quiénes fueron y a pesar de ello, el gobierno no ha hecho nada al respecto. Apenas recibieron nueve expedientes en la CEAV. Entonces: no quitamos, desde luego, el dedo del renglón. No solo es que las víctimas puedan avanzar en esta reparación integral del daño”, cuenta la maestra Yenny. 

La última vez que hubo un paro indefinido de la Coordinadora, fue en junio del 2016, en el marco de la represión de la protesta social contra la reforma educativa neoliberal en Nochixtlán, Oaxaca. 

Recordamos que ese 2016, en el marco de la lucha contra la reforma educativa de EPN, el clima de represión y condena mediática que generó un panorama desolador en contra de la CNTE, las manifestaciones en rechazo a la Reforma Educativa crecieron y el descontento se extendió incluso a estados.

El magisterio se fortaleció y encontró respaldo en diversos sectores sociales, pero especialmente en el sur de la república y en las comunidades campesinas e indígenas. De esta manera hubo represiones en Guerrero, Tabasco y Chiapas. 

También en Oaxaca. La sección XXII activó una serie de bloqueos carreteros, ante ello el gobierno desplegó las fuerzas federales a su disposición, miles de elementos transportados por aire y tierra, tanquetas y al menos una decena de helicópteros, así por cada bloqueo establecido se dio un desalojo. 

En este ambiente se había realizado la Evaluación Docente uno de los rasgos principalmente punitivos contenidos dentro de la reforma educativa. Para su realización fue necesaria la presencia de 8 agentes de la Policía Federal por cada maestra o maestro evaluado en Oaxaca. Cientos de maestros fueron cesados a nivel nacional. 

El 19 de junio de 2016, se desató la represión en el pueblo ñuu savi (mixteco) de Santa Maria Asuncion Nochixtlán, contra el movimiento popular que salió en defensa del magisterial. Policías federales y estatales asesinaron a ocho personas que acudieron a la protesta contra la reforma neoliberal. Testigos afirman que más de 200 personas resultaron heridas, la mayoría con impactos de arma de fuego, balazos de goma o intoxicación por gas lacrimógeno.

Los estragos de esa reforma privatizadora de la educación prevalecen con evaluaciones para ascensos, ingresos, cuando fue un compromiso eliminar la evaluación. Solo la quitaron para el ingreso. El problema de los cesados continúa y se suman varios más durante este sexenio, siendo 176 profesores. 

Y esos pendientes siguen puestos sobre la mesa. El profesor Héctor Torres recuerda que este sexenio se han movilizado de muchas maneras. Recuerda la experiencia de la Caravana de pies cansados. Cientos de maestros caminaron desde Chilpancingo a la capital en noviembre del 2022. Son las mismas demandas. Asegura que van a caminar, protestar y llegar hasta donde sea necesario. 

El magisterial es el único movimiento que a fuerza de marchas y mareas rojas que inundan las calles, en la ciudad, en los estados, ha hecho que el gobierno de AMLO rinda cuentas de la serie de promesas que no cumplió. De la serie de pendientes que tiene desde 2019 y que perfila a futuro. La CNTE no lo dejará ir sin cumplir.