Un expresidente que para legitimarse declara una guerra que todavía desangra al país, y hoy se declara estadista. Un empresario fracasado devenido en presidente que moralizó la educación sexual. Decenas, tal vez cientos, de empresarios, escritores, periodistas, huérfanos del presupuesto. El coctel político de México 2019, el país que no supera su problema fundacional: no tiene memoria
El festín de la desmemoria












