La comunidad triqui desplazada de Tierra Blanca logró que las autoridades escucharan la demanda que los trajo a la ciudad hace 15 meses: una mesa de diálogo entre los desplazados, dirigentes del MULT y representaciones de los gobierno federal y de Oaxaca para poder volver a su tierra. Ahora esperan el 16 de mayo, fecha límite en la que se acordó su retorno a la comunidad

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Isabel Briseño

CIUDAD DE MÉXICO.- Este miércoles, integrantes de la comunidad triqui desplazada de Tierra Blanca, Oaxaca, logró acordar con la Secretaría de Gobernación (Segob) una fecha para retornar a su comunidad.

Este acuerdo deriva de una serie de protestas en donde las familias desplazadas demandaron a la federación una mesa de diálogo para asegurar su regreso a la comunidad. Esto, después de que el lunes 25 de abril, policías de la Ciudad de México desalojaran el plantón que, durante 15 meses, sostuvieron integrantes de la comunidad en el Centro Histórico. Posterior a ello, las y los triquis desplazadas fueron trasladadas a un albergue que el gobierno capitalino habilitó en la colonia Valle Gómez. 

Estos hechos derivaron en un conflicto donde cuerpos policiacos cercaron a las y los triquis que se inconformaron con las condiciones del albergue. Tras más de 30 horas, las y los indígenas desplazados fueron trasladados a la Casa del estudiante ubicada en el barrio de Tepito.

Días después, integrantes de la comunidad de Tierra Blanca realizaron una manifestación en las inmediaciones de la Segob. Exigían que el subsecretario de derechos humanos, Alejandro Encinas, convocara a representantes del gobierno de Oaxaca; así como a miembros del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT), a una mesa de diálogo para asegurar el retorno a su comunidad. 

La presencia del MULT era fundamental para esta mesa, pues esta organización es parte de un conflicto en la región triqui que ha derivado en el desplazamiento de las familias del municipio de San Juan Copala. La otra parte en el conflicto es el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULTI), quienes acompañan a las y los desplazados de Tierra Blanca. 

El 3 de mayo Segob atendió las demanda de los triquis desplazados y concertaron una mesa de diálogo entre las y los representantes de las familias desplazadas; así como con funcionarios del gobierno del estado de Oaxaca (entre ellos Alejandro Murat) e integrantes del MULT. 

Como resultado de esta mesa, las y los asistentes a la reunión acordaron facilitar las condiciones para que las familias desplazadas puedan retornar a su comunidad. La fecha límite para esto es el 16 de mayo, y se estableció como condición el acompañamiento de los tres niveles de gobierno, así como de integrantes del MULT y organizaciones de derechos humanos. 

“Fueron 9 horas las que estuvimos en la Secretaría de Gobernación esperando esta reunión” dice Horacio Santiago, integrante del MULTI y uno de los acompañantes de las familias de Tierra Blanca. 

“Le pedimos, por un lado, a las autoridades que hagan valer estos acuerdos; pero también al MULT le pedimos que haya esa voluntad para que los acuerdos aquí plasmados se cumplan y ya no compliquemos más el asunto; y vayamos trabajando en un proyecto más grande para la pacificación de la región triqui. Este va a ser el primer paso ”, agrega. 

El díficil retorno a Tierra Blanca

Hace 15 meses Venustiana López tuvo que irse de su comunidad, Tierra Blanca, Oaxaca. Llegó a la Ciudad de México, junto a 143 familias que también huyeron por la violencia en la región; la cual, como señalaron las familias desplazadas en marzo de 2021, se debe a una disputa que grupos armados libran en la región. 

Este conflicto es histórico, y tiene su orígen en 2010, cuando un grupo paramilitar de la Unión de Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort) tomó violentamente los poblados de San Juan Copala y San Miguel Copala. En ese entonces asesinaron a la activista Bety Cariño y al observador de derechos humanos Jyri Jaakkola. Ellos acompañaban una brigada de pacificación en la región.

Antes del 26 de diciembre de 2020, el conflicto no había llegado a Tierra Blanca. Sin embargo, ese día, como lo acusaron las familias desplazadas, el MULT arribó a su comunidad y “echaron mucho balazo y dijeron: ‘salgan de su casa y no pueden quedar aquí’”. 

Los miembros de la comunidad se refugiaron en Yosoyuxi, un poblado del municipio de Juxtlahuaca. Ahí el MULTI, una organización que se separó del MULT, les ofreció un albergue. La violencia, sin embargo, no dio tregua y las familias arribaron a la capital del país. 

La dirigencia del MULTI acusó al MULT de ser paramilitares; éstos, por su parte, desmintieron tal afirmación. Las familias desplazadas, sin embargo, siguen viviendo la violencia en su región. Siguen sin poder regresar a sus hogares. 

Desde su llegada, y después de que tocaran las puertas del gobierno de Oaxaca a cargo de Alejandro Murat; las familias desplazadas comenzaron a exigir que interviniera le federación. 

La respuesta fue pronta, y el 4 de enero de 2021 el presidente López Obrador instruyó la intervención del subsecretario Encinas. Pese a esto, el retorno de los triquis a su comunidad no ha podido realizarse. Hasta el día de hoy van cuatro intentos fallidos.  

Venustiana, con lágrimas en los ojos, se dice contenta por el acuerdo. Sin embargo, su semblante emocionado cambia de repente. No repara en decirlo:

“Ojalá que el MULT cumpla su palabra”. 

La negociación 

La espera fue larga. Las familias desplazadas tuvieron que manifestarse para volver a ser atendidos por Encinas. Comenzaron a manifestarse el viernes 29 de abril. No las recibieron. 

Pasaron los días, y Segob seguía sin atender a los triquis desplazados. Sin embargo, el 3 de mayo se abrieron las puertas. Ese día asistieron a una primera mesa de diálogo junto a representantes del gobierno de Oaxaca y del MULT. 

La mesa no prosperó debido a que la dirigencia del MULT afirmó que tenían que estar presentes familias de Tierra Blanca para poder negociar. 

Al día siguiente se reanudaron las negociaciones. Pasaron 8 horas. Cerca de las nueve de la noche la comitiva de las familias y sus acompañantes del MULTI salieron de Gobernación. Anunciaron que el retorno era un hecho, habían llegado a un acuerdo. 

Minutos antes, y a través de su cuenta de Twitter, el subsecretario Alejandro Encinas ya había informado el resultado de las negociaciones: la firma de un pacto de no agresión.

Entre quienes suscribieron los acuerdos están el nombre del subsecretario, así como el del actual gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, acompañado del fiscal estatal y representantes de las comisiones de derechos humanos. También hay nombres de funcionarios de Ciudad de México, como el del subsecretario de gobierno de la ciudad, Ricardo Ruiz Suárez. 

Asimismo aparece la firma del presidente municipal de Santiago Juxtlahuaca, Arsenio Mejía García.

Por su parte, el documento cierra con 9 firmas de integrantes del MULTI originarios de Tierra blanca; y 9 más de personas de Tierra Blanca pertenecientes al MULT. 

Entre los acuerdos pactados se encuentran: 

1.- La conformación de una comisión que asegure las condiciones para el retorno de las familias desplazadas de Tierra Blanca. Esta comisión se integrará por los tres niveles de gobierno, y representantes de las familias de la comunidad e integrantes del MULT y el MULTI. 

2.- La creación de una estrategia de seguridad en la región; así como puestos de vigilancia en la carretera federal, en los tramos de Concepción Carrizal – Santiago Juxtlahuaca. Particularmente en los puntos de: Concepción Carrizal; Tres Cruces; y Hierba Santa. 

3.- La apertura de una investigación, a cargo de la Fiscalía General de la República (FGR) y la Unidad de Investigación Financiera (UIF), sobre el tráfico de armas y drogas en la región. 

4.- La citación, por parte de la Fiscalía Estatal, a las personas que cuenten con carpetas de investigación abiertas; esto, con el fin de asegurar que no intervengan en el proceso de retorno. 

5.- La invitación a organizaciones de la sociedad civil como observadores y facilitadores en el proceso de diálogo de pacificación. 

6.- Respetar el libre tránsito de las personas en la región, así como prohibir la quema del bosque. 

7.- La ratificación de que estos acuerdos son el primer paso para un proceso de pacificación en la región triqui. 

Este 5 de mayo, la comisión integrada para el retorno sesionará y discutirá los detalles que aseguren el regreso de las familias desplazadas a sus hogares. El plazo límite para cumplimentar este punto es el próximo 16 de mayo.