En una conferencia magistral en la UNAM, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ahondó sobre los retos de la izquierda en América Latina y el mundo. El principal reto, afirmó, es hacerle frente a la crisis climática que provoca el sistema capitalista

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Pedro Anza / Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO. – “Nuestros hijos van a vivir peor que nosotros, y los nietos peor que nuestros hijos», dijo el presidente de Colombia, Gustavo Petro, frente a un auditorio lleno en la Universidad Nacional Autónoma de México, quien lo recibió para escuchar su conferencia magistral: Deuda por el clima: la propuesta de Colombia, potencia de la vida, para salvar el planeta.

Petro, el presidente progresista que ha colocado la crisis climática en las discusiones políticas de esta década, no fue optimista con el panorama global que se vislumbra para el mundo si continúa con el sistema capitalista, por eso, llamó a una revolución mundial.

«¿Qué le corresponde hacer a la humanidad hoy si el capital no da avisos, sino que niega la crisis climática y no la resuelve? Eso también estaba escrito en el siglo XIX. No hay otra opción, lo dije en la ONU, y es difícil que un presidente lo diga, pero a nosotros nos corresponde hacer una revolución mundial. A nadie más».

La humanidad contra el capital

Para Petro, la crisis climática es «el principal problema de la humanidad». Sus palabras no son casualidad, pues desde que asumió la presidencia de Colombia, el político y exguerrillero ha enfatizado en la urgencia de que la izquierda (y en general, el mundo entero) abandone el paradigma desarrollista para impulsar una agenda sustentable.

Sus planteamientos, como él mismo describe, se acercan más a teorías como el ecosocialismo del filósofo brasileño Michael Löwy que, ante la crisis climática plantea que la única alternativa para otro futuro posible es el socialismo. Algo parecido a lo que planteó en el siglo XX Rosa Luxemburgo en su famosa tesis Socialismo o barbarie.

“La bandera revolucionaria es la bandera de la vida. Que yo digo es multicolor, pero pueden decir que es roja», afirmó ante el auditorio.

Y enfatizó en que, la Revolución de éste siglo, que para él tiene su epicentro en América Latina, es diferente, » no es obreros contra capitalistas como en el siglo XX. Esta es la humanidad contra el capital».

Esto, como toda Revolución, implica una lucha, que no es menor, si se toma en cuenta que “los dueños del ejército son los dueños del capital».

“Ahora, ¿cómo reacciona la humanidad? Con un ejército de la vida, dije yo, con guerreros y guerreras de la vida, pero esa lucha, me atrevo a decir, no se da en el mismo campo que nos colocan la lucha en la mesa, porque ellos tienen la capacidad de destrucción de la humanidad».

Los retos para la región

Gustavo Petro, quien llega al país como invitado a la toma de protesta de Claudia Sheinbaum, también aprovechó la conferencia magistral para hablar de América Latina.

A Sheinbaum, Petro la felicitó por ser la primer mujer presidenta en México, y aseguró que ahora «América Latina tiene a dos presidentes emanados del Movimiento 19 de abril», la guerrilla colombiana en la que el ahora Presidente de Colombia militó en su juventud.

También, aprovechó la presencia de la prensa para denunciar los intentos de golpe blando que se han fraguado en la región contra gobiernos definidos como progresistas. Esto, en el contexto de la reforma al Poder Judicial que se aprobó en México, pero también por una denuncia que su homólogo chileno, Gabriel Boric, le hizo llegar, pues asegura que e parlamento de ese país inició un proceso de destitución en su contra.

Eso, afirmó, es «algo que tiene que ver muy con Colombia ahora, porque si ese proceso se desarrolla en Chile, lo que está mostrando es claramente cómo las extremas derechas pasan de las dictaduras militares, como sucedió en Chile con Pinochet, a lo que llamamos golpes blandos con técnicas jurídicas inconstitucionales, pero que burlan igualmente el voto popular, el voto mayoritario de la gente».

Para Petro, quien en febrero de este año padeció un proceso similar en su contra, los golpes blandos remplazan la voluntad popular «por decisiones de poderes fácticos que no se aguantan que América Latina tenga una diversidad de opinión política, y sobre todo que avance en un camino de democracia plebeya».

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Y concluyó:

“Es un hecho que ahora pues tendrá que discutirse, no solo Chile sino toda América Latina. Ya hemos iniciado la discusión de lo que eso significa para Colombia, pero está en marcha el proceso también».

En el evento estuvieron presentes John Ackerman, rector del programa Democracia, Justicia y Sociedad de la UNAM, y Leonardo Lomelí Vanegas, rector de la UNAM, quienes coincidieron que Petro “es un faro de la izquierda latinoamericana, ejemplo de humanismo transformador y valiente líder mundial en la lucha por la vida y la paz».

Si quieres ver la conferencia completa puedes hacerlo en el siguiente enlace: