El documental Ithaka nos relata el camino que ha recorrido John Shipton, el padre de Julian Assange, en la bísqueda de la libertad de su hijo, encarcelado y en la mira del gobierno estadounidense por difundir la verdad
Texto: Andrea Sarmiento Pastrana
Foto: Tomadas del trailer oficial
CIUDAD DE MÉXICO.- Vivimos en un sistema donde quienes tienen más poder se dan el lujo de hacer lo que quieren, cuando quieren; somos gobernados por figuras que buscarán silenciar todo aquello que cuestione, desafíe o salga de la norma. La censura ha sido un problema presente durante décadas en todo el mundo. Hace unas semanas se presentó en la Cineteca Nacional El secreto del Dr. Grimberg, historia sobre la desaparición de un científico; ahora está en cartelera Ithaka, un documental del direcor Ben Lawrence que nos cuenta la historia de Julian Assange, periodista encarcelado y en la mira del gobierno estadounidense.
En 2006 Julian fundó Wikileaks, una plataforma digital que permite subir información de manera completamente anónima. Por este medio se publicaron 77 mil documentos militares de Estados Unidos y 400 mil informes, principalmente sobre la guerra de Irak; se metió no solo con los gobiernos sino también con las grandes empresas de vigilancia mundial. Expuso escenas de tortura y crímenes de guerra. Por ello comenzó a ser perseguido y hasta la fecha sigue en pie la lucha por su libertad.
En 2012, Reino Unido pidió su extradición a Suecia y él tuvo que recibir asilo político en la embajada de Ecuador en Londres, de donde no salió hasta 2019, cuando fue encarcelado por las autoridades británicas. Desde entonces, Estados Unidos ha hecho todo lo posible para extraditarlo a una de las cárceles de mayor seguridad de ese país; este año estuvo a punto de lograrlo, cuando el gobierno británico aprobó la petición, dejando 14 días para los abogados de Assange de apelar. Se logró evitar la deportación debido a la salud mental de Julian, la cual ha empeorado gravemente con el paso de los años. El argumento fue que si era enviado a Norteamérica sería lo suficientemente inteligente para encontrar la forma de suicidarse. Sin embargo, continúa preso y el presidente Joe Biden pidió una nueva orden.
Ithaka nos narra todo el proceso legal así como la campaña que se ha formado desde la detención de Assange; la historia es contada principalmente por su padre, John Shipton, así como su esposa y abogada, Stella Moris. Vemos que este caso ha sido muy duro tanto para Julian como para todos sus vínculos cercanos, quienes no han descansado en esta búsqueda de justicia y libertad.
El documental muestra todas las trabas que han tenido; empezando por el espionaje y hostigamiento de parte del gobierno que no los ha dejado en paz; John y Stella nos cuentan que aún antes de ser arrestado, durante su estancia en la embajada de Ecuador, eran vigilados todo el tiempo por la CIA, cosa que afectó en varios aspectos, entre ellos, la crianza de sus hijos, a quienes casi no pudo ver durante su infancia.
Pero además de las trabas políticas, el acoso también ha venido por parte de los medios de comunicación. Ithaka refleja lo poco preparados que están algunos periodistas a la hora de entrevistar, vemos la frustración de John al enfrentarse a preguntas que realmente no aportan nada para el caso. Esto es algo muy común y muy dañino que ocurre en el mundo periodístico, se pierde de vista el punto principal y los casos son tratados a partir del morbo o el entretenimiento. También se pierde la empatía con las personas afectadas; a las víctimas se les ve como un medio para ganar visitas.
El periodismo es un arma de doble filo. Ejercerlo de esta manera puede ser irrelevante o hasta dañino para la misma lucha. Sin embargo, si se aborda desde otra perspectiva puede ser muy favorecedor; dar visibilidad al punto central del problema ayuda a que un movimiento tenga más fuerza, que es lo que ocurre en esta situación. En el documental vemos que, con el paso de los años, se ha sumado cada vez más gente al movimiento por la libertad de Assange, esto ha ayudado a la familia a resistir y a meter más presión sobre los gobiernos. Mientras menos conocido sea un conflicto, las autoridades tendrán más libertad para abordarlo como les convenga, sin tener consecuencia alguna. Por eso es importante hacer ruido y no dejar pasar este tipo de injusticias.
El encarcelamiento de Julian Assange representa un gran fallo en nuestra estructura social, en varios sentidos. Para empezar, es una grieta para la libertad de expresión; Julian, antes de otra cosa es humano, una persona encerrada por mostrar la verdad; su liberación es fundamental para el periodismo y para toda una sociedad. También hay que atender el mensaje que nos manda, porque sacó a la luz crímenes que no podemos pasar por alto; hemos normalizado la guerra y eso propicia que estos ataques sigan ocurriendo. Pero es más perseguido él, por enseñar material confidencial que los mismos personajes a los que expuso.
El mundo se rige por una pirámide de poder, donde quienes quedan hasta arriba se encubren entre sí y aprovecharán sus oportunidades para mantener su lugar. Afortunadamente se evitó que Assange fuera extraditado, por ahora, pero esto fue bajo el argumento de prevenir su suicidio, hay que recalcar que el gobierno británico no ha reconocido que su encarcelación es injusta y violatoria de los derechos humanos.
Y es por ello que ahora hay un padre que a sus 77 años sigue en pie de lucha por una vida digna para su hijo y una esposa, quien continúa resistiendo sin descanso mientras cuida de unos hijos que han crecido sin la crianza de un padre que les fue alejado.
Julian Assange no es un caso aislado, a los periodistas histórica y mundialmente se les ha perseguido, encarcelado, desaparecido y asesinado por contar la verdad. Esta lucha es necesaria para que ni los científicos, ni los reporteros, ni nadie sea perjudicado por ejercer su profesión y por lo menos, molestar a los de arriba, que mínimo sepan que sabemos lo que hacen y que no lo tengan tan fácil. Alzar la voz es lo último que nos queda para resistir ante quienes quieren el silencio.
Ithaka puede verse en la Cineteca Nacional de Ciudad de México:
https://www.cinetecanacional.net/php/detallePelicula.php?FilmId=1000006095&Source=1
Me gusta escribir lo que pienso y siempre busco formas de cambiar el mundo; siempre analizo y observo mi entorno y no puedo estar en un lugar por mucho tiempo
Ayúdanos a sostener un periodismo ético y responsable, que sirva para construir mejores sociedades. Patrocina una historia y forma parte de nuestra comunidad.
Dona