Vecinos del pueblo de Xoco, al sur de la Ciudad de México, denunciaron una agresión por parte de un grupo de personas que vinculan a la construcción de la torre Mítikah en ese barrio, al gobierno de la alcaldía Benito Juárez y a la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad
Texto: Arturo Contreras Camero
Fotos: Isabel Briseño
CIUDAD DE MÉXICO.- El pasado jueves 9 de junio integrantes de la Asamblea de Xoco, en su mayoría adultos de la tercera edad, fueron agredidos por una veintena de personas después de cerrar una calle para el tránsito local. La Asamblea de Xoco vincula a algunas de las personas que atacaron a sus integrantes como parte de La Voz de Xoco, un periódico vinculado a un grupo de vecinos contrario a la Asamblea.
Desde hace al menos 5 años la Asamblea del Pueblo de Xoco se constituyó como una voz en contra de las intervenciones que hizo al espacio público Fibra UNO, que construye Mítikah, un enorme complejo urbano que construyó la torre más alta de la ciudad, junto con otros edificios en el corazón de Xoco.
Con el paso del tiempo, algunos miembros de la Asamblea crearon grupos vecinales paralelos, con quienes en fechas recientes, tanto la Secretaría del Medio Ambiente local como los responsables de Mítikah han tenido contacto y han hecho negociaciones. Por ejemplo, así se obtuvo el visto bueno de los vecinos (o de un grupo minoritario de ellos) para cambiar radicalmente la cara de la calle de Mayorazgo, en la que Mítikah construyó un parque elevado como parte de su plaza comercial y de las obras de mitigación en la colonia.
Otra de las obras de mitigación que ha realizado Mítikah junto con el grupo de La Voz de Xoco ha sido financiar un periódico, bajo ese mismo nombre, que supuestamente está enfocado a mejorar el tejido social y las relaciones en el pueblo, sin embargo, ha logrado todo lo contrario.
“Es una revista con la que entregaron económica y moralmente al pueblo de Xoco”, reclama Elizabeth Álvarez Resendiz, integrante de la Asamblea de Xoco.
“El recurso debería ser usado en favor del pueblo, pero se usa para la propaganda de Mítikah, para propagar un discurso de odio contra la Asamblea. Sus editores son personas que pertenecían a la Asamblea y que después se retiraron de la defensa de la calle Real de Mayorazgo”.
Días antes del 9 de junio, miembros de la Asamblea de Xoco habían propuesto a los vecinos de la calle de San Felipe cerrar sus accesos solo al tránsito local. El motivo, según dijeron en conferencia de prensa, un tipo de protesta social por la falta de transparencia por parte de la alcaldía Benito Juárez en la ejecución del Presupuesto Participativo de los últimos años.
Así, fueron cerrando la calle por pequeños tramos, siempre bajo la consulta y anuencia de los vecinos de la calle. Instalaron argollas en las bocacalles sobre las que colgaron una cadena para cerrar el paso solo a los locales y a los autos de los estudiantes de la zona.
El jueves 9 de junio, sin embargo, entre las ocho y nueve de la mañana miembros de La Voz de Xoco empezaron a convocar al cierre de Eje 8 Sur Popocatépetl, una de las avenidas que bordea el pueblo de Xoco, en protesta por lo que llamaron la privatización de la calle San Felipe por parte de la Asamblea. La protesta se dispersó pronto por una baja participación.
Horas después, minutos antes de las seis de la tarde, los vecinos que cerraban la calle San Felipe empezaron a escuchar golpes metálicos. Era un grupo de alrededor de unas 20 personas, jóvenes, que intentaban quitar las cadenas con las que se había cerrado la calle.
“Eran personas que no vienen de este cuadrante del pueblo, cuando llegamos (un grupo de integrantes de la Asamblea) empezaron a agredir al señor Javier y a Álvaro. “¡Tú te crees dueño de Xoco!”. Les decían. Entonces, de pronto de entre los jóvenes salió un carro blanco que le aventaron contra dos señoras y un señor de la tercera edad”, cuenta Adi Palacios, otra de las integrantes de la Asamblea.
El maestro Jaime Rábago, de 87 años, vive desde hace 53 en la esquina de Real de Mayorazgo y San Felipe, y presenció gran parte del altercado.
“Habían policías viendo la acción. ¿Y por qué no intervienen? Les dije, porque de que salieron las personas estas, a los dos minutos en la esquina ya estaban golpeando a las personas. Pero los policías nada más se dieron la vuelta y se fueron”, cuenta.
Tanto el maestro Jaime como otros vecinos recuerdan que las patrullas pertenecían a los elementos de seguridad que están a disposición de la alcaldía Benito Juárez, de esos que andan en patrullas negras con un rótulo que dice “BJ” en letras naranjas y azules.
“Tengo 53 años aquí en Xoco, siempre con una vida pacífica. Entraba aquí y me sentía seguro. A partir de entonces, desde que llegó Mítikah, ya no tengo esa seguridad. No quiero que esta serie de eventos nos tengan inquietos, a mis 87 quiero tranquilidad”.
Maestro Jaime.
Al final de la conferencia los vecinos hicieron un llamado a la unidad entre los habitantes de Xoco y responsabilzaron al gobierno de la Alcaldía, a la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad y a Mítikah de cualquier agresión subsecuente.
Periodista en constante búsqueda de la mejor manera de contar cada historia y así dar un servicio a la ciudadanía. Analizo bases de datos y hago gráficas; narro vivencias que dan sentido a nuestra realidad.
Ayúdanos a sostener un periodismo ético y responsable, que sirva para construir mejores sociedades. Patrocina una historia y forma parte de nuestra comunidad.
Dona