Una vacuna contra el coronavirus que elaboran la universidad de Oxford  y el  laboratorio AstraZeneca está en fase de pruebas y se espera que esté lista en noviembre; con el subsidio de la Fundación Slim, los gobiernos de México y Argentina, producirán 250 millones de vacunas para América Latina

Por: Reyna Haydeé Ramírez

Foto: Presidencia

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Laboratorios de México y Argentina participarán en la producción y distribución en la región de una prometedora vacuna que elaboran la Universidad de Oxford y el laboratorio AstraZéneca, confirmó este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador.

«Es realmente algo excepcional que nos va a ayudar mucho a que se mantengan la esperanza a que se acabe la incertidumbre y tenga la posibilidad de una vida sana», dijo el mandatario.

Se tiene previsto tener la vacuna en el primer trimestre del 2021, precisó, pero “todavía vamos a padecer de la pandemia y necesitamos seguirnos cuidando”.

El anuncio se formalizó en la conferencia matutina, donde participaron el canciller Marcelo Ebrard, el secretario de Salud, Jorge Alcocer, el subsecretario y vocero del gobierno para la pandemia, Hugo López -Gatel, la directora de AstraZeneca México, Sylvia Lorena Varela y Carlos Slim Domit, en representación de la Fundación Carlos Slim, que subsidiará la primera dotación.

La vacuna, cuyo costo estimado de producción es de 4 dólares (un estimado de 90 pesos) será producida por México, para México y para América Latina, destacó Varela.

“Es una alianza de riesgo compartido. Estamos corriendo al mismo tiempo los estudios, para levantar manufactura lo antes posible”, dijo.

“El apoyo que estamos recibiendo de estas alianzas, de alianza privada nos permite hablar de una dosis inicial de 150 millones, pero sin duda alguna los apoyos de los gobiernos y este riesgo compartido el cual estamos hablando nos va a permitir subir el suplido hasta 400 y tantos millones de dosis para la región de América Latina”, precisó .

Por su parte, Slim Domit,  explicó que se prevé producir de 150 a 250 millones de dosis y la labor principal de su fundación será procurar la transferencia de tecnología hacia México y Argentina para que se pueda generar primero los ingredientes activos y la fabricación de la vacuna en México con el soporte necesario.

Contó que esta vacuna que impulsan tiene su origen en la Universidad de Oxford, donde el equipo investigador lo encabeza la experta en vacunas, Sarah Gilbert. A quienes contactaron hace diez meses.

“(Gilbert) A tan solo cien días (de revelarse el virus), inició pruebas de tratamiento con sus jóvenes hijos trillizos como sus primeros voluntarios, y AstraZéneca quien está llevando la vacuna pueda ser una realidad”.

Vacuna universal y gratuita

El secretario de Salud, Jorge Alcocer, dijo que “tenemos la posibilidad de una buena vacuna. Existe el desarrollo científico para cumplir este reto con una visión de salud pública y de impacto social”.

El presidente precisó que en este acuerdo México invertirá menos de 25 mil millones de pesos y esto permitirá que la vacuna se distribuya de manera gratuita a todos los mexicanos, atendiendo al artículo 4to de la Constitución que establece el derecho del pueblo a la Salud.

“En otras partes, en otros países puede ser que se decida cobrar o seleccionar a quién se vacuna y a quién no; nosotros, para que no haya ninguna duda y también para darle garantías a todo nuestro pueblo, van a tener todos los mexicanos acceso a la vacuna”, dijo López Obrador.

Por su parte, Hugo López-Gatell dijo que en el nuevo esquema de salud que se está planteando, la vacuna sea universal y gratuita.

También aclaró, en respuesta a una pregunta sobre la vacuna que Rusia declaró “lista” sin completar la última fase de pruebas: “No existe hasta la fecha una vacuna efectiva contra el coronavirus y varias se encuentran en fases de pruebas, necesarias previo a su registro”.

Destacó también la unidad con que se está trabajando para encontrar una vacuna, un proceso que en general tarda entre 10, 15 años, como ejemplo, el VIH-Sida, para el que aún no hay vacuna.

“En un fenómeno sin precedente en la historia de la salud pública y del desarrollo de productos terapéuticos y de prevención como son las vacunas, se han buscado mecanismos de colaboración, entre instituciones académicas, gobiernos, inversores y empresas privadas para que de manera simultánea se exploren todos las posibilidades», dijo.

Para México, dijo, este acuerdo significa la oportunidad de no perder espacios. Y la oportunidad de adquirir una vacuna para México que puede significar el descubrimiento o la puesta en práctica de una vacuna para el mundo, ya que hasta el momento no hay una vacuna para covid-19.

“Aquí las alternativas se han buscado en paralelo, se siguen buscando tratamientos. También reitero hasta el momento no existe un tratamiento eficaz que haya sido considerado como estándar para covid-19 y se busca en paralelo vacunas”, dijo.

El principio de solidaridad

Sobr el acuerdo con el gobierno de Argentina, el vocero de México ante la pandemia explicó que conviene trabajar colaborativamente. y en esto, los organismos internacionales juegan un papel crucial.

“México tomó pasos anticipados con la postura con el manejar de la epidemia y la colaboración internacional con base en la solidaridad”, inisistió, al destacar la posición mexicana en la ONU para evitar la especulación comercial con las vacunas.

“México tiene también una actitud solidaria ante el mundo y tiene la responsabilidad de contribuir con esa visión de solidaridad”, destacó

Por eso, esta vacuna, cuando tenga los permisos sanitarios para usarse, «se va a distribuir equitativamente entre los países a solicitud de los gobiernos».

Aunque México y Argentina tienen la exclusiva de esta vacuna, otros países se han interesado en este tipo de acuerdo, como Colombia, Chile, El Salvador, entre otros.

El canciller Marcelo Ebrard explicó que lo que ahora sigue es que en noviembre se den los resultados y las autoridades regulatorias de varios países tendrán que tomar una decisión en común.

Luego, «cada gobierno determinará si le interesa participar o no y en qué proporción, y se tratará de tener un acceso equitativo».

Alivio para el futuro

Este acuerdo, insistió, «lo que te permite es estar al mismo tiempo que los países. Que no haya una diferencia en tiempos, porque la diferencia en tiempos son muertes y es un impacto económico y social tremendo».

Sin embargo, todavía falta mucho tiempo para controlar la pandemia y la vacuna, de aprobarse, estará en circulación en 2021, por lo que las autoridades insistieron en que por ahora hay que mantener las medidas sanitarias.

En la víspera, el presidente argentino Alberto Fernández, dijo que la futura vacuna «es un gran alivio para el futuro», aunque «no es una solución para el presente».