Hoy es un buen día para hablar de ‘Persépolis’

9 enero, 2020

Hoy que Estados Unidos vuelve su atención y acoso a la zona de Medio Oriente, es un buen día para hablar de la película Persépolis y y recordar la influencia del arte en las transformaciones sociales

Twitter: @tuyteresa

Para quienes aún no la han visto o leído: ¡alerta de spoiler! 

Es la historia de una niña chispeante: Marjie. Se sitúa hacia finales de los años setenta, justo en la transición que pone fin al régimen del Sha de

Persia para dar paso a la República Islámica, con el ascenso del Ruhollah Chuchaso Jomeini, mejor conocido como el Ayatolá Jomeini. 

La realizadora, ilustradora y guionista Marjane Satrapi nos regala un episodio histórico: somos testigos de las transformaciones de un régimen y de una época, desde la mirada de una niña divertida, curiosa y rebelde. Tiempo después de que Persépolis viera la luz, Satrapi comentaría que la película Los 7 Samuráis, de Akira Kurosawa, la inspiraría al crear la fuerza de su personaje.

Temas como la religión, la sexualidad, la condición de las mujeres y la migración están presentes en la obra. Luego de un difícil periodo como adolescente bajo el régimen del Ayatolá, Marjie pasa su adolescencia exiliada en Austria, donde se enfrenta a la xenofobia y la incomprensión. Al regresar a Irán, también se siente extranjera de algún modo. No se siente ni de aquí, ni de allá.

En su etapa de juventud nos devela las fiestas clandestinas bajo el régimen totalitario y la efervescencia política de la oposición. Nuevamente Satrapi abre la ventana al mundo disidente de los años ochenta y noventa en Irán, un mundo donde las mujeres usan minifalda, bailan y conversan animadamente con otros jóvenes. Esas fiestas y la disidencia política nos muestran un Irán poco conocido. 

¡Y qué decir de la entrañable escena en el regazo de su abuela! ¡Una joya!

Fue el historietista David Beauchard quien sugirió a Marjane contar su infancia y la vida en Irán a través de un relato gráfico. Al principio Marjane no estaba segura de que su historia fuera interesante; pero luego de un tiempo se animó y comenzó a idear la historia por entregas.

El cómic fue publicado originalmente en Francia, dibujado en blanco y negro y consta de cuatro entregas. Una vez finalizada, la editorial independiente L’Association editó un volumen donde recopiló la obra completa.

Para quienes no somos expertas/os en Medio Oriente, comprender sus complejidades y aristas nos lleva a varias preguntas: ¿qué lugar ocupa Irán en el contexto geopolítico?, ¿cuáles son las implicaciones del régimen actual para la población, específicamente para las mujeres? ¿Nos tragaremos la cápsula completa cuando nos cuentan la historia desde la perspectiva occidental?

Sin duda agencias como Al Jazeera nos dan contexto para entender de una manera distinta Medio Oriente. Ya no es posible seguir mirando el mundo en buenos y malos. 

Producciones como Persépolis nos regalan una mirada fractal a un mundo que nos parece lejano, pero al mismo tiempo universal, porque nos muestra el poder de la rebeldía, el amor y la capacidad de cuestionarlo todo.

Además de los múltiples reconocimientos como el Premio del Jurado en el Festival de Cannes (2007) o las nominaciones a la Palma de Oro (2007) y Mejor Película Animada en los premios Óscar (2008), Persépolis es un testimonio vivo de las transformaciones y claroscuros de la sociedad iraní.

Por eso hoy que Estados Unidos vuelve su atención y acoso a la zona, es un buen día para hablar de esta película y echar vistazo para recordar la influencia del arte en las transformaciones sociales. 

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Zapata vive

Guionista, reportera, radialista. Cubre temas culturales, sexualidad, salud, género y memoria histórica. En sus ratos libres explora el mundo gastronómico y literario. Cofundadora de Periodistas de a Pie.

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