La tarde de este viernes el grupo autodenominado “Poder de Base” incendió las oficinas de la Sección XVIII del SNTE-CNTE en Morelia, Michoacán, mientras la CNTE se reunía con el nuevo gobernador.

Texto: Alejandro Ruiz

Fotos: Especial

QUERÉTARO.- La tarde de este viernes grupos ajenos a la Sección XVIII de la SNTE-CNTE en Michoacán incendiaron una de las oficinas del sindicato en  Morelia; esto, mientras el grueso de la militancia de la Coordinadora se encontraba en una mesa de negociación con el nuevo gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla. 

De acuerdo con la dirigencia de la Sección XVIII, estos hechos fueron cometidos por un grupo que se autodenomina Poder de Base, compuesto por diversas expresiones del magisterio michoacano que no pertenecen formalmente a la Coordinadora. 

Muchos de estos profesores fueron separados de la CNTE años atrás debido a las diferencias políticas al interior de la organización. 

El secretario general de la Sección XVIII, Gamaliel Guzmán Cruz, explica que Poder de Base está compuesto por tres bloques ajenos a la Coordinadora; y que históricamente han intentando desestabilizar los procesos de organización al interior del sindicato. 

“Es un grupo compuesto por tres bloques. Algunos son disidentes de la CNTE conocidos como ‘El Bloque’, otros son militantes del Frente Nacional en Lucha por el Socialismo (FNLS) y otros son docentes vinculados con la delincuencia organizada que se alinean con la Secretaría de Educación del Estado.” 

“Este grupo forma un bloque que trafica con cambios de compañeros, plazas, documentos, por los que cobran dinero a cambio de agilizar los trámites. Son cómplices de la Secretaría de Educación Estatal” detalla el profesor Gamaliel. 

Entre las acciones que estos grupos han realizado en detrimento de la Coordinadora destacan la destrucción del mobiliario sindical; daños a automóviles particulares de militantes; agresiones físicas que han dejado inconscientes a miembros de la dirección del sindicato y amenazas a integrantes de la actual coordinación política de la CNTE.

Asimismo detalla que militantes del FNLS no sólo han agredido a docentes michoacanos, sino también a miembros de la Coordinadora en el estado de Chiapas. 

“Son hechos muy lamentables que se repiten constantemente”, lamenta el profesor Gamaliel. Él explica que la CNTE ha interpuesto 74 denuncias penales ante las instancias correspondientes; pero estas no han tenido seguimiento por parte de las autoridades locales. 

“Las autoridades ya les han detenido en flagrancia, pero les han dejado libres porque han intercedido diputados que buscaban el apoyo para sus campañas”, acusa. 

Detrás de este grupo, afirma el dirigente estatal de la Coordinadora, “hay intenciones para disolver a la CNTE”. Explica que con ese fin surgió Poder de Base; ya que al ser la CNTE la organización que tiene mesas de negociación con los gobiernos federal y estatal,  “quieren ellos asumir la representatividad, pero solo la Coordinadora puede llevar esos trámites”. 

Un modus operandi 

El 20 de septiembre, la Sección XVIII del SNTE-CNTE anunció que entraría en un paro indefinido de labores debido al adeudo de más de mil millones de pesos que el gobierno de Silvano Auroeoles tiene con las y los trabajadores de la educación de Michoacán. 

Este hecho convocó paulatinamente en la capital michoacana a militantes de la Coordinadora para ejercer presión ante sus demandas. 

De igual forma, desde las distintas regiones que se integran en la CNTE convocaron a otras actividades en los municipios. 

Aureoles no atendió el llamado; sin embargo el nuevo gobernador, Ramírez Bedolla, tras tomar posesión lo primero que hizo fue entablar una mesa de negociación con integrantes de la Coordinadora. 

“Nosotros estábamos en la mesa de negociación cuando comenzamos a recibir las noticias de que el Cortijo se estaba incendiando”, narra el profesor Gamaliel. 

“Quemaron toda un ala del edificio, y hubo cuantiosas pérdidas materiales, y, lamentablemente, expedientes de compañeros que tienen sus trámites con nosotros.” 

Este acto, acusa la dirigencia de la Coordinadora, no fue espontáneo. En redes sociales integrantes de “Poder de Base” convocaron a romper el plantón de la CNTE en el centro histórico de Morelia. 

Asimismo hay videos en los que se ve a  integrantes de este grupo pintando las paredes de la oficina de El Cortijo, y quemando la sala donde se albergaban los expedientes de trabajadores de educación básica. 

Entre el humo que brotaba de las oficinas se alcanzaban a ver pintas que amenazaban directamente a dirigentes estatales de la Coordinadora; en particular, una de ellas dirigida contra el secretario técnico de Gestión Educativa, el profesor Lev Moujahid Velázquez García. 

Lev Velázquez, además de tener un cargo al interior del comité, es una figura pública que ha denunciado abiertamente la privatización de la educación pública en el país y el atropello de los derechos laborales para el magisterio mexicano. 

“La amenaza en realidad no fue para mí sino para toda la dirección. Pero no me intimida, pues me siento cobijado por mis compañeros. Esto refleja que no les queda ningún argumento que colocar sobre las demandas, por eso empiezan a ubicar a la dirigencia. Hoy me tocó a mí, pero lo mío fue una pinta en las bardas; hay compañeros a quienes han golpeado anteriormente.” 

Lev Velázquez

El profesor señala: 

“Hemos sido nosotros quienes mediante la movilización hemos sacado adelante las gestiones y hemos ganado la interlocución con los gobiernos para mejorar las condiciones del magisterio.” 

Para el profesor Lev, la incitación a la violencia y la comisión de delitos son las formas en las que estos grupos alineados en “Poder de Base” operan en la región, nombrándose, muchas de las veces, como integrantes de la CNTE. 

“Pretenden confundir para negociar y usurpar una representatividad que no tienen; y desde la coordinadora insistimos que aunque usen nuestras siglas estas personas no son de la CNTE.” 

Esta confusión no es nueva, e inclusive ha llegado hasta palacio nacional. 

Un ejemplo de esto es la reunión que la entonces secretaria de gobernación, Olga Sánchez Cordero, sostuvo con integrantes de Poder de Base en diciembre de 2020, pese a que existen procesos penales abiertos en contra de los dirigentes de este grupo. 

Asimismo, no han sido pocas las denuncias que acusan al dirigente de “Poder de Base”, Benjamín Hernández, de actos de corrupción. Sin embargo, la mayoría de los medios de comunicación no matizan la diferencia que existe entre este grupo y la  Coordinadora. 

“Queríamos que quedara claro que Poder de Base son un grupo de golpeadores, de corruptos, de porros que no son la CNTE; solo la Coordinadora integra la Comisión Única de Negociación”, enfatiza el profesor Lev Moujahid. 

Por su parte, Gamaliel Guzmán espera que el nuevo gobierno de Ramírez Bedolla «tome cartas en el asunto» y atienda las 74 denuncias penales que la CNTE ha promovido en contra de integrantes de Poder de Base. 

“Queremos que nos paguen lo que nos deben, pero también que ya no haya impunidad; que se resuelvan las 74 denuncias de actos que le han costado miles de pesos a la Coordinadora, y en algunos casos han puesto en riesgo la vida de compañeros, no podemos seguir así, es urgente denunciarlos y clarificar que no somos lo mismo.”