Docentes agrupados en la Sección XVIII del SNTE-CNTE en Michoacán denuncian que, pese a tener un acuerdo con autoridades federales y estatales, no les han pagado más de mil millones, por lo que han determinado no iniciar el ciclo escolar hasta que se cubran sus salarios. La deuda continúa a semanas de que Silvano Aureoles deje la gubernatura

Texto: Alejandro Ruiz

Fotos: Especial

QUERÉTARO.- Las escuelas públicas de Michoacán no arrancaron clases el pasado 20 de septiembre, esto debido a un paro de labores convocado por la Sección XVIII del SNTE-CNTE para exigirle a la federación y al gobierno estatal el pago pendiente de los salarios de más de 28 mil trabajadores de la educación en la entidad. 

Entre estos trabajadores se encuentran docentes, intendentes, administrativos y personal que labora en los centros educativos.

En entrevista con Pie de Página, el secretario general de la Sección XVIII del SNTE-CNTE, Gamaliel Guzmán Cruz, afirmó que hasta el momento se adeudan más de mil millones de pesos que corresponden a pendientes de la administración estatal desde 2020. 

“En 2020 nos quedaron a deber 651 millones de pesos por concepto de 6 bonificaciones, si a eso le sumas las tres quincenas que no hemos cobrado durante este año, que equivalen a alrededor de 258 millones de pesos, más el retroactivo del aumento salarial de 3.9% de este año, que son 140 millones, tenemos una cifra que rebasa los mil millones de pesos. Eso es lo que nos deben y que no nos han pagado”. 

Pese a que desde el año pasado el magisterio michoacano ha exigido a través de diversas movilizaciones que se les paguen sus salarios, la respuesta del gobierno estatal ha pasado de ser insuficiente a prácticamente nula.

“Antes el gobierno del estado al menos nos decía que se estaban haciendo las gestiones correspondientes, pero ahora que se acerca la fecha en la que Silvano Auroeoles va a entregar su administración simplemente han dejado de responder nuestras llamadas, y hemos tocado todas las puertas” sostiene Guzmán. 

Caravanas motorizadas, toma de casetas, manifestaciones en edificios gubernamentales e inclusive el bloqueo de centros comerciales han sido algunas de las acciones que el magisterio michoacano ha realizado durante varios meses para exigir el pago de sus salarios, sin embargo, acusan que el gobierno “no los ha volteado a ver”. 

“Como no nos hacían caso comenzamos a bloquear los centros comerciales, pues sabemos que a los grupos empresariales sí los escuchan, y a lo mejor eso podía hacer mayor presión, pero ni así nos voltean a ver” lamenta el profesor Gamaliel. 

“No podemos seguir aguantando esta situación”, agrega, “nosotros hemos cumplido a cabalidad con el compromiso de educar aún con las lamentables condiciones de la pandemia, solo estamos exigiendo nuestro salario y ojalá la población nos comprendiera, pues son meses en los que más de 28 mil compañeros no han cobrado su salario, y eso es algo que ningún trabajador puede aguantar.” 

Nadie cumple su palabra

La Asamblea General Estatal de la Sección XVIII decidió no iniciar el nuevo ciclo escolar hasta que se cumplimentara el pago de los salarios pendientes.

Esta acción llegó hasta Palacio Nacional y la respuesta presidencial fue convocar a una mesa de negociación donde participaron la Secretaría de Gobernación, la SEP, autoridades del estado de Michoacán, la Sección XVIII de la CNTE y el gobernador electo de la entidad: Alfredo Ramírez Bedolla. 

“El 8 de septiembre tuvimos esta reunión para dar salida a nuestra problemática”, detalla Gamaliel Cruz, “y llegamos al acuerdo de que se iba a establecer una ruta de pago en 4 tiempos para las tres quincenas que nos adeudan, pero hasta el día de hoy no se ha cumplido esta propuesta y por eso seguimos firmes en la determinación de no iniciar el ciclo escolar hasta que no se nos pague, pues nadie está cumpliendo su palabra”.

La ruta de 4 pagos se iba a llevar a cabo a través de una gestión de 3 mil 800 millones de pesos que Ramírez Bedolla había realizado en su papel de gobernador electo, y no por parte de las actuales autoridades estatales que formalmente son quienes contrajeron la deuda, sin embargo la fecha límite para que comenzara a operar este acuerdo fue el pasado 20 de septiembre, y ni la actual administración estatal, así como la federación y el gobierno electo, efectuaron el pago a las y los trabajadores. 

“Ya no les creemos ni a la federación, ni al gobierno del estado ni a Bedolla, incumplieron su palabra y por eso no vamos a iniciar clases, pero sí queremos recalcar que esto es reponsabilidad de las autoridades, no de las y los trabajadores que desde que inició la pandemia hemos estado continuando con nuestra labor.” Concluye el profesor Gamaliel Guzmán Cruz. 

Hasta el momento ni el gobierno federal, ni estatal, han emitido ningún pronunciamiento respecto a las demandas del magisterio, quienes aseguran que en los próximos días convocarán a una jornada de movilización en la entidad para exigir el respeto de sus derechos laborales.