23 agosto, 2023
San Martín, una mina explotada por Grupo México, estalló en huelga desde el 30 de julio de 2007, y desde ese año los desencuentros entre la empresa y el sindicato minero no han cesado. Ahora, un panel internacional decidirá el futuro del conflicto
Texto: Alejandro Ruiz
Foto: Eliezer Name/ Archivo Cuartoscuro
CIUDAD DE MÉXICO. – Pese a que el gobierno mexicano anunció una semana atrás que el conflicto laboral en la mina San Martín, Zacatecas, no se desahogaría bajo las reglas del TMEC; este martes, el gobierno de los Estados Unidos solicitó la aplicación de un panel laboral bajo las reglas del acuerdo comercial.
Esto es un hecho histórico, pues es la primera vez que sucede desde que se firmó el acuerdo comercial.
El anuncio lo hizo Katherine Tai, representante comercial de los Estados Unidos. Detalló que esta decisión se tomó después de que el 16 de junio el gobierno norteamericano solicitara a México revisar si en el conflicto de la mina San Martín se violaban los derechos de libertad sindical y negociación colectiva de los trabajadores.
La respuesta de México fue que en el conflicto con la mina explotada por Grupo México no se vulneraron los derechos laborales de los trabajadores. Es decir, el gobierno de López Obrador rechazó la solicitud de los Estados Unidos.
Posteriormente, y mediante un comunicado firmado por la Secretaría del Trabajo y la de Economía, precisaron que el conflicto laboral no entraba bajo los supuestos que el TMEC prevé para activar el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida.
El argumento principal de las autoridades fue que la huelga en el sindicato minero estalló en 2007. Eso, argumentaron, implica la aplicación del principio de no retroactividad. O sea, que al no existir el TMEC durante esos años, el litigio tiene que llevarse en las instancias judiciales del país.
También argumentaron que la minera de Grupo México no realizaba exportaciones a los Estados Unidos.
Sin embargo, junto a la activación del Mecanismo, Katherine Tai anunció que solicitó a la secretaría del tesoro de los Estados Unidos la liquidación final de las cuentas aduaneras que estuvieran relacionadas con la entrada de mercancías desde la instalación de la mina San Martín.
Es decir, esta medida reconoce la existencia de una relación comercial entre la minera y sus socios comerciales en Estados Unidos. Una relación que sigue vigente.
A la vez, Tai reconoció que ambos gobiernos están en desacuerdo sobre la forma en que se debe desahogar el litigio. Por eso, el gobierno norteamericano solicitó un panel para verificar si en realidad se está cumpliendo la legislación laboral de México.
Su intención, remarcó la representante comercial de los Estados Unidos, es dar resultados significativos a la clase trabajadora.
Posterior al comunicado enviado por la representante norteamericana, la directiva de Grupo México (encabezada por el segundo hombre más rico del país: Germán Larrea), emitió un posicionamiento respecto a la noticia.
En el documento, la empresa dueña de Industrial Minera México señala que «confía plenamente en la actuación de las secretarías de Economía y del Trabajo en el caso de la mina de San Martín, actuación que siempre ha sido apegada a la ley y ha garantizado el pleno respeto a la libre voluntad de sus trabajadores para ejercer sus derechos”.
Y afirmaron que el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida sólo confirmará que su empresa se ha apegado a la ley, respetando los derechos laborales de los mineros.
Y señalaron que el Mecanismo lo solicitó el Sindicato Nacional de Trabajadores, Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana. Este sindicato es encabezado por el ahora senador de Morena, Napoleón Gómez Urrutia.
Las intenciones de Urritia, dijo Grupo México, son «evitar el laudo definitivo que lo condena a pagar 55 millones de dólares más rendimientos acumulados desde 2005 a ex trabajadores mineros y generar conflictos para presionar por un nuevo cargo político que le dé fuero”.
Urrutia no se ha posicionado al respecto. Sin embargo, algo de lo que dice Grupo México es cierto: su sindicato fue el promotor de la activación del mecanismo. Su petición la apoyaron en los Estados Unidos la United Steel Workers y el Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO).
El 30 de julio de 2007, la sección 201 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros estalló una huelga en la mina San Martín. Esta es la mayor mina subterránea de México que extrae cobre, plata, plomo y zinc.
En un inicio, las demandas de los mineros eran mejorar sus condiciones de seguridad e higiene. Sin embargo, la negativa a negociar por parte de Grupo México alargó el conflicto durante más de una década.
Las consecuencias de esto son varias. Por ejemplo, la contaminación del pueblo y cultivos de San Martín, y de otras comunidades aledañas.
Esto lo denunciaron los habitantes de esas comunidades. En su momento, argumentaron que al dejar en abandono las instalaciones, principalmente de su presa de jales, afectaba con polvo lleno de minerales tóxicos a sus cultivos.
Nadie escuchó sus demandas.
El caso es similar al que Grupo México también libra en Sonora, concretamente en la cuenca del Río Sonora.
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Años después, en 2018, un grupo de trabajadores afines a un sindicato pro patronal firmaron un convenio con Grupo México para levantar la huelga. Esto ocurrió en medio de una disputa legal por la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo contra el Sindicato Minero.
Más tarde, en 2019, los trabajadores comenzaron a hacer tareas de mantenimiento en la mina. Esto provocó un derrame que afectó a poblados cercanos.
Pese a todo esto, la mina de San Martín volvió a funcionar.
De acuerdo con datos de Grupo México, desde 2018 la empresa ha recibido inversiones por más de 105 millones de dólares. Actualmente produce más de 1 millón 250 mil toneladas de mineral cada año, empleando para esto a mil 300 personas.
Sin embargo, el 9 de junio de 2023 la Secretaría del Trabajo echó abajo el convenio que levantó la huelga en la mina San Martín.
Un mes más tarde, el 14 de junio, la misma secretaría resolvió un juicio de imputabilidad de la huelga, fallando a favor del Sindicato Minero, reconociéndolo como titular del contrato colectivo de trabajo.
En ese mismo fallo, la Secretaría del Trabajo dio por terminada la huelga, y condenó a Grupo México a pagar salarios caídos y prestaciones.
Después de recibir la solicitud de activar el Mecanismo para establecer el panel laboral, la secretaría de economía recalcó que los argumentos por los que rechazó la solicitud de revisión del caso siguen en pie para su dependencia.
Y detalló que el análisis del conflicto ya lo habían hecho las instancias nacionales competentes, «razón por la cual no sería aceptable una interferencia de un procedimiento paralelo bajo el TMEC».
Y concluyó:
«Es la primera vez que un Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida desemboca en un panel, por lo que será fundamental garantizar que en cada etapa prevalezcan los principios de imparcialidad y certidumbre”.
Periodista independiente radicado en la ciudad de Querétaro. Creo en las historias que permiten abrir espacios de reflexión, discusión y construcción colectiva, con la convicción de que otros mundos son posibles si los construimos desde abajo.
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