Las elecciones para renovar a las autoridades departamentales, municipales y distritales en Colombia mostraron un debilitamiento del proyecto progresista de Gustavo Petro, y el regreso de la clase política tradicional

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Redes sociales de Fernando Galán

CIUDAD DE MÉXICO. – Los partidos opositores al Pacto Histórico ganaron las principales ciudades de Colombia. Esto, después de celebrar elecciones en los departamentos, municipios y distritos de ese país, donde se eligieron mil 102 alcaldías y 32 gobernaciones.

Los resultados de esta jornada muestran un aparente debilitamiento del proyecto encabezado por el presidente Gustavo Petro, que en 2022 ganó la presidencia a través del Pacto Histórico, una coalición de partidos y fuerzas políticas progresistas.

Ahora, a un año de su victoria, el Pacto Histórico parece fragmentado. Esto, derivó en que solo ganaran 2 de las 32 gobernaciones que se disputaron en la elección, y no será mayoría en las asambleas departamentales o consejos municipales.

Sin embargo, esto tampoco debe augurar un mal futuro para el gobierno de Gustavo Petro, pues múltiples analistas coinciden en que las elecciones locales no necesariamente reflejan las preferencias a nivel nacional.

El gobierno de Petro, aún con este revés, conserva alrededor del 40 por ciento de la aprobación entre la ciudadanía.

Bogotá: el fantasma de Luis Fernando Galán

La ciudadanía de Bogotá eligió a Carlos Fernando Galán, canidato del partido Nuevo Liberalismo, como su próximo alcalde.

Galán, quien ya había contendido en dos ocasiones para el cargo, ahora obtuvo el 49 por ciento de los votos. El candidato del Pacto Histórico, Gustavo Bolívar, tan solo obtuvo el 13 por ciento.

Su candidatura, apoyada en nuevos partidos y otros provenientes de la vieja política, se basó en una plataforma de propuestas pragmáticas, lejos de consignas ideológicas. Entre sus propuestas están la atención a temas como la inseguridad y la operatividad del gobierno para resolver situaciones concretas.

Además, la historia de su padre, Luis Fernando Galán, dio fuerza a su candidatura, pues en la década de los 80 el político colombiano fue asesinado por Pablo Escobar, convirtiéndolo en un icono de la historia política de Colombia.

Cali y Medellín, alcaldes empresarios y conservadores

En Medellín, la victoria del ex alcalde Federico Gutiérrez augura el retorno del conservadurismo a esta ciudad colombiana.

Gutiérrez es dirigente del partido Creemos Colombia, ubicado a en a derecha política. Fue alcalde de Medellín de 2016 a 2020, sustituido por el izquierdista Daniel Quintero, cercano al presidente Gustavo Petro. Ahora regresó al poder.

En Cali, el empresario Alejandro Edér ganó con más de 300 mil votos, y sustituirá a Jorge Iván Ospina, actual alalde y ex militante del movimiento guerrillero M-19, al que también perteneció Gustavo Petro.

También en Cali, el polémico político de derecha, Andrés Escobar, será el consejal que trabaje de la mano con Alejandro Edér.

Escobar es cercano al ex presidente Álvaro Uribe, y amenazó a los manifestantes del Paro Nacional en 2021. En ese año, Escobar salió con armas de fuego con la intención de disparar a la gente que protestaba.

Aunado a eso, su campaña la apoyó la iglesia cristiana, y usó como plataforma la defensa de la familia tradicional y los valores cristianos, posturas cercanas a la ultraderecha de la región.

Petro reflexiona sobre resultados

Tras conocer los resultados de esta jornada electoral, el presidente Gustavo Petro lanzó un par de mensajes en sus redes sociales.

Primero, afirmó que «como presidente, me relacionaré con todos los mandatarios locales», y adelantó que el Pacto Histórico está lejos de ser derrotado, pues «no solo la coalición de gobierno ganó en nueve departamentos y se lucha el décimo, sino que, en el solo departamento de Nariño, por ejemplo, hemos ganado 21 alccaldías».

Y reiteró que en cuanto estén listos los resultados oficiales se reunirá con los nuevos mandatarios electos para articular planes locales con el plan nacional de desarrollo.

Además, felicitó que el proceso eletoral se haya realizado en paz y sin contratiempos, algo que desde hace décadas no sucedía en Colombia.