Maestras y maestros desafiaron a sus propios sindicatos, en específico la sección 8 y 42 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, de las cuales salieron presuntas amenazas de represalias en caso de participar en la marcha
“Libros sí, pretextos no”, miles de docentes exigen a la gobernadora entregar libros de texto
