Antes de dejar de pagarle al banco hay otras opciones

27 agosto, 2020

Sorprendentemente, con un nivel de desempleo histórico en el país, la cartera vencida no es un problema aún: el índice de morosidad total de la banca es de 2 por ciento, y llega hasta 5.6 por ciento en productos como las tarjetas de crédito

@vgarciadeleon

El aumento de la cartera vencida es un riesgo latente ante el cual las instituciones se han preparado.

Dejar de pagarle al banco es una de decisión a veces inevitable para alguien que sufre las consecuencias de una crisis. Ante una situación extrema de falta de liquidez algunas personas pueden verse obligadas a resolver sus necesidades más apremiantes antes de pagar sus créditos. Pero las consecuencias de ello pueden tener un alto costo financiero. Antes de que ocurra, hay otras salidas a los que como acreditados hay que recurrir.

Sorprendentemente, con un nivel de desempleo histórico en el país, la cartera vencida no es un problema aún: el índice de morosidad total de la banca es de 2 por ciento, y llega hasta 5.6 por ciento en productos como las tarjetas de crédito, según información de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Sin embargo, su aumento es un riesgo latente y los bancos lo saben. En México hay 25.7 millones de personas con necesidad de empleo, ya sea porque fueron despedidas, están disponibles para trabajar pero inactivas, o trabajan menos de una jornada completa, según la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo.

Pero el sector bancario ha tomado acciones previendo dificultades que la situación económica de millones de personas les podría traer:  abrió en abril un programa de diferimiento en el pago de créditos y mes a mes ha incrementado sus reservas, que ya suman casi los 200 mil millones de pesos.

Si bien no es claro a cuánto podría llegar la cartera vencida para fin de año, lo que es claro es que covid-19 termina con una racha de años de ganancias para los bancos que operan en México. Para el primer semestre del año, según la CNBV, las utilidades de 50 instituciones fueron menores en 36.4 por ciento a las del mismo periodo de 2019, por las reservas adicionales que han tenido que poner, el programa de diferimiento y la baja en la tasa de referencia del Banco de México (actualmente en 4.5 por ciento). Al fin y al cabo, siguen siendo ganancias.

El programa terminó en julio, unos nueve millones de créditos, por un billón de pesos, se adhirieron a él logrando postergar por cuatro o seis meses sus pagos de capital e intereses, sin penalizaciones o afectaciones al historial crediticio. Pero quienes fueron beneficiados deben reanudar sus pagos en septiembre, aunque dados los niveles de desempleo quizá muchos podrían caer en moratoria. De ahí que un nuevo programa sea imprescindible para apoyar a los deudores.

Luis Niño de Rivera, presidente de la ABM, asegura que los bancos alistan planes de reestructura con nuevos plazos y montos para sus clientes y los presentarán a principios de septiembre, aunque advierte, cada caso deberá ser tratado de manera particular por las instituciones.

Mientras eso sucede y antes de tomar la decisión de no pagarle al banco hay que acercarse con ellos a negociar. Aquí un pequeño recordatorio de las opciones que puede haber:

Solicitar un crédito personal

Algunos expertos recomiendan contratar un crédito personal para pagar todos los préstamos que se tengan en tarjetas de crédito, sobre todo si es que ya se acumularon intereses, para evitar que el monto siga aumentando.

Consolidar todos los préstamos

Acercarse al banco que ofrece mejores condiciones para que liquide las deudas con otras instituciones y tener así una deuda con solo una institución.

Reestructurar

La idea es ajustar la deuda a la actual capacidad de pago, por lo que la institución puede optar por extender el plazo del préstamo, fijar pagos mensuales y distribuir los intereses.

Quita

Implica que el banco acceda a reducir el monto de la deuda para liquidarla totalmente. Pero según la Condusef, al tratarse de un daño para la institución dejará una nota negativa en el historial ante el Buró de Crédito.

Periodista independiente. Se especializó en temas económicos con la convicción de que el periodismo puede cerrar la brecha que existe hacia ellos, para entenderlos e, incluso, disfrutarlos. Ha sido editora y reportera en Expansión, Fortune México y conductora en RompevientoTV. Ayudó a fundar la red de Periodistas de a Pie.