EL INE confirmó que con el total de las actas computadas, 6.6 millones de personas participaron en la Consulta Popular y 97.7% de ellas dijo sí a garantizar la justicia y los derechos de las víctimas de las decisiones de los políticos del pasado. El centro y sureste del país concentraron las votaciones

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Diana Manzo y María Ruiz

Este 1 de agosto México vivió uno de los episodios democráticos más grandes en la historia del país: la consulta popular para decidir si se esclarecen las decisiones de los actores políticos del pasado para garantizar la justicia y los derechos de las víctimas.

Aunque no se logró el carácter vinculante de la consulta, ya que requería 37.4 millones de votos, la participación ciudadana fue la más alta en la historia de las consultas populares celebradas en México.

De acuerdo con el total de actas computadas, el Instituto Nacional Electoral (INE), participó el 7.11% de la ciudadanía (6.6 millones de personas).  La gran mayoría se manifestó a favor del esclarecimiento de los actos del pasado (97.72%), lo que se traduciría en 6.5 millones de personas que marcarían la opción SÍ.

Centro y sur concentran el SÍ

De acuerdo con el total de actas computadas, en todos los estados ganó el SÍ. Las tres entidades que tuvieron mayor cantidad de votos en ese sentido fueron Estado de México, Ciudad de México y Veracruz.

Estos tres estados concentran el 27.92% de la lista nominal de electores a nivel nacional, lo que equivale a 26 millones 159 mil 127 personas.

Otros de los estados que obtuvieron un amplio voto del SÌ durante la consulta fueron Puebla con el 97.07 % de los participantes; Chiapas con el 97.08; Guerrero con el 97.84 y Oaxaca con el 97.65.

En estos estados hay una amplia presencia de organizaciones y movimientos sociales, así como de pueblos y comunidades indígenas, algunos de ellos agrupados entorno al Congreso Nacional Indígena (CNI), que respaldó el llamado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) para participar en la Consulta Popular.

En contraparte, los estados que registraron menor número de opiniones a favor del SÍ fueron Baja California Sur, con poco más de 31 mil personas; Colima con 35 mil 750 y Aguascalientes con 37 mil 527.

Estos tres estados concentran tan solo el 2.29% del total de personas en la lista nominal a nivel nacional.

En los casos donde el porcentaje de participación ciudadana fue muy bajo en relación las lista nominal, pueden explicarse debido al histórico dominio del PRI o el PAN, quienes abiertamente se declararon opositores a la Consulta Popular.

Tal es el caso de Aguascalientes, donde desde 1947 ha gobernado el PAN; Guanajuato donde desde el 99, con Vicente Fox al mando, también ha gobernado el PAN; y Chihuahua donde desde el 86 ha habido cuatro gobiernos priístas y dos panistas, entre ellos el de Javier Corral Jurado.

Doce estados superaron la media nacional: Hidalgo, Estado de México, Ciudad de México, Tlaxcala, Veracruz, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Campeche, Puebla y Morelos. 

El estado con mayor porcentaje de participación fue Tlaxcala con 11.66% de su población, lo que equivale a 113 mil 854 personas de las poco más de 976 mil registradas en el padrón electoral. 

Asimismo, estados como la Ciudad de México, Hidalgo, Veracruz, Guerrero y Oaxaca rebasaron el 10% de participación ciudadana respecto a su padrón electoral. 

El Estado de México, pese a contar con una participación del 8.10%, y donde más de una veintena de mesas receptoras dejaron de funcionar por las condiciones climatológicas de acuerdo con el INE, fue la entidad donde más gente asistió a opinar, pues se contabilizó la participación de más de un millón de personas, de las cuales casi 980 mil opinaron SÍ.

La entidad que registró el menor número de participación ciudadana fue el estado de Chihuahua, donde solo el 3.10% del padrón electoral acudió a la consulta popular, lo que equivale a poco más de 90 mil personas. 

Además de Chihuahua, las entidades que registraron bajos índices de participación fueron Zacatecas (3.38%), Aguascalientes (3.76%), Guanajuato (3.88%), Nuevo León (3.47%) y Durango (3.95%). 

De acuerdo con el INE, durante la consulta popular solo en tres estados (Oaxaca, Chiapas y Michoacán) no se instalaron todas las mesas receptoras previstas en la numeralia del Instituto. 

En total se instalaron 57 mil 076 mesas receptoras de las 57 mil 087 previstas por el INE. 

Poca difusión institucional

Respecto a los espacios en radio y televisión promovidos por el INE para incentivar la participación ciudadana tan sólo se transmitieron spots y mensajes en 3 mil 499 emisoras, y 97 inserciones en medios impresos. 

Esto contrasta con las 49,919 piezas realizadas para todas las candidaturas en las precampañas y campañas electorales de la reciente jornada electoral, donde de acuerdo con el monitoreo realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México 40,271 correspondieron a radio y 9,648 a televisión.

Asimismo, durante esta Consulta Popular, el Instituto solo gestionó 1,432 espacios de publicidad exterior en todo el país.

Para la realización de la Consulta Popular, el INE asignó más de 500 millones de pesos, mientras que para la jornada electoral del pasado 6 de junio, el presupuesto asignado para partidos políticos y candidaturas independientes fue de más de $7 mil 226 millones de pesos.

El INE informó que los recursos usados provinieron de un ahorro que tenía el Instituto, al no obtener una partida de la Cámara de Diputados ni Hacienda. Eso repercutió directamente en la colocación de las mesas de recepción y los pocos carteles informativos que se hicieron no se imprimieron en lonas impermeables, por lo que fueron dañados por las lluvias.

Hacia una Comisión de la Verdad

Días previos a la realización de la consulta, sin embargo, activistas promoventes de la consulta denunciaron que el INE estaba cometiendo actos de “boicot” para inhibir la participación de la ciudadanía. 

Esto debido a la reducción de hasta ⅓ de las mesas receptoras en comparación con las casillas instaladas en la jornada electoral del 6 de junio, así como la negativa del Instituto para instalar mesas especiales para que connacionales residentes en el extranejero, o personas que viven en otros estados al interior del país, pudieran acudir a emitir su opinión. 

Durante la jornada de votación, ciudadanas y ciudadanos denunciaron irregularidades en algunas de las mesas receptoras, donde no había señalización adecuada para identificar la mesa, carencia de protocolos sanitarios, o cierres antes de tiempo. 

Por otra parte, un gran número de personas externaron a través de las redes sociales su inconformidad con la falta de casillas especiales para ejercer su derecho a opinar desde otras entidades federativas. 

De igual forma,  activistas y organizaciones señalaron que además de la carencia de un marco institucional del INE que permitiera difundir y promover la participación de la ciudadanía en la consulta, los constantes actos de desacreditación por parte de exfuncionarios, medios de comunicación y expresidentes fue uno de los factores que infundió confusión entre la población e inhibió el ejercicio de sus derechos. 

Organizaciones sociales promoventes de la consulta han enfatizado en la necesidad de avanzar hacia la constitución de una Comisión de la Verdad en México para que la justicia y los derechos de las víctimas logren realizarse, pues no solo han sido los ex presidentes los responsables de las violencias estructurales, sino también empresarios, funcionarios, alcaldes, gobernadores, medios de comunicación y el crimen organizado.