11 abril, 2024
Por segunda ocasión, el colectivo Ojo de Agua comunicación organiza el festival El lugar que habitamos, un espacio diseñado para difundir los trabajos comunitarios y colectivos que se producen en los más diversos territorios de México y Centroamérica. ¿Quieres participar? Aquí te contamos cómo
Texto: Alejandro Ruiz
Fotos: El lugar que habitamos
CIUDAD DE MÉXICO. – En 2021, el colectivo Ojo de agua Comunicación culminó un sueño: organizar en Oaxaca el primer festival de radio y cine comunitarios, y fue todo un éxito.
El reto no fue menor, pues generar un espacio digno para la difusión de los trabajos sonoros y audiovisuales que producen las comunidades y territorios de todo México y Centroamérica, implica ir a contracorriente con una industria hegemónica que pocas veces voltea a ver este tipo de contenidos. Además, de que el atrevimiento fue en plena pandemia por el Covid-19.
Pero lo hicieron.
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Ahora, tres años después, con el reto de resolver la vida cotidiana y el sustento, los integrantes de Ojo de Agua lanzan la segunda edición de este festival que reivindica lo comunitario, sin los estándares que impone el mercado.
Sergio Julián Caballero, comunicador comunitario y organizador del festival, cuenta un poco sobre la importancia de esta segunda edición:
«Es importante la difusión, visibilizar las producción que realizan desde los territorios, desde las comunidades, los comunicadores y comunicadores comunitarios. Además, es importante dar a conocer historias y realidades que traten las temáticas que amenazan nuestras formas de vida».
Bajo los principios de la ayuda mutua, el trabajo colectivo, la reciprocidad y el caminar juntas y juntos, El lugar que habitamos abre su nueva convocatoria para recibir los trabajos de las personas, o comunidades, interesadas en participar.
Este Festival, comenta Sergio, «está dirigido, principalmente, a realizadoras y realizadores comunitarios de cualquier país, pueblo o territorio, de producciones sonoras o audiovisuales, a organizaciones o colectivos que hayan estado en contacto con algún proceso comunitario indígena o afrodescendientes».
Y agrega:
«La autorepresentación es algo que buscamos en este festival para contar desde nuestros territorios estas historias que existen, y que estamos viviendo día con día».
Sergio recuerda que el primer festival logró un impacto importante en comunidades rurales y ciudades de México y Mesoamérica, incluyendo en su catálogo 58 proyecciones en distintas sedes, algunas en la capital de Oaxaca y otras en el Centro Cultural de Teotitlán del Valle y otras comunidades. Así como la gestión de tres espacios radiofónicos en coordinación con la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.
Ahora, dice Sergio, están gestionando varias sedes en la capital oaxaqueña, la cual será la sede central del Festival, pero también en otros espacios comunitarios en las regiones de la mixteca, el istmo, la costa y valles centrales. Todo en Oaxaca, para después hacer una gira de proyecciones por Centroamérica.
«Es importante visibilizar las producciones que realizan los comunicadores y comunicadoras comunitarios desde los territorios, desde las comunidades», explica Sergio.
De acuerdo con la convocatoria del Festival, podrán participar las obras terminadas después del primero de enero
del 2022, y estar concluidas antes del 31 de mayo, que es cuando cierra la convocatoria.
Las temáticas en las que se podrá participar son: Género y disidencias; Tierra y territorio; Arte y cultura; Oportunidades de vida; Desde las infancias y juventudes; Memoria y archivo.
Además de la producción audiovisual, El lugar que habitamos es un festival que incluye la categoría de producciones sonoras, donde se podrán mandar trabajos en formato de cápsula, entrevista, serie, reportaje de investigación, crónica, radiodrama, sociodrama, radiorevista, radioteatro, radionovela, radioarte, cuento, leyenda, experimental, paisaje sonoro, declamación, poema y canción.
El comité seleccionador de los trabajos estará integrado por personas que forman parte de pueblos y comunidades indígenas y afrodescendientes que sean comunicadores y comunicadoras comunitarias, realizadores y realizadoras, activistas, académicos, expertas y expertos en los ejes de la convocatoria.
Para el caso de la categoría Desde las infancias y juventudes, el comité seleccionador será un comité infantil y juvenil, para evitar una visión adultocéntrica.
Al ser un festival que se mantiene lejos de los esquemas de competencia, El lugar que habitamos tiene como principio no dar premiaciones monetarias en ninguna de sus modalidades. Además, rechazarán toda expresión que incite a la violencia de género en contra de las mujeres y la comunidad LGBTI+.
Sergio, en su conclusión, explica el por qué:
«Somos un festival que apuesta a caminar juntas y juntos sin ninguna necesidad de llegar primero. Promovemos y ejemplificamos colaboración frente a competencia, comunidad frente a individualismo, compromiso frente a añoranza de fama, apostando por el sano equilibrio entre logros estéticos y compromisos sociales y políticos».
Periodista independiente radicado en la ciudad de Querétaro. Creo en las historias que permiten abrir espacios de reflexión, discusión y construcción colectiva, con la convicción de que otros mundos son posibles si los construimos desde abajo.
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