La secretaria de Salud de la Ciudad de México, Oliva López Arellano, afirmó para Pie de Página que se respetarán los derechos de los trabajadores del sector salud que transiten al IMSS-Bienestar. Sin embargo, aseguró que de no aceptar las condiciones, éstos tendrán que renunciar sin derecho a liquidación

Texto: Daniela Rea

Foto: Alexis Rojas

CIUDAD DE MÉXICO. – Trabajadores de la Secretaria de Salud de la Ciudad de México continúan en las protestas por la exigencia de mejores condiciones laborales en el proceso de transición al programa IMSS-Bienestar.

Los trabajadores organizados en el movimiento Galeno Salud Independiente y contratos afines reclaman salir de la precarización laboral, que se les respeten los derechos laborales, se reconozca su antigüedad, y se homologuen los salarios.

En entrevista con Pie de Página, la titular de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, Oliva López Arellano, dijo que se garantizarán sus derechos, pero ésto se hará paulatinamente, pues son 36 mil trabajadores en total.

“Hay un diálogo permanente, no se han cerrado las opciones de diálogo y nos interesa mucho que quede claro que vamos por la misma ruta de mejorar condiciones laborales, incrementar salarios y reconocer las antigüedades”, dijo en entrevista.

López Arellano señaló que los reclamos de los trabajadores serán atendidos. También aseguró que no firmarán un cheque en blanco en la transición hacia el IMSS – Bienestar.

“Todos estos trabajadores que son operativos en las unidades, se transfieren en bloque, incluso los basificados que están en unidades ambulatorias, centros de salud o unidad hospitalaria, se transfieren en bloque. Los basificados se transfieren con patrón sustituto, y los eventuales estarán firmando una contratación. El que firme van a mejorar sus condiciones, estos trabajadores de los que estamos hablando son trabajadores que no tienen estabilidad laboral o bajo salario o una condición precaria, eso va a mejorar. Los trabajadores van a mejorar sus condiciones laborales y prácticamente van a aceptar estar transferencia”.

-¿Y si no aceptan esas condiciones?

-Pues tendrían que renunciar, no habría liquidación. Ellos tienen condiciones precarias y por eso este proceso de compromiso y efectividad de sus contratos laborales.

La funcionaria señaló que las instituciones en la transición a IMSS-Bienestar están comprometidas con los trabajadores a:

Darles contrato permanente

Homologación salarial

Reconocimiento de su antigüedad en quienes han cotizado al ISSSTE.

A quienes no han cotizado en el ISSSTE por condiciones de precariedad laboral, serán prioritarios en las contrataciones definitivas.

Prestaciones de ley.

Las letras chiquitas

En respuesta, la trabajadora María, anestesióloga con 8 años de antigüedad e integrante del movimiento Galeno Salud Independiente y contratos afines, dice que esos compromisos tienen letras chiquitas.

“Tenemos 13 o más años con contratos irregulares y precarios en Sedesa. Al ingresar a IMSS-Bienestar solo se nos cotizarán 3 años en el ISSSTE, en vez de los que llevamos trabajando. Estamos peleando porque se nos reconozcan y se nos den las prestaciones y aumento de salarios del personal basificado antes de ingresar al IMSS-Bienestar, para que se tome en cuenta ese salario aumentado e inicie el tabulador con ese salario y no se nos contrate como personal nuevo, que es lo que quieren hacer”.

Sobre el reconocimiento de antigüedad, María señaló que este sólo será para quienes han cotizado al ISSSTE:

“Es un atropello para quienes no tienen prestación. Para formarte en la fila para tener una base para IMSS-Bienestar no hay fechas, el proceso de transición es para 40 mil trabajadores y el IMSS-Biestar dice que no tiene capacidad ni presupuesto para basificar a todos”.

María, trabajadora en Sedesa.

“Nuestras exigencias son antes de ingresar al IMSS-Bienestar para que no se nos contrate con el tabulador de un nuevo empleado”, insistió como parte del Movimiento.

Oliva López insistió que la labor del personal es esencial, y que ésta es reconocida por las instituciones; el personal pide que no se les reprima, como sucedió durante la protesta del lunes pasado en el Hospital Materno Pediátrico de Xochimilco donde fueron rodeados por granaderos.