¿Qué hay detrás de la detención de Eduardo Fernández, el exfuncionario zedillista al que Televisa acusó de extorsión?

26 febrero, 2024

Eduardo Fernández, ex presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. Foto: Rodolfo Valtierra/Archivo/Cuartoscuro

El 23 de febrero la Interpol arrestó por una orden de extradición al expresidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores durante el sexenio de Ernesto Zedillo, Eduardo Fernández García, el mismo que denunció a Televisa de lavado de dinero en 2022

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Rodolfo Valtierra /Archivo / Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO. -Todo inició con una carta anónima publicada en el Washington Post en 2016.

En el documento se acusaba que el vicepresidente ejecutivo de Televisa, Alfonso De Angoitia, y el de administración y finanzas, Salvi Foch, recibieron mil millones de dólares por vender infomerciales a partidos políticos y a algunos gobiernos estatales, así como al federal, en ese entonces presidido por Enrique Peña Nieto.

La acusación en la carta derivó en una investigación contra Televisa, que concluyó en que no había pruebas suficientes para sustentar los dichos.

Ese mismo año, De Angoitia apareció en la investigación de los Panamá Papers, por supuestamente haber lavado dinero a través de la compra de una empresa en las Bahamas. De Angoitia negó la acusación, y no se abrió ninguna investigación al respecto.

Años más tarde, en el 2022, Eduardo Fernández García, expresidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores durante el sexenio de Ernesto Zedillo, presentó una demanda ante la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos.

Fernández, quien también fue artífice del Fobaproa, acusó que Televisa (concretamente Emilio Azcárraga, Bernardo Gómez y Alfonso De Angoitia) lavó 40 mil millones de dólares entre 2008 y 2011. Nunca admitió que él haya enviado la carta, pero los dichos del documento y su denuncia son prácticamente los mismos.

El dinero, acusó Fernández, provenía del erario, y también “de actividades ilegales e ilícitas”, según explicó su esposa, Florencia Méndez, durante una entrevista en Aristegui Noticias.

Ahora, Eduardo Fernández García está detenido acusado de extorsión en grado de tentativa, después de que la Interpol ejecutara una orden de extradición en contra del exfuncionario que vivía en España.

De acusador a acusado

De acuerdo con la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México Eduardo Fernández intentó extorsionar a Televisa, a quienes les pidió 250 millones de pesos.

Su petición, de acuerdo a la Fiscalía capitalina, fue porque los directivos de Televisa dejaron de ser los clientes de una de sus empresas de servicios financieros: Diversity. Eduardo Fernández habría asesorado a Emilio Azcárraga, a De Angotia y Bernardo Gómez de 2009 a 2012, según la investigación judicial en curso.

Según detalles de la investigación, publicados por Proceso, Eduardo Fernández amenazó con denunciar la compra fraudulenta de un yate y un avión adquiridos por Televisa entre 2009 y 2011.

Y es que durante el sexenio de Enrique Peña Nieto la entonces Procuraduría General de la República ya había investigado la compra del yate. De hecho, en 2016 Eduardo Fernández declaró ante la autoridad que sus clientes (o sea, los ejecutivos de Televisa) no habían cometido ningún acto fraudulento en la compra. Su amenaza fue cambiar la declaración.

En el pasado, además de ser investigado por las irregularidades de la aprobación del Fobaproa en la época de Zedillo, Fernández estuvo involucrado en la venta de información confidencial a cambio de favores políticos, o beneficios económicos. Además, la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos tiene abierta una investigación en su contra, precisamente por las actividades sospechosas y reportes financieros engañosos de su empresa Diversity, fundada en Delware, Estados Unidos.

Periodista independiente radicado en la ciudad de Querétaro. Creo en las historias que permiten abrir espacios de reflexión, discusión y construcción colectiva, con la convicción de que otros mundos son posibles si los construimos desde abajo.