Docentes del programa PILARES denuncian hostigamiento y acoso laboral en su centro de trabajo. Han denunciado en los canales correspondientes, pero sus superiores y el Órgano Interno de Control desestiman las denuncias. Los trabajadores intuyen que es por el fin de sexenio

Texto: Isabel Briseño

Foto: Daniel Augusto / Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO.- Desde finales de 2023, Emmanuel Ávalos Huarte y Jessica Herrera Uribe han documentado una serie de incidentes que revelan un patrón de acoso laboral y mala conducta por parte de Ana Ivonne Rivas García, coordinadora del PILARES Virgilio Caballero, en Azcapotzalco.

Los incidentes van desde la difusión de rumores malintencionados, intromisión en la vida personal de los docentes, solicitud de reportes sin fundamento, y la organización de reuniones donde los afectados fueron atacados verbalmente por otros compañeros, presuntamente manipulados por la coordinadora.

Emmanuel y Jessica tienen 4 y 5 años, respectivamente, prestando sus servicios como docentes de PILARES. Su denuncia, como lo hemos documentado en Pie de Página, se suma a otras que el programa del gobierno de la Ciudad de México ha recibido desde el inicio de su aplicación, que van desde el acoso laboral, precariedad en las condiciones de trabajo e incumplimiento de las leyes laborales del país.

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Su caso es uno de muchos. Esta es su historia.

Vigilancia y castigo

A su caso se suma el de Jessica. A ella, la coordinadora Ana Ivonne le dio “consejos maternales”. El 5 de diciembre de 2023, Jessica envió una carta al Subdirector de Coordinación Académica en Ciberescuelas y al Subdirector Operativo Norte. En el documento, la tallerista denunció acoso y violencia de género. No le respondieron.

“La falta de profesionalismo y la difusión de rumores por parte de la coordinadora han generado un ambiente de trabajo insostenible. Nos sentimos constantemente vigilados y desacreditados”, explica Jessica.

Ante esto, Jessica envió otra carta, pero esta vez con copia al Órgano Interno de Control. 

La estrategia dio resultado, y en mayo la llamaron a una reunión donde participaron la titular de la Dirección de Educación Participativa y Comunitaria, Andrea Gabriela González Gutiérrez; el Subdirector de Coordinación Académica en Ciberescuelas, Edgar Fredy Jimeno Montiel; y Julio Alonso Reynoso, Subdirector Operativo Norte.

Los directivos le informaron que abrirían una investigación. Después, en junio, la llamaron a comparecer. Para esta comparecencia, Jessica solicitó que intervinieran dos testigos que reafirmaran su denuncia. Las autoridades, sin embargo, no han citado a nadie hasta el día de hoy.  

Los docentes han notado parcialidad por parte de las autoridades en la resolución del conflicto, un ejemplo es el caso de Emmanuel.  

El ataque colectivo

El 1 de diciembre de 2023, Emmanuel Ávalos presentó una carta de denuncia detallando el ambiente hostil al interior del PILARES donde trabaja. En la carta, anexó varios informes y solicitudes de reuniones con las autoridades correspondientes.

«Desde la llegada de la coordinadora Ana Ivonne Rivas García hemos experimentado un clima laboral hostil. Las denuncias de acoso y las acciones intimidatorias se han vuelto recurrentes, afectando no solo mi bienestar, sino también el de mis compañeros”, indica Emmanuel.

A pesar de las numerosas pruebas, incluyendo correos electrónicos, audios de reuniones y testimonios de otros beneficiarios, las respuestas de las autoridades, dice Emmanuel, han sido insuficientes.

Ante esto, en junio, Emmanuel solicitó una reunión al interior del PILARES Virgilio Caballero. Emmanuel resume la reunión:

“Fue una reunión muy rara, fueron otros ataques para nosotros los afectados”.

En la reunión también participó Jessica, y luego de 9 intervenciones seguidas de los más de 30 participantes, incluidos los distintos coordinadores, donde los agredieron verbalmente, ambos quedaron minados psicológicamente.

Para Emmanuele es muy claro que la participación de sus compañeros fue orquestada, ya que todos los posicionamientos, indica el docente, favorecieron a la coordinadora Ana Ivonne. 

“Es parte de su capital político que ha ido ganando gracias a los favores que les otorga, como el dejarlos faltar sin repercusiones”, denuncia Emmanuel.

Servidores de PILARES dejan pasar agresiones

Por otra parte, los docentes señalan que  dicha reunión no hubo ninguna moderación o intervención por parte de los servidores públicos coordinadores. Esto, permitió que los ataques verbales escalaran, sin que nadie los detuviera.  

Solo una compañera, recuerdan, alzó la voz a favor de ellos. Los reconoció como “los dos que más se desviven por la comunidad”. 

Luego de 4 horas de ataques constantes, la coordinadora, Ana Ivonne, descalificó las propuestas para mejorar al programa y las rutas de solución al conflicto.

Al siguiente día, Emmanuel, como Jessica, decidió denunciar acoso laboral ante el Órgano Interno de Control. Proporcionó audios, capturas de pantallas del chat de whatsapp del grupo de PILARES, así como los oficios que no le respondieron. 

Después de que Emmanuel presentó estas pruebas, entre las que estaba el audio de la reunión de 4 horas en la que los agredieron, algo extraño sucedió. El audio se filtró entre sus compañeros, violando la confidencialidad del proceso.

Emmanuel acudió a comparecer ante el Órgano de Control, y reclamó por la filtración.

Los funcionarios encargados de velar por su seguridad le respondieron que la filtración se podía deber a «un hackeo». También, le dijeron que, si quería, podía presentar su denuncia en la Comisión de Derechos Humanos y ante la Función Pública. 

Sobre esto, el tallista concluye:

“Son puras simulaciones de respuesta al tema, y eso molesta mucho. Pareciera que están alargando nuestros procesos hasta que se haga la acta de entrega de recepción a la nueva administración en los siguientes meses”.

Su caso sigue sin ser atendido.