Protestas, gritos y propuestas, los diálogos de Clara Brugada y Santiago Taboada en la Ibero

20 marzo, 2024

Clara Brugada, candidata a la jefatura de Gobierno por la coalición Sigamos Haciendo Historia (Morena, PT, y PVEM), durante su participación en el "Encuentro por la democracia" con jóvenes estudiantes de la Universidad Iberoamericana campus Santa Fe, para compartir su proyecto de gobierno. Foto: Mario Jasso / Cuartoscuro

En un diálogo organizado por la comunidad de la Universidad Iberoamericana, la candidata de Morena a la jefatura de gobierno, Clara Brugada, y el candidato del PAN, Santiago Taboada, respondieron a señalamientos, gritos y críticas de una de las universidades más caras del país donde, hace 12 años, nació el movimiento 132

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Mario Jasso / Cuartoscuro

Actualización 22 de marzo 2024

CIUDAD DE MÉXICO. – El grito lo escucharon todos: «Fuera Clara». Sus emisores: un grupo de estudiantes de la Universidad Iberoamericana que rechazaban la presencia de la candidata de Morena a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México.

Clara Brugada llegó a la Ibero como invitada a un foro titulado: Encuentros por la democracia, organizado por un grupo de trabajo de esa universidad: #DialogaIbero. Su apuesta es invitar a todas las candidatas que contienden para la Ciudad de México y la Presidencia este 2 de junio, con el afán de intercambiar visiones y dar a conocer propuestas.

O al menos, esa era la idea, pues el rechazo a la figura de Brugada era evidente en algunos grupos de estudiantes que con gritos y reclamos, confrontaron a la exalcaldesa de Iztapalapa.

“Este diálogo nos permite aclarar dudas. Nos permite debatir. Nos permite hacer un ejercicio democrático. Hacer este tipo de ejercicios es bueno y me alegra que lo desarrollamos”, dijo Brugada después de dos horas de responder a críticas hacia ella, Claudia Sheinbaum y el presidente López Obrador.

Ayotzinapa, la caída de la Línea 12, la inseguridad y hasta la gentrificación fueron algunos de los temas. Brugada respondió a todos, aunque a muchos no les gustó lo que dijo.

«No coincido con ustedes»

Esta fue una de las frases que Clara Brugada dijo a una estudiante que criticó la propuesta de la candidata de eliminar la evaluación Comipens para ingresar a la educación superior en la Ciudad de México y construir más infraestructura educativa.

Con todas sus propuestas y respuestas, la mayoría de los estudiantes reaccionó igual: gritando, cuestionando, presentando otros datos, que la candidata desmentía o refutaba desde el foro.

–¿Cómo vas a resolver la sequía? – preguntó un estudiante.

–Precisar que la sequía es generalizada, pero lo que tenemos en la Ciudad es escasés, y la vamos a atender con un proyecto metropolitano, en coordinación con el gobierno Federal y el de la maestra Delfina Gómez en el Estado de México, y mejorar la infraestructura.

–¿Cómo dices combatir la corrupción si compraste un terreno por 300 pesos? – preguntó otro estudiante, a quien sus mismos compañeros acusaron de pertenecer al equipo de campaña del candidato del PAN, Santiago Taboada.

–Ya lo respondí después del debate, pero no hay que dejarse manipular con información falsa. Ese documento que presentaron es el costo de la escrituración, no del terreno. Corrupción es comprar un departamento de 3 millones de pesos y vendérselo a uno de los proveedores de la Benito Juárez a un precio seis veces mayor.

Mietras Brugada respondía, un grupo de personas se manifestaba afuera de la Ibero reclamando la aparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Lo hacían coreando consignas en desorden, con capuchas, y sosteniendo una lona con el rostro de Brugada.

–¿Qué opinas de los normalistas que se están manifestando afuera del evento?–, preguntó una estudiante de octavo semestre de periodismo.

–Que yo siempre he marchado con ellos, y sigo exigiendo justicia–, respondió la candidata.

–Entonces pídele al presidente que los reciba–, reclamó la joven.

Brugada sólo sonrió, porque la moderación pidió pasar a la siguiente pregunta.

Horas después, el comité estudiantil de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa emitió un comunicado donde se deslindaban de la acción en la Ibero. También lo hizo el Centro Prodh, quienes han acompañado jurídicamente a los familiares. Acusaron la «instrumentalización de de las causa de víctimas con fines electorales».

Brugada, después, declaró entre líneas, que detrás de la protesta estuvo Santiago Taboada:

«Entonces, si los de Ayotzinapa no eran, ¿quiénes son los que se hicieron pasar por Ayotzinapa?, y que con máscaras y de esta manera, poco valiente, creo yo, hicieron esta manifestación. (…) Yo veo que después del debate alguien está muy enojado y trata de generar este tipo de condiciones, que no les van a salir, a como dé lugar quieren difamar, a fuerzas quieren que salgan mal las cosas y eso no va a pasar».

¿Qué condiciones? Tal vez, las mismas que hicieron correr a Enrique Peña Nieto en 2011, un hecho del que la Ibero se ufana.

Jóvenes protestan en uno de los accesos a la Universidad Iberoamericana Campus Santa Fe para exigir justicia por los 43 normalistas desparecidos, en donde Clara Brugada, candidata a la jefatura de Gobierno, por la coalición Morena, PT y PVEM, se reunirá con la comunidad estudiantil. Foto: Mario Jasso / Cuartoscuro

Del 132 al obradorismo, y ahora al desencanto de Morena

Hace 12 años la comunidad estudiantil de la Ibero hizo que el precandidato a la presidencia, Enrique Peña Nieto, saliera corriendo del auditorio.

Peña Nieto había asistido a la Universidad a un diálogo con estudiantes, similar al que sostuvo Brugada, pero en una respuesta cínica justificó la represión a los pobladores de San Salvador Atenco en 2006, cuando el priísta era gobernador del Estado de México. Y ahí se desencadenó la corretiza.

Después, con un video, Peña Nieto acusó que los estudiantes que protestaron eran infiltrados y opositores, y eso desató la solidaridad entre el grueso de las escuelas y jóvenes del país, quienes más allá de defender a la Ibero, cuestionaron a los regímenes priístas y panistas. Nació el #YoSoy132.

Su lucha se amalgamó con un amplio descontento en el país, y el 132 se diluyó entre amplias movilizaciones sociales protagonizadas por sindicatos, movimientos, comités de familias de personas desaparecidas y organizaciones políticas. El 132, en realidad, se convirtió en un fenómeno mediático, más que popular, y muchos de ellos, o al menos sus cuadros más visibles salidos de la IBERO, se sumaron al obradorismo, y consecuentemente a Morena. Un ejemplo: Antonio Atolini, hoy diputado por el partido guinda.

12 años después de esto los papeles parecen haberse invertido, y ahora, desde Santa Fé, la comunidad estudiantil de la Ibero se muestra reacia al gobierno de Morena, y todo lo que lleva esas siglas. Hablan de desigualdad, empobrecimiento e inseguridad desde una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de México. Desde una de las universidades más elitistas (por su precio e historia) que hay en el país.

–Soy estudiante de posgrado y soy de Tláhuac, aunque hace 10 años me fui a vivir a Iztapalapa. Fui a la Utopia Meyehualco, y es un gran proyecto. Me sentí muy segura. Pregunto: ¿Cómo incluir en estos espacios a la diversidad – cuestionó una joven, a la que nadie le aplaudió.

Brugada respondió vagamente: «Nosotros siempre vamos a caminar de la mano de la diversidad».

Después, otra serie de preguntas que Clara ya había respondido.

Al final, Brugada, en una entrevista con medios, reflexionó:

«Estuve contenta con el diálogo con un sector muy importante que son los jóvenes. Sobre todo con los jóvenes de una universidad con mucha trayectoria democrática, pero que también representan mucha pluralidad. Hubo total libertad de preguntas, de interactuar con su servidora, y yo creo que eso es parte de las campañas, ¿no?».

Antes de irse, una estudiante le gritó a Brugada: «Dile a Claudia Sheinbaum que también venga a dialogar». Brugada no respondió.

Taboada ¿Por qué no sancionaste al Cártel Inmobiliario?

Un día después de la visita de Brugada, el candidato del PRI-PAN-PRD a la jefatura de gobierno, Santiago Taboada, hizo lo propio en el mismo foro, pero con estudiantes distintos.

Aunque hubo algunos que corearon «Jefe de gobierno», el candidato también tuvo que responder a señalamientos sobre sus vínculos con el Cártel Inmobiliario, su posición contra el matrimonio igualitario y criticas a su machismo.

La primera pregunta fue: «Se le acusa de corrupción con cuestión al cártel inmobiliario, ¿Nos puede aclarar o decir lo que tiene que decir al respecto?”.

A lo que Taboada contestó que nunca le han probado nada, pero «es un problema, no lo estoy negando, pero no solamente existe en Benito Juárez”.  

“¿Cómo puedo yo como ciudadano confiar en que puedes combatir la corrupción y garantizar la vivienda digna en 16 alcaldías, cuando esto estaba pasando en tu gestión en Benito Juárez?».

Y Taboada evadió la respuesta, diciendo que hay responsables también dentro de las áreas de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Ciudad de México.

Después, una estudiante le recordó a Taboada que, en 2016, votó en contra de la aprobación del matrimonio igualitario en la Ciudad de México, y le cuestionó sobre cuáles serían sus propuestas para la comunidad LGBTI+. El candidato respondió que después, en 2017, él fue los diputados locales que aprobó la reforma.

 Otra estudiante lo increpó: “No me parece cómo le contestaste a mi compañera (…). Te voy a poner el balón otra vez, a ver si le contestas a las mujeres jóvenes que no te estamos gritando jefe de Gobierno”. 

Taboada no enunció nada en concreto, pero invitó a la estudiante a que escribiera la agenda para la diversidad sexual de su programa de gobierno, donde también participan Manuel Mondragón y Kalb, exsecretario de seguridad con Enrique Peña Nieto y abiertamente en contra del derecho a decidir, así como Federico Döring, exdiputado panista que rechazó la reforma del matirmonio igualitario en 2017.

Las estudiantes recordaron esto, y la acusación de que Taboada, en un chat particular, sexualizó a la secretaria de uno de sus colaboradores.

Periodista independiente radicado en la ciudad de Querétaro. Creo en las historias que permiten abrir espacios de reflexión, discusión y construcción colectiva, con la convicción de que otros mundos son posibles si los construimos desde abajo.