La Fiscalía General de la República obtuvo órdenes de aprehensión contra siete personas por el operativo «Rápido y Furioso», entre ellas están Genaro García Luna, Luis Cárdenas Palomino y Joaquín Guzmán Loera

Texto: Redacción Pie de Página

Fotos: Luis Cárdenas Palomino / Facebook

CIUDAD DE MÉXICO.- Este domingo la Fiscalía General de la República (FGR) informó que obtuvo órdenes de aprehensión en contra de siete personas por su participación en el operativo “Rápido y furioso”.

La dependencia confirmó que entre los implicados están los funcionarios calderonistas Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública, y Luis Cárdenas Palomino, jefe de División de Seguridad Regional de la Policía Federal. Además de Joaquín Guzmán Loera.

“En la investigación realizada por la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), se pudo establecer la presunta responsabilidad de Joaquín «G” quien, durante un largo lapso, fue líder de la organización delictiva destinataria de las armas.  Asimismo, se lograron las órdenes de aprehensión en contra de Genaro «G”, ex Secretario de Seguridad Pública Federal; así como de Luis «C”, Coordinador de Inteligencia de dicha Policía; y quienes se encuentran recluidos en prisiones de alta seguridad, tanto en Estados Unidos, como en México”, señaló la Fiscalía en un comunicado.

Rápido y furioso formó parte de la Iniciativa Mérida. El operativo inició en 2009, con conocimiento de los gobiernos de Estados Unidos y México, con Felipe Calderón en la Presidencia. Se trató de la entrada ilegal de más de 2 mil armas a México con la finalidad de posteriormente rastrearlas y supuestamente identificar los usuarios.

En 2010, sin embargo, el operativo fue cancelado después de que esas armas fueran identificadas en un tiroteo donde fue asesinado un agente de seguridad de Estados Unidos.

En octubre pasado, durante el anuncio del fin de la Iniciativa Mérida, el canciller Marcelo Ebrard enfatizó que el combate al tráfico de armas era una pieza importante del acuerdo bilateral entre los dos gobiernos con el objetivo de frenar la violencia.

“Ambos países afirmamos nuestro compromiso de trabajar juntos, con respeto a nuestras soberanías, para combatir el tráfico de armas, coordinando bilateralmente las actividades de detección e incautación de armas, considerando nuevas estrategias y fortaleciendo nuestros esfuerzos colectivos. Asimismo, reafirmamos la necesidad de dar continuidad a los esfuerzos actuales que se han implementado para disminuir el tráfico de armas de fuego que son vendidas en Estados Unidos y llegan a México, así como las acciones implementadas para identificar, apuntar e investigar los métodos de financiamiento, transporte y comunicaciones empleados por las redes de contrabando con el fin de interrumpir y desmantelar sus operaciones”.

La FGR agregó que de acuerdo con investigaciones del Departamento de Justicia de los Estados Unidos se pudo establecer que las armas introducidas ilegalmente a territorio mexicano fueron usadas en diversos delitos violentos en México, desde al año de 2009 hasta fechas recientes.

“Hemos sido informados que las autoridades norteamericanas se han encargado de investigar y deslindar las responsabilidades de los servidores públicos de aquel país. En México y de conformidad con una investigación propia, y con los datos adquiridos en las averiguaciones previas correspondientes, se pudo establecer que dichas armas no solamente fueron introducidas ilegalmente al país, sino que también han sido utilizadas en diversos actos criminales, que ya han sido investigados y procesados en México”.

FGR.

La FGR recordó que sobre Genaro García Luna existen ya dos órdenes más de aprehensión, dictadas por jueces mexicanos, lo que ha motivado su solicitud de extradición. García Luna es acusado en Estados Unidos de tener vínculos con el cartel de Sinaloa y enfrenta cargos de narcotráfico. La Fiscalía mexicana le acusa de lavado de dinero y desvío de recursos públicos.

El 5 de julio pasado, Luis Cárdenas Palomino fue detenido luego de ser imputado de delitos de tortura en contra de Mario Vallarta Cisneros, hermano de Israel Vallarta, y de su sobrino, Sergio Cortéz Vallarta, a quienes en 2012 se les acusó de formar parte de una banda de secuetradores llamada “Los zodiaco”; vinculada al polémico caso de Florence Cassez.

Cárdenas Palomino fue un mando de alto rango en la extinta Policía Federal y brazo derecho de Genaro García Luna. La historia del llamado “mejor policía de México” está llena de acusaciones por narcotráfico, tortura y fabricación de delitos a personas inocentes.