El presidente AMLO asistió a la inauguración de la fábrica de Nescafé en Veracruz. Por su parte caficultores advirtieron: «Nestlé no ha jugado un papel constructivo en la cafeticultura mexicana en beneficio de los productores y consumidores de café en México», y alertaron riesgos.

Texto:  Rodrigo Soberanes/La Marea

Foto: Rogelio Morales/Cuartoscuro

VERACRUZ.- La empresa transnacional Nestlé inauguró este sábado en Veracruz una fábrica de Nescafé e instaló un modo de producción agroindustrial de producción masiva con “alianzas” de miles de caficultores. La entidad es uno de los estados con mayores estándares de calidad de café. 

El presidente ejecutivo de Nestlé, Fausto de Oliveira Acosta, dijo en su discurso que la fábrica es un proyecto que le planteó al presidente Andrés Manuel López Obrador en 2018 cuando comenzaba su mandato y en esa ocasión hablaron de una inversión de 164 millones de dólares. 

Cuatro años después, la relación entre la empresa y el gobierno ha crecido sustancialmente, de acuerdo con las cifras reveladas por el empresario durante la inauguración de la planta en la comunidad de Santa Rita, en el municipio de Veracruz. 

“Logramos subir la inversión a 340 millones de dólares”, dijo el ejecutivo en presencia del presidente, con quien previamente había dado un largo recorrido dentro de la recién inaugurada fábrica, lo que retrasó casi una hora y media el inicio del evento inaugural. 

Con la puesta en marcha de la fábrica del café soluble Nescafé, la empresa Nestlé tiene planeado duplicar sus exportaciones de productos desde México, en conjunto con otras fábricas del país. Eso en cifras se traducirá en ventas por 600 mil millones dólares anuales en ventas, dijo Oliveira.

El ejecutivo de origen brasileño informó también que, con el objetivo de satisfacer sus necesidades de consumo para producir su café soluble, Nestlé tendrá alianzas con un total de 80 mil productores de café, que en el evento estaban representados por Margarita Pimentel, líder caficultora originaria del municipio de Tezonapa y unas 30 personas productoras que aplaudían cada anuncio que se daba durante el evento. 

Los reclamos

El pasado 4 de julio, productores de café de todo Veracruz emitieron un comunicado titulado: “Alto a los privilegios para la Nestlé y respeto a las organizaciones de productores”; esto con motivo de la inauguración de la planta de café soluble. 

“Nestlé no ha jugado un papel constructivo en la cafeticultura mexicana en beneficio de los productores y consumidores de café en México”, dice el documento, que está firmado por organizaciones como el Comité estatal sistema producto café de Veracruz, la coordinadora nacional de organizaciones cafetaleras y el Consejo Regional del Café de Coatepec. 

Las organizaciones señalaron que Nestlé “compite de manera desleal y desplaza el café mexicano en el consumo nacional. Nestlé y sus compradores dominan la comercialización del café mexicano, en un esquema que afecta a los productores”, señalaron.

Las organizaciones señalaron que el café mexicano se exporta a menor precio que otros países; “y esto es debido a que los productores revuelven más el café (esto le resta calidad drásticamente) cuando esto es realizado por las mismas compañías al no realizar pagos mayores por los cafés de mayor calidad”. 

La postura del presidente López Obrador no coincide con la de los cafeticultores que emitieron el comunicado. En su discurso, el mandatario celebró que la fábrica cuente con trabajadores contratados por su gobierno bajo el programa Jóvenes Construyendo el Futuro. 

Dijo también que hay productores apoyados por el programa Sembrando Vida que producen para Nestlé y que en caso de que ese programa no continúe en 2024 –cuando él deje el poder– los beneficiarios que siembren otros cultivos podrán comenzar a sembrar café para la Nestlé “con las nuevas tecnologías” para sostener a sus familias. 

“Cuando era niño Nestlé compraba la leche en mi pueblo”, dijo el presidente, quien fue muy enfático en la buena relación que tiene con la Nestlé desde que el propio Oliveira  se reunió con él en Palacio Nacional en 2018 para hablar de la nueva fábrica. 

López Obrador señaló que la fábrica de Nescafé comprará su producción a “casi 100 mil productores mexicanos”, una cifra dispar con la de Oliveira, quien había informado que la transnacional a su cargo trabajará con 80 mil productores: 20 mil menos que la cifra del presidente. 

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Cantidad, no calidad

El productor veracruzano, Roberto Licona, ganador en diversas ocasiones de la Taza de Excelencia en México, sosteniendo altos puntajes para estándares internacionales en cada una de sus cosechas, dijo que cafés con la calidad del suyo (La Herradura) hasta el momento no interesan a la empresa transnacional”.

“La calidad de café que puede producir La Herradura, hasta ahora no ha tenido demanda de Nestlé, sin que quiera decir que puede tenerla. Nestlé también maneja cafés especiales o diferenciados. La nueva planta de Veracruz, con una demanda de 20 mil toneladas anuales, será imposible cubrirla con la producción de México. Además de que sería café Robusta e importado”.

“Sin embargo, puede ser una oportunidad para productores mexicanos de esta especie, de convertirse en proveedores de Nestlé, negociando convenios justos que reconozcan el trabajo del cafeticultor, que apoye al desarrollo local y reducción de importaciones”, dijo Licona a La Marea.  

Oliveira adelantó que Nestlé invertirá 640 millones de dólares en todas sus plantas ubicadas en México, lo cual significa que la empresa invertirá 50 por ciento más en México que en sexenios anteriores. 

*Este trabajo fue realizado por LA MAREA, que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes ver la publicación original.