20 septiembre, 2023
El hallazgo ocurrió a través de la denuncia de un usuario de redes sociales, y las autoridades locales ya presentaron una denuncia. Retener a las tortugas amarradas de los manglares es para mantenerlas frescas, en tanto surge un posible comprador para alguna comida derivada de esta especie
Texto: Josué David Piña Valenzuela (con información de César Hernández) / Revista Espejo
Foto: Especial
SINALOA. – El usuario de X, @rafael_q22, denunció este domingo el hallazgo de un presunto ‘cementerio’ de tortugas marinas en la bahía de Altata, en Navolato.
En una serie de videos compartidos en la red social, el usuario que se hace llamar Rafita Quesadilla, muestra el rescate de un ejemplar aún con con vida que estaba asegurado a un manglar mediante un aro de metal que le atravezaba el caparazón a la altura de la cola.
Encontramos un cementerio de tortugas en Altata, pedimos su ayuda para dar con los responsables! @noroestemx @CesarArmandoVa9 @noticieristas @luznoticiasmx @sinaloagobmx @SEMARNAT_mx @sspsinaloa1 @PROFEPA_Mx @rochamoya_ @eldebate_com 🐢🤯🪦 pic.twitter.com/DXoaiLposb
— Rafita Quezadilla (@rafael_q22) September 17, 2023
En otro de los videos, se observa al peresonal de la Profepa revisando el lugar, y al mismo tiempo confirman el hallazgo de varos restos de tortugas que no lograron sobrevivir, por lo que tanto el usuario como las autoridades presumen que este sitio ubicado en la bahía de Altata es utilizado como una zona ilegal para mantener cautivas a estas especies en peligro de extinción.
El usuario pidió ayuda de la ciudadanía y los medios para dar con los responsables de este crimen ecológico, y a las autoridades exigió investigar y sancionar este acto ilegal.
Protección Civil de Navolato presentó una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) por el caso de un supuesto cementerio de tortugas marinas en Altata, justo en frente de una zona residencial.
La noticia se hizo viral en redes sociales luego que se compartiera un video donde unos ciudadanos logran rescatar a una tortuga que se mantenía amarrada con un alambre que atravesaba su caparazón, mientras que en los alrededores yacía otra muerta.
La directora de Urbanismo y Gestión Ambiental de Navolato, Cristian Díaz, informó que desde que es supo la situación comenzaron a coordinarse con autoridades federales, comentando que la denuncia y evidencia recabada hasta el momento por Profepa se envió a la Ciudad de México para dar seguimiento a la investigación del delito.
Al mismo tiempo, aseguró que la dependencia a su cargo comenzó a fortalecer los recorridos de inspección en la zona, en la espera de las investigaciones de las autoridades correspondientes.
“Luego de un recorrido por parte de las autoridades federales y municipales se encontró otra tortuga en estado de descomposición”, informó.
El biólogo jubilado de la UAS y uno de los máximos activistas en defensa de esta especie marina en Sinaloa, Fernando Enciso Saracho, informó que en México todas las tortugas marinas se encuentran en veda permanente desde 1990, disposición que no permite que se haga nada contra ellas o con sus huevos.
“A mí me han incluso llevado a la cárcel por estudiarlas y tocarlas. Entonces, ahí deben de aplicar la ley, hacer una investigación, quién puso los alambres o esa trampa para que quedaran ahí atrapadas las tortugas”, opinó en entrevista con Espejo.
Pese a esta restricción federal, informó que desafortunadamente en Altata, así como en otras partes, se sigue pescando clandestinamente tortugas. Como activista, aseguró que en cualquier campo pesquero de Sinaloa alguno que otro pescador se dedica a eso.
“Pero las autoridades lo saben perfectamente, Profepa sabe que sucede eso pero no hace nada, esa es la realidad”, criticó.
“Ellos no actúan sino hay una denuncia, con eso se la sacan, pero cuando uno hace la denuncia tampoco hacen nada. Es una dependencia inoperante. Está mal la ley ahí, en este caso los que deben de aplicarla”, continuó.
Por su parte, el doctor Irmar Sosa Cornejo, director de la Facultad de Biología de la UAS, detalló que esta práctica de retener a las tortugas amarradas de los manglares es para mantenerlas frescas, en tanto surge un posible comprador para alguna comida derivada de esta especie.
“Ya desde el momento que le estás causando daño a la tortuga es porque vas sobre una pieza en específico”, señaló.
Para mitigar esta mala costumbre, el académico mencionó que se ha venido trabajando con las comunidades pesqueras, asegurando que todas están enteradas de que es ilegal hacer eso, además del estatus en que se encuentran las tortugas marinas.
Incluso precisó que en el área del Altata, particularmente en la Península de Lucenilla hasta Yameto, existe un equipo de monitoreo que se dedica al registro de nidadas de tortugas para protegerlas de la depredación por coyotes y de vez en cuando por humanos.
Explicó que este es un convenio entre la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), directamente con integrantes de las comunidades pesqueras para formar estas cuadrillas.
Esta nota fue publicada originalmente en REVISTA ESPEJO, que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes ver la publicación original.
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