Contrario a la política promovida por el gobierno federal, congresos estatales con mayoría de Morena han aprobado más endeudamiento y nuevos impuestos. El presidente dijo que la austeridad debería ser generalizada pero que la Federación no puede imponer nada a los estados
Texto: Reyna Haydee Ramírez
Fotos: Daniel Lobato
La política de no endeudamiento, finanzas sanas y austeridad que aplica el gobierno federal debería ser un hecho también en los estados, pero no se le puede imponer a los gobernantes locales, indicó el presidente López Obrador.
En la primera conferencia matutina de este 2020, el mandatario se refirió a los estados como Sonora, que incluyó una deuda de mil 300 millones de pesos en el paquete fiscal 2020, y Baja California, que autorizó nuevos impuestos.
La deuda de mil 300 millones de pesos de Sonora es la segunda que solicita la gobernadora Claudia Pavlovich en su sexenio, la primera al inicio de su gestión y fue por 5 mil millones de pesos.
«Tiene que haber austeridad de Estado, no solo tiene que ser el gobierno federal, tienen que ser los gobiernos estatales, los gobiernos municipales, todos tenemos que hacer un esfuerzo», señaló.
El presidente puso como ejemplo a Tlaxcala que por ley no se endeuda, desde hace varios sexenios.
“Debe haber una política de cero deuda, austeridad, honestidad en todo el país, pero estamos iniciando nosotros y yo pienso que los estados van a hacer lo propio, pero no se les puede imponer nada”, externó.
A pregunta expresa de Pie de Página, el presidente dijo que algunos estados recibieron arcas vacías y han tenido que ayudarlos con adelanto de participaciones.
“Sin estar justificando a Sonora, es tanta la deuda que tienen (algunos estados) que no les alcanza ni para pagar la nómina.
“Están algunos estados en situación tan delicada, les dejaron tan mal las finanzas, que no están haciendo obra”, expuso.
La crítica situación que viven, argumentó, no es toda culpa de sus gobernantes, sino de administraciones pasadas.
“Recibieron una situación muy difícil, apenas para pagar la nómina, no pagan la luz, no pagan agua, son los saldos de la política neoliberal”, enfatizó.
López Obrador destacó como uno de sus mayores logros que en su primer año no hubo endeudamiento del gobierno federal.
El presidente lamentó la responsabilidad de legisladores de Sonora, en particular de la fracción de Morena, que actuaron contrario a la política nacional de no endeudamiento y austeridad.
“En el caso de los legisladores si argumentan que alguien les dio una instrucción (para votar a favor de la deuda) pues entonces de qué están hechos?”, cuestionó el presidente.
Estas actitudes de los legisladores no son nuevas, dijo, pero lamentó que sigan a pesar del cambio que promueve el gobierno federal. En el caso de Sonora, Morena ganó 20 de las 21 diputaciones en la elección de 2018.
“No es nuevo, si acaso se lamenta de que no cambie, en algunos estados, esta práctica…(sic) es lamentable que habiendo un cambio estas prácticas continúen, ya se tienen que eliminar”, manifestó López Obrador.
En el caso de Sonora, el 24 de diciembre en sesión extraordinaria, los diputados votaron la Ley de Ingresos 2020 en menos de dos minutos, sin leer ni discutir el proyecto de Ley en el Pleno, obviando todo procedimiento.
La aprobación requería las dos terceras partes, que las tenía el PRI con el PAN y Movimiento Ciudadano y con los legisladores del PT y PES, estos últimos antes aliados de Morena.
López Obrador señaló que la asignatura pendiente en su gobierno para el año que inicia es parar la violencia.
«Tenemos que arrancar de raíz ese mal y creo, estoy convencido, que lo mejor es atender las causas, que no se abandone a los jóvenes como se hizo de manera irresponsable durante todo el periodo neoliberal, que se les dio la espalda a los jóvenes, que sólo se les llamó, ninis, y no se hizo nada por ellos», dijo.
Una de las prioridades de la estrategia federal para contener la violencia, dijo, es atender a los jóvenes para que no sean enganchados por bandas delincuenciales.
Tenemos que abrazar a los jóvenes, atraer a los jóvenes hacia nosotros para que no los enganchen, para que no los atrapen las bandas. Esa es la estrategia principal: que podamos atraer a los jóvenes, darles opciones de trabajo, opciones de vida sana, darles alternativas.
El mandatario enumeró cuatro puntos específicos contra la inseguridad: atención a los jóvenes, priorizar el trabajo de inteligencia sobre el uso de la fuerza, consolidar la Guardia Nacional con 100 mil elementos y no permitir el contubernio entre autoridades y delincuentes.
«Tenemos también confianza de que vamos a ir serenando al país, porque no vamos a permitir el contubernio, la asociación delictuosa, no vamos a permitir que se unan autoridades con delincuentes. Son dos campos distintos».
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