Integrantes de pueblos del lago de Texcoco presentaron el proyecto Manos a la Cuenca, que busca una recuperación integral de la zona. En conferencia, denunciaron que la propuesta presentada por el el gobierno federal no garantiza conservar la cuenca y excluyó su propuesta. Exigieron ser incluídos en la definición de lo que sucederá en su territorio

Texto y foto: Daliri Oropeza

El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de Atenco, que ha defendido por más de 20 años su territorio contra la imposición de un aeropuerto en Texcoco, presentó este martes el Proyecto Manos a la Cuenca. Se trata de un plan que contempla la restitución, resarcimiento y compensación de daños para la conservación comunitaria del territorio -desde las montañas hasta el Valle-, después de la cancelación del megaproyecto.

Junto con la Coordinadora Yo Prefiero el Lago, que agrupa a los pueblos afectados por el NAIM (Nuevo Aeropuerto Internacional de México), informaron en conferencia de prensa que desde hace más de un año le mostraron este proyecto al gobierno federal, en mesas de negociación en las que participaron Conagua, las secretarías de Gobernación, Medio Ambiente y Desarrollo Territorial y Urbano, además de la Comision Nacional de las Áreas Naturales Protegidas.

Sin embargo, las mesas fueron suspendidas por la pandemia de covid-19 y el gobierno federal no contempló el proyecto de la comunidad para realizar la propuesta que presentó Conagua el pasado martes 27 en la conferencia presidencial.

La propuesta oficial se llama Parque Ecológico Lago de Texcoco (PELT). Iñaki Echeverría, encargado del proyecto, postuló un parque urbano de uso público con actividades recreativas para los citadinos en más de 4 mil 800 hectáreas. Aseguró que la gente lo podrá visitar los domingos para hacer carreras, caminatas o picnics.

Por su parte, la directora de Conagua, Blanca Jiménez, aseguró que el lago ya está desecado.

Representantes de los pueblos que están a lo largo de la rivera del Lago de Texcoco explicaron que lo que ellos buscan es un plan integral, que comience por resarcir la devastación provocada para restaurar la cuenca en su totalidad. No solo la zona del Lago, sino toda la cuenca, desde las montañas, donde nacen los 9 ríos y desembocan en la zona del lago de Texcoco y toda la zona del Valle de México.

Bernardino Cruz habitante de Atenco e integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) denunció:

“Este proyecto de PELT se queda corto, porque no alcanza a ver ni a escuchar las voces que a lo largo del año pasado con este gobierno y desde hace 20 años hemos expresado los pueblos”.

“Hemos advertido que estos megaproyectos afectarían el ambiente físico, social cultural y de desarrollo del Valle de México. Preservar ese espacio natural que aún tenemos del lago es preservar la vida en toda la región”, dijo el comunero.

Agregó: “En Atenco, la afectación de lo que construyeron de aeropuerto fue muy amplia y directa en la cuestión de la agricultura. Nuestros pueblos desde siempre conviven con el lago. Fuimos creciendo una agricultura campesina, orgánica, que preserva la naturaleza y esos espacios que por 20 años hemos defendido con todo, con nuestras formas, poniendo nuestros cuerpos con estos gobiernos represores.”.

Las diferencias

El PELT, advirtieron no garantiza la conservación integral de la cuenca de México en términos ecológicos y bioculturales ni recoge la propuesta e inquietudes de los pueblos. Además, abre la puerta a la urbanización del último cinturón de protección natural de la región.

“A diferencia del PELT, Manos a la Cuenca ofrece una respuesta integral a la necesidad urgente de proteger la región desde las formas de vida y los conocimientos de los pueblos”, afirmó Adela, habitante de Atenco e integrante del FPDT.

La propuesta presentada por Conagua “busca crear una zona de restauración a través de un proyecto urbano”, mientras que “los pueblos proponemos una concepción distinta de preservación: un Área Natural Protegida que llamamos Área de Protección de la Vida que busca que el área preserve su vocación natural, como sus características físicas, hidrológicas, arqueológicas y agrícolas”.

En contraparte, el PELT pretende construirse en fragmentos de tierras y no cuentan con certeza jurídica, además de que no pone un alto a la construcción de la autopista Peñón Texcoco. “Es un proyecto que da continuidad a la privatización del territorio común”, lamentó.

Para diseñar el proyecto, habitantes y campesinos que conforman el FPDT hicieron un diagnóstico interdisciplinario, acompañados por científicos, especialistas con él plantean la restauración del territorio, no solo del lago.

Su proyecto busca la restitución de la tierra y la compensación ecológica.

“Estamos a tiempo de que nos escuchen”

Los comuneros exigieron que se pueda trabajar en conjunto con el gobierno para conservar la vida de la región.

“Estamos en buen tiempo de ser escuchados. Les proponemos que se revisen una de las tantas minutas de reuniones que se han hecho. se han llevado a cabo acuerdos que no se han cumplido”, dijo Ignacio del Valle.

Los campesinos denunciaron que continúa la construcción de la autopista pirámides Texcoco, parte del NAIM, que se había acordado suspender. Además, el Ejido de Tocuila tiene una suspensión definitoria de la autopista en su territorio.

Señalaron que aún está el daño ambiental causado por 200 minas legales (y 100 ilegales) de tezontle que usaron para rellenar las pistas —ahora inundadas— de los pueblos en el perímetro de la construcción del exaeropuerto.

Aquí puedes revisa el proyecto completo de Manos a la Cuenca