«Que muera la avaricia y que viva el amor», gritó López Obrador en el Zócalo, antes de agregar en la lista de héroes a «nuestros hermanos migrantes». Al día siguiente, en el desfile militar, el secretario de la Defensa Nacional reiteró la lealtad del Ejército a las instituciones

Texto: Kau Sirenio

Fotos: Isabel Briseño y Alexis de la Cruz

CIUDAD DE MËXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador incorporó nuevas arengas en su penúltimo Grito de Independencia. Si el año pasado sorprendió con la condena a muerte de la corrupción, el clasismo y el racismo, para este 15 de septiembre agregó a esa lista la avaricia y la discriminación. Además, sumó dos vivas a su arenga: al amor y a los hermanos migrantes.

Este año, el presidente también rompió el protocolo de convocar a los representantes del Congreso y de la Suprema Corte de Justicia a las ceremonias oficiales por el 213 Aniversario de la Independencia.

«Es una representación del gobierno, del Ejecutivo, muy limitada y austera, nada de la parafernalia de antes”, respondió el miércoles 13, en su conferencia diaria, a la pregunta sobre la falta de invitación a los poderes legislativo y judicial.

¡Viva el amor!

El viernes, ante la multitud que lo aclamó en el Zócalo y que antes aguantó un fuere aguacero, López Obrador repasó la lista de héroes que tradicionalmente están en la fiesta cívica -Miguel Hidalgo y Costilla, Josefa Ortiz de Domínguez, Ignacio Allende, Leona Vicario, José María Morelos y Pavón, Vicente Guerrero- y de todas las consignas que ha ido incorporando cada año de su gobierno: los héroes anónimo, la libertad, la igualdad, la justicia, la democracia, la soberanía, la fraternidad universal, los pueblos indígenas y la grandeza cultural de México.

Luego remató:»Mexicanas, mexicanos: ¡Que muera la corrupción! ¡Que muera la avaricia! ¡Que muera el racismo!
¡Que muera la discriminación! ¡Que viva el amor! ¡Que vivan nuestros hermanos migrantes!»

Hace una semana, durante la Conferencia Latinoamericana y del Caribe sobre Drogas realizada en Cali, Colombia, y a la que asistió el mandatario mexicano, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, declaró que el amor es el mejor antídoto contra el consumo de drogas.

Pero López Obrador ya hablaba del amor desde su campaña presidencial de 2012, cuando propuso las bases para crear una República amorosa, que seis años después resumió en una frase: «abrazos, no balazos».

Los hermanos migrantes

Las vivas a los hermanos migrantes ocurren en un momento en que el gobierno mexicano enfrenta la mayor cifra de solicitudes de refugio.

Apenas el martes 12, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) presentó un informe que declara la frontera entre México y Estados Unidos la ruta migratoria terrestre más mortífera del mundo, con 686 muertes y desapariciones de personas migrantes durante 2022. Y el jueves 14, fueron hallados 350 migrantes en un remolque de Veracruz, la mayoría guatemaltecos.

Pero no son las personas en tránsito por México a las que López Obrador se refería. Para el mandatario,, los migrantes mexicanos en Estados Unidos son héroes que han dado oxígeno a la economía con el envío de remesas.

El festejo del Grito de Independencia fue precedido por la participación de Semilleros Creativos, Yahritza y su esencia y Grupo Frontera.

Absoluta lealtad

Este años, el desfile cívico-militar tuvo como protagonistas a los cadetes del Heroico Colegio Militar, que acaba de celebrar su bicentenario. En el evento previo, el único orador de la ceremonia fue el general secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval González, quien habló de la unidad nacional para avanzar en la construcción de una patria para todos y refrendó el compromiso de las Fuerzas Armadas con las instituciones democráticas del Estado y al pueblo mexicano.

“La historia nos ha enseñado que para hacer frente a cualquier adversidad, se tiene que fortalecer la unidad nacional. Está comprobado que somos más fuertes si actuamos de manera conjunta, si promovemos el esfuerzo colectivo, rasgo solidario que desde siempre nos ha identificado como mexicanos“, pidió el militar a los mexicanos.

“Las Fuerzas Armadas han tenido claro estos preceptos con los que han participado en cada una de las etapas de la historia que marcaron el rumbo del país, así lo hemos hecho y así lo seguiremos haciendo, con la firme premisa que guía nuestro actuar: la absoluta lealtad en los momentos críticos del acontecer nacional, lealtad a las instituciones democráticas, de nuestra propia institución, pero sobre todo la firme lealtad al pueblo de México”.

Las palabras del general provocaron fueron bien recibidas entre quienes se encontraban en las gradas para presenciar la ceremonia militar y que en automático corearon la frase acuñada en la campaña presidencial de 2006: “Es un honor estar con Obrador”