El ingeniero José Antonio Robledo fue desaparecido el 25 de enero del 2009, cuando trabajaba para la constructora ICA Fluor. Doce años después, el juez a cargo de la investigación sentenció a tres de los cuatro responsables del crimen
Texto: Redacción Pie de Página
Foto: Tomada de video de Fuerzas Unidas por Nuestros
Desaparecidos en Coahuila.
CIUDAD DE MÉXICO.- Doce años después de que José Antonio Robledo fuera desaparecido en Coahuila, el juez a cargo de la investigación sentenció a 3 de los 4 responsables del crimen.
La sentencia, sin embargo, no fue por el delito de desaparición, sino por secuestro, delincuencia organizada, portación de arma prohibida y delitos contra la salud.
José Antonio fue desaparecido el 25 de enero del 2009, cuando trabajaba para la constructora ICA Fluor, a cargo del Proyecto El Fénix. Desde el inicio la empresa ICA negó apoyo para la búsqueda y obstaculizó el trabajo de Guadalupe Fernández, su madre, y José Antonio Robledo Chavarría, su padre, por encontrar a su hijo.
Desde ese día de enero han emprendido la búsqueda de su hijo. La Fiscalía General de Coahuila inició una investigación, sin embargo no hizo nada. Entonces la familia puso una denuncia ante la SEIDO, a nivel federal, y dos años después lograron la primera orden de aprehensión contra cuatro de los responsables, y éstos fueron detenidos en el año 2011.
La sentencia se dio el 14 de abril pasado. A dos de los imputados se les sentenció por secuestro y delincuencia organizada; al chofer que hacia el transporte a los ingenieros de ICA les dieron 31 años y un mes; a otro le dieron 24 años y 10 meses de prisión y a un tercero le dieron cuatro años y 3 meses, pues le quitaron el delito de delincuencia organizada.
“Faltó una persona por sentenciar y muchos están prófugos. Sabemos que la sentencia no queda firme, que los abogados de los imputados interpondrán recursos, sólo confiamos en que se confirme la sentencia”, señalaron Guadalupe y José Antonio, en un comunicado.
“No nos arrepentimos de denunciar, de colaborar desde el primer día con las autoridades y confiar en las leyes de México, de darle un sentido a nuestra vida al buscar la Verdad y Justicia. Para nosotros ha sido una noticia esperanzadora. Falta lo prioritario que es encontrar a nuestro hijo. Confiamos para las personas en nuestra condición sea de aliento para seguir y no claudicar hasta no lograr encontrar a nuestros seres queridos y que paguen los perpetradores de esta atrocidad que cometieron con nuestros familiares”.
Otro de los vinculados al proceso fue el jefe de seguridad de la empresa, quien falleció en el año 2018.
El 25 de enero de 2009 José Antonio hablaba por teléfono con su novia, mientras manejaba su auto en Monclova, cuando ella escuchó cómo personas lo abordaban de manera violenta, le obligaron a detener el auto y lo golpearon, después la llamada se cortó.
Paris Martínez publicó en Animal Político entrevistas con los padres de Toño, quienes explican qué pudo originar la desaparición: “La razón de que desaparecieran a Toño, mi hijo, fue para castigarlo porque tuvo la mala fortuna de enterarse de los malos manejos de ICA en el Proyecto Fénix”, dijo el señor José A. Robledo, padre del ingeniero, al reportero. En específico, escribió Paris Martínez, el señor Robledo se refería “al contubernio de directivos de ICA con Los Zetas, grupo criminal al que no sólo le permitían lavar dinero con la obra del Proyecto Fénix, sino también extorsionar a proveedores y contratistas”.
La familia Robledo Fernández ha sido acompañada por el Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios y Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila.
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