Las medidas anunciadas por el gobierno de la Ciudad de México buscan regular el servicio de transporte en autos privados a través de aplicaciones de teléfonos inteligentes, como Uber o Cabify. También, emparejar las condiciones entre estos servicios y los de taxis convencionales
Texto: Arturo Contreras Camero
Foto: María Fernanda Ruiz
Los conductores de autos que dan servicio de transporte a través de aplicaciones, como Uber y Cabify, tendrán que tramitar una licencia tipo E1 (que antes no existía), pasar una revisión anual de sus unidades para poder seguir brindando el servicio y someterse a un examen médico y de manejo, anunció hoy el secretario de Movilidad, Andrés Lajous.
Estas medidas, de acuerdo con el funcionario, buscan poner «un piso parejo» de operación y de requisitos tanto para los choferes de aplicaciones como para los taxistas.
“Las empresas van a tener que pagar la revista igual que la pagan los taxistas”, aseguró en una intervención la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, “no puede ser que los que usan una aplicación no la paguen y los taxis sí”.
Con la implementación de estas medidas, las autoridades locales pretende crear un padrón de todos los autos que prestan el servicio privado de transporte de pasajeros, que hasta ahora no existe.
“Tenemos ahorita 141 mil concesiones de taxi en la ciudad. Eso no necesariamente quiere decir que todos esos taxis estén operando”, aseguró el secretario de Movilidad. “De las últimas revistas y los datos que tenemos, de donde se va a reconstruyendo un padrón, estamos hablando de alrededor de 110 mil”.
La lógica de la revista vehicular también cambiará a partir de mayo, pues en vez de realizarse en uno de los dos centros autorizados que existían en la ciudad, se podrá hacer en cualquiera de los 52 verificentros que existen, con una previa verificación de documentos que se deberán subir a la plataforma en línea de la Secretaría de Movilidad.
Según anunció de Lajous, la dinámica de la revisión se cambió para facilitar el trámite y evitar actos de corrupción.
“Aunque llevaras la unidad bien, siempre había algún tipo de mordida”, se queja César Pérez, un taxista que circula sobre Paseo de la Reforma. “Aunque tu carro lo llevaras al 100, no trajeras ni un rayón y cumplieras con todo, siempre tenías que dar por lo menos 500 pesos. ¿Que traes vidrios polarizados? Pues obviamente te aumentaba el precio, y así iba subiendo”.
Las medidas, explicó Lajous, buscan terminar con estas prácticas que se llegaban a cobrar hasta en 6 mil pesos y facilitar el trámite.
“No es tan fácil, porque es ir, formarte, desvelarte, si alcanzabas bien, y si no pues regresa al otro día y si llevabas tu documentación completa, te regresaban porque te faltaba esto y entonces vuélvete a formar, no era fácil”, recuerda César, emocionado porque ya no va a tener que pasar ese suplicio anual.
“Muchas veces dejábamos de pasar la revista por la necesidad de ponerte a trabajar, de estar perdiendo el tiempo. Si de todas maneras voy a desperdiciar tiempo ahí, mejor pago la revista con recargo y me quedo trabajando más”.
Los funcionarios rechazaron que las nuevas medidas sean recaudatorias, sino que se trata, dijeron, de poner orden en el transporte. Estas medidas no buscan, de ninguna manera, ser recaudatorias, dijeron ambos funcionarios, sino que son pasos para poner en orden el transporte en la ciudad.
Para los conductores que laboran a través de las aplicaciones móviles, el costo de la revista deberá ser cubierto por las empresas. s.
Para Arturo Gómez, conductor de Uber, las medidas están bien, aunque no sabe qué tanto lo vaya a respetar la empresa. “
“Espero que Uber sí lo vaya a absorber, porque si no sería un gasto más. Entre lo que te quita el mantenimiento del auto, y todo lo que va saliendo, si llegas a chocar y demás cosas, pues sí es un problema”, dice el conductor.
Además de las medidas ya mencionadas, los conductores de servicios de transporte privado por aplicaciones también deberán cumplir con los siguientes requerimientos:
El vehículo deberá tener un costo de factura de origen de al menos 250 mil pesos, no podrán recibir pagos en efectivo o a través de tarjetas prepagadas que no sean bancarias ni realizar base o sitio para la prestación de servicio.
Respecto a fideicomiso al que se va el uno por ciento de los costos de viaje que se realizan a través de estas aplicaciones, la jefa de gobierno aseguró que se mantendrá y que espera eventualmente elevarlo, pues en ciudades como Sao Paulo, Brasil, es de hasta el 40 por ciento del costo del viaje.
Periodista en constante búsqueda de la mejor manera de contar cada historia y así dar un servicio a la ciudadanía. Analizo bases de datos y hago gráficas; narro vivencias que dan sentido a nuestra realidad.
Ayúdanos a sostener un periodismo ético y responsable, que sirva para construir mejores sociedades. Patrocina una historia y forma parte de nuestra comunidad.
Dona