10 septiembre, 2020
En este municipio de la región Montaña de Guerrero, considerado el más pobre del país, los maestros se limitarán a asignar tareas cada 15 días durante la pandemia
Texto: Jesús Guerrero / Amapola Periodismo
Fotografía: Cortesía / Amapola
CHILPANCINGO.- A más de dos semanas que inició de manera virtual el ciclo escolar 2020-2021, en las comunidades indígenas de Cochoapa el Grande, que es uno de los municipios con los más altos índices de marginación y pobreza en el país, los niños no tienen clases porque no hay señal de internet y televisión abierta.
Son 4,700 niños de 203 escuelas (90 de preescolar, 99 de educación primaria bilingüe, 13 de secundaria y uno de educación inicial) que no tienen acceso a clases en esta nueva modalidad a distancia por la pandemia de la covid-19.
La alcaldesa de este municipio, Edith López Rivera, dijo que muchos de los niños tienen que bajar a la cabecera municipal o a las localidades de 2 Ríos, Arroyo Prieto y San Lucas donde hay señal de internet pero aquí la ficha para tener señal la cobran de 5 a 10 pesos la hora.
El municipio de Cochoapa el Grande, ubicado en la parte alta de la región Montaña de Guerrero, donde hay importante población indígena, cuenta con 156 comunidades, de las cuales sólo en 150 hay servicio de luz eléctrica, según los datos de la alcaldesa.
El informe del Consejo Nacional Política de Desarrollo Social (Coneval) arroja que Cochoapa el Grande tiene una población de 18,778 habitantes, de los cuales 95 por ciento están en pobreza, y de éstos 82.6 por ciento en pobreza extrema.
También que el rezago educativo afecta a un 56.8 por ciento de la población, que la población sin servicio a la salud es de 87. 1 por ciento, y sin acceso a seguridad social de un 96.2 por ciento.
El antropólogo y director del Bachillerato General en Cochoapa el Grande, Carmelo Ruiz Espinobarros, dijo que en el caso de los 400 estudiantes de este subsistema educativo, distribuidos en tres planteles, regresarán a clases virtuales hasta el próximo 21 y también pagando fichas por señal de internet.
Un plantel está ubicado en la cabecera municipal de Cochoapa el Grande, el otro en la comunidad de San Agustín, y el tercero en Arroyo Prieto.
El profesor comentó que son pocos los alumnos que pueden comprar las fichas, y, además, para tener acceso a la señal internet deben caminar hasta 40 minutos al lugar más alto de su zona. “Se suben al cerro con su teléfono celular para meterse a internet”, cuenta.
Ora complicación, expuso, es que la mayoría de los estudiantes no tienen teléfono celular. “Nomás hay que imaginarse cuánto gastaría en teléfonos celulares y en fichas un padre de familia que tiene seis o cinco hijos estudiando”, dice el profesor.
Desde marzo de este año en que empezó la pandemia por la Covid-19, explicó, hubo un acuerdo entre los padres de familia y los profesores de que ellos irían a las comunidades cada 15 días para asignarles y revisar tareas a los estudiantes.
“Este acuerdo se aprobó nuevamente para este ciclo escolar, pero ahorita como los caminos quedaron destrozados por las lluvias, los profesores no pueden acudir a los pueblos para entregar tareas y revisarlas”, menciona el profesor.
La alcaldesa agregó que hasta el momento ninguna autoridad del gobierno federal y estatal han acudido a su municipio para apoyar en los trabajos de reparación de caminos que quedaron dañados por las lluvias de la tormenta tropical Hernán.
Indicó que son 60 pueblos na savi (mixtecos) que están incomunicados.
Pidió el apoyo de los gobiernos federal y estatal para que se restablezcan las vías de comunicación en su municipio.
El profesor Giancarlo Susanibar Salazar relata las dificultades que pasan él y sus alumnos de bachillerato en Cochoapa el Grande para sacar este ciclo escolar.
Él, desde el arranque del ciclo, se traslada cada quince días al municipio para entregar y recibir tareas. “Vivo en Chilpancingo y viajo dos veces al mes a esa localidad para hablar con mis alumnos, los asesoro, recibo tareas y les entregó otras”, indica.
Apenas este jueves y viernes pasado estuvo en Cochoapa.
“En la Montaña alta y en concreto en Cochoapa el Grande se vive una situación lamentable y precaria en cuanto a conectividad virtual, pero nosotros como maestros más que tomarlo como un impedimento lo tomamos como un reto”, menciona.
Los maestros que dan clases en este municipio, contó, han diseñado estrategias para compartirles a sus alumnos, al menos, conocimientos académicos mínimos o básicos. “Es muy difícil trabajar al 100 por ciento para que los estudiantes tengan un aprendizaje significativo que es lo que siempre se desea”, agrega.
Además de distancia y las complejidades en los caminos, el problema en esta región, insistió, es la falta de accesos al internet, en los últimos días con más complejidades por las lluvias.
“Los alumnos tienen que comprar fichas para acceder a internet pero no en todos los lugares hay señal por lo que tienen que caminar hacia las partes altas”, dice el maestro quien imparte clases de Química, Biología, Ciencias de la Salud y Cálculo Diferencial e Integral.
El ingeniero químico cuenta que antes de la pandemia por el coronavirus, es decir, cuando las clases eran presenciales, él iba los cinco días de la semana a Cochoapa el Grande.
“Viajaba casi seis horas para llegar, me regresaba el viernes para llegar a Chilpancingo en la noche, porque el sábado estudió una maestría”, dice el profesor.
Ahora irá dos veces al mes. Él y sus alumnos ya tienen algo de experiencia, porque con las mismas dificultades sacaron el año escolar anterior. La pandemia comenzó en marzo pasado.
“Vamos a tener los mismos problemas y seguramente el aprendizaje académico de los alumnos no será el óptimo, porque no es lo mismo que uno esté frente a ellos en el aula que a distancia”, dice con la resignación de quien tiene sólo una opción.
Este trabajo fue realizado por el equipo de AMAPOLA PERIODISMO TRANSGRESOR. Lo reproducimos con su autorización. Aquí puedes consultar la publicación original.
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