La izquierda vuelve al poder en Uruguay

24 noviembre, 2024

Yamandú Orsi, del Frente Amplio, partido del exmandatario José ‘Pepe’ Mujica, ganó la segunda vuelta de las elecciones presidenciales frente al candidato Álvaro Delgado, perteneciente al Partido Nacional, partido de derecha actualmente en el poder

Texto: Luciana Oliver Barragán

Foto: Frente Amplio

CIUDAD DE MÉXICO. – El Frente Amplio regresó a la presidencia de Uruguay. Esto, después de que la segunda vuelta electoral diera por ganador a Yamandú Orsi, candidato de izquierda, frente a Álvaro Delgado, del Partido Nacional.

La victoria llega despuñes de que el 27 de octubre, durante la primera votación, ni un candidato obtuvo el porcentaje suficiente para ganar, es decir 50% más uno de los votos. 

Yamandú Orsi ganó la elección con un 49.81%, es decir 1 millón 183 mil 196 votos, frente a un 45.26% para Álvaro Delgado, por quien votaron 1 millón 090 mil 194 personas. A pesar de que hubo un porcentaje muy elevado de participación electoral, Uruguay es el único país de la región que aún no ha reconocido el derecho al voto de las personas que se encuentran fuera de su territorio.

El regreso del Frente Amplio: la disputa de dos proyectos

En Uruguay, un pequeño país al sur de América, con 3.4 millones de habitantes, todos los cargos de elección popular duran 5 años. Del 2019 a la fecha ha gobernado en el país Luis Lacalle Pou, quien ganó con el apoyo de una coalición de derecha llamada Coalición Republicana de la que forma parte el Partido Nacional.

Como menciona Diego Castro en el medio Ojalá: “la Coalición Republicana es una creación reciente y sirvió para que en la segunda vuelta de la elección de 2019 la derecha le ganara al progresismo”. Antes de esto, el Frente Amplio gobernó durante 15 años.

Si bien esta contienda ha sido caracterizada por Eduardo García Granado, de Diario Red, como “tediosa y descolorida”, se jugaron dos proyectos de país distintos que vale la pena analizar. 

Por un lado, el candidato Álvaro Delgado (PN)  proponía mantener la herencia política de Lacalle Pou, centrándose, como escribió Karina Batthyány en la columna de InfoCLACSO el pasado 20 de noviembre  “en mantener las principales líneas de reformas liberales con todo lo relativo al control fiscal, las inversiones privadas y la discusión del sistema de seguridad social que vienen siendo impulsadas por el gobierno actual».

Batthyány añadió:

«Se plantea fortalecer las alianzas comerciales internacionales, especialmente con la Unión Europea y China. La seguridad también es un tema que está sobre la mesa, donde propone aplicar una política de mano dura con énfasis en el componente de la represión y control a la delincuencia y al narcotráfico.”

Por el otro, Yamandú Orsi habló sobre reforzar internamente el papel del Estado en la garantía de derechos sociales, y externamente, como menciona Batthyány “una política internacional orientada a la integración regional para promover el Mercosur y otros espacios multilaterales”.

Orsi, en la línea del nuevo progresismo

Sus opiniones a nivel regional han demostrado una distancia del gobierno de Nicolás Maduro, caracterizando al gobierno venezolando como un  “régimen autoritario, y, si se quiere, una dictadura”, y mostrándose identificado con el presidente de Brasil ‘Lula’ da Silva, así como el chileno Gabriel Boric y el colombiano Gustavo Petro.

Expresión de esto fue el reconocimiento y la felicitación hecha por Luiz Inácio ‘Lula’ da Silva por la victoria electoral de Orsi, quien escribió en sus redes sociales:

“Quiero felicitar al pueblo uruguayo por la realización de las elecciones democráticas y pacíficas y, en especial, al presidente electo @OrsiYamandu, el Frente Amplio y a mi amigo Pepe Mujica por la victoria en la elección de hoy. Esta es una victoria de toda América Latina y del Caribe. Brasil y Uruguay seguirán trabajando juntos en el Mercosur y en otros foros por el desarrollo justo y sustentable, por la paz y en pro de la integración regional”.

A Orsi también lo felicitó la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien dijo: «El Frente Amplio regresa a gobernar por voluntad del pueblo uruguayo que una vez más demuestra su vocación democrática y progresista».

La agenda olvidada

En su análisis sobre los proyectos de los candidatos a la presidencia en Uruguay, Karina Batthyány resalta que durante los debates presidenciales, ni uno de los dos candidatos tuvo propuestas en torno a “la cuestión de género y la vinculada a los derechos de las mujeres y las disidencias. Dichos temas prácticamente no formaron parte del debate electoral. A ninguno se le escuchó manifestar preocupación sobre el tema de la violencia basada en género o de los femicidios”. 

Todo esto, pese a que las cifras de la situación de género en Uruguay ha empeorado en los últimos 5 años, aumentando el número de mujeres asesinadas de 47 en el 2019  a 59 en el 2023. Y el número de personas en espera para entrar al Sistema Nacional de Cuidados subió de 950 en 2019 a 6 mil 700 este último año.

Aún así, un avance en la contienda uruguaya fue que ambas fórmulas presidenciales contaron con candidatas a la vicepresidencia mujeres, Carolina Cosse por el Frente Amplio y Valeria Ripoll del Partido Nacional.

Para Marcelo Cabrera, quien escribe en el sitio Zur: Voces del pueblo, las propuestas electorales mantuvieron una identidad desdibujada definida más por “lo que no son, y no tanto por su propuesta política”. Esto expresa, como menciona Diego Castro en Ojalá, que “una parte importante de las fuerzas que se desplegaron en los últimos años no tienen traducción partidaria y las respuestas gubernamentales existentes no se diferencian demasiado frente a sus planteos”.

Si bien, durante los 15 años de gobiernos del Frente Amplio, éstos han sido reconocidos por sus logros en materia de ampliación derechos sociales, así como reducción de la pobreza y la desigualdad, Diego Castro menciona que la izquierda partidaria mantiene una “fe ciega en el crecimiento económico [que] la hace dependiente de las iniciativas extractivas. En ese camino se ha vuelto cada vez más pragmática asumiendo el esquema económico dominante sin mayores alteraciones”.  

Lo que se expresa en propuestas poco contundentes en materia de medio ambiente, aún después de la crisis del agua que llevó a Uruguay el año pasado a quedarse sin agua.

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Orsi, con el visto bueno de Mujica

Durante las votaciones de este domingo 24 de noviembre, el expresidente ‘Pepe’ Mujica, a sus 89 años, se expresó así sobre Yamandú Orsi, a quien algunos consideran su discípulo político. Dijo:

“Apuesto con todo el alma a Yamandú (…). Si Orsi tiene un defecto (…), es ser demasiado bueno”.

Proveniente de una zona rural, Orsi tuvo los primeros años de su vida diversas dificultades que llevaron a su familia a emigrar a Montevideo donde se dedicaron al comercio. 

Gerardo Lissardy de la BBC, describe la historia de Yamandú Orsi como alguien con una trayectoria ligada a la izquierda, desde su formación en historia con un base marxista, hasta su candidatura en la Intendencia de Canelones, de donde salió con un alto índice de aprobación. 

Para el politólogo Adolfo Garcé, de la Universidad de la República, quien fue entrevistado por la BBC, Orsi tiene las características de “negociación, adaptación a las circunstancias, poca columna vertebral ideológica (y) flexibilidad de un invertebrado (…)Se parece a Mujica sin el carisma de Mujica, sin su magia ni don de la palabra, y sin tantos años encima».

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