Tras reelección de «Alito», el PRI se pronuncia contra el neoliberalismo y la corrupción

8 julio, 2024

Alejandro Moreno, Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) encabezó conferencia de prensa para hablar sobre la asamblea nacional Ordinaria que se llevó a cabo ayer. Foto: Andrea Murcia / Cuartoscuro

En medio de críticas y rupturas, y después de una polémica reelección de su presidencia, el PRI modificó su documento de principios. Ahora, el partido que llevó a Carlos Salinas de Gortari a la presidencia dice que es antineoliberal, y asume una posición de centroizquierda

Texto: Alejandro Ruiz

Foto: Andrea Murcia / Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO. – Tras la reelección de Alejandro «Alito» Moreno al frente de la presidencia del PRI, el partido publicó un nuevo documento de principios.

Entre estos, se lee: “Tenemos que identificar las causas que un partido de centroizquierda progresista está obligado a encabezar”.

La «nueva» faceta del PRI llega después de la gran derrota electoral del pasado 2 de junio, y también, de una crisis interna en el partido que ha provocado desbandadas y críticas importantes en el último año. A estos personajes, Moreno los calificó como una «bola de cínicos y corruptos».

El «nuevo» PRI

En 1994 el saliente gobierno de Carlos Salinas de Gortari firmaría el Tratado de Libre Comercio con América del Norte. Con este acto, México entró formalmente al modelo neoliberal, aunque desde antes, en los 80, una serie de reformas ya habían desestructurado las formas colectivas y comunales de la tierra, y además, abrieron la puerta para la privatización de empresas estatales o paraestatales.

El nuevo PRI de Alito, el mismo que dirige desde 2019, ahora reniega de este pasado.

En su nuevo documento de principios, coordinador por Rubén Moreira, exgobernador de Sonora, se lee:

«Nos oponemos al neoliberalismo y a las políticas públicas de ese modelo económico generadoras de pobreza, violencia y desigualdad social”.

Además, añade que el PRI es «un partido que pugna por una mejor distribución de la riqueza y que proyecta una política de derechos en los programas sociales para reducir la desigualdad en el país».

La nueva faceta del PRI, también «abraza» las causas y los programas sociales, «como vía para el desarrollo de las y los mexicanos», aunque durante la campaña presidencial de Xóchitl Gálvez, Rubén Moreira,. coordinador territorial de la campaña, criticó duramente a éstos.

Ahora, durante la asamblea a puerta cerrada en la que la disidencia priísta dio un portazo para entrar, Moreira rectificó:

“Compañeras y compañeros, siendo autocríticos con el pasado, expulsemos del ideario al neoliberalismo, así como a las políticas de ese modelo”.

El fin de un ciclo, pero con venganza

Desde hace poco más de un año, el PRI de «Alito» ha sufrido desbandadas importantes.

Por ejemplo, antes de definir la candidatura de Xóchitl Gálvez, la renuncia de Claudia Ruiz Massieu y un grupo de priístas fue la primera alarma en el partido.

Después, el espaldarazo a Beatriz Paredes y la expulsión de Alfredo del Mazo, que acarreó la renuncia de militantes importantes como Eruviel Ávila, del grupo Atlacomulco, parecían ratificar la ruptura.

Ahora, semanas atrás de la asamblea nacional de delegados, un grupo de priístas publicó una carta donde exigían la salida de Alito de la presidencia del partido, pero poco valió.

La carta la firmaron varios cuadros importantes, entre ellos la propia Beatriz Paredes, pero también Manlio Fabio Beltrones, Dulce María Sauri , Carlos Aceves del Olmo, Francisco Labastida y Pedro Joaquín Coldwell.

A ellos, y desde el púlpito de la Asamblea, Alito les dijo «priístas impresentables».

En una conferencia de prensa posterior, «Alito» empezó a enlistar los asuntos pendientes de cada uno de ellos. A Dulce María Sauri, por ejemplo, la acusó de desprestigiar al PRI por recibir dinero del Sindicato Petrolero para la campaña presidencial de Labastida en el 2000. A Beltrones, lo acusó de estar implicado en el asesinato de Luis Donaldo Colosio en 1994.

Ninguno de ellos ha respondido a las acusaciones.

Periodista independiente radicado en la ciudad de Querétaro. Creo en las historias que permiten abrir espacios de reflexión, discusión y construcción colectiva, con la convicción de que otros mundos son posibles si los construimos desde abajo.