El ejército de Israel bombardeó un convoy de ambulancias donde se trasladaban refugiado y heridos por los bombardeos en Gaza. El convoy había sido notificado a Israel por parte del ministerio de salud de Gaza y por la Cruz Roja. Israel justificó el atentado alegando que ahí iban integrantes de Hamás
Texto: Alejandro Ruiz
Foto: Momen Al-Halabi / AFP
CIUDAD DE MÉXICO. – Este 3 de noviembre las Fuerzas de Defensa de Israel bombardearon un convoy de ambulancias afuera del hospital Al Shifa, en Gaza.
En el ataque murieron 15 personas, y otras 16 resultaron heridas, informó el ministerio de Salud de Gaza.
Horas después del atentado, las Fuerzas de Defensa de Israel emitieron un comunicado donde reconocen que el ataque fue de su autoría. El motivo, indicaron, es porque identificaron que en el convoy de ambulancias viajaban militantes de Hamás.
Esta afirmación la rechazó el ministerio de Salud de Gaza, quienes junto a la Cruz Roja informaron al gobierno de Israel que en el convoy de ambulancias viajarían refugiados y civiles heridos hacia el cruce de Rafah, con Egipto.
En respuesta, el Estado de Israel señaló que «esta zona de Gaza es una zona de guerra. Se pide repetidamente a los civiles que evacuen hacia el sur por su propia seguridad».
Esta tarde un trabajador de la corresponsalía de AFP en Gaza declaró que las oficinas de la agencia fueron dañadas tras un bombardeo.
El ataque, según informaron las Fuerzas en Defensa de Israel, fue en un lugar cercano, y no al edificio de la oficina.
Sin embargo, en la fotografía publicada por AFP (quienes han transmitido ininterrumpidamente desde el inicio de los ataques contra Gaza) se observa que el daño fue particularmente en el espacio donde está la oficina.
Este tipo de ataques no son sorprendentes en las zonas palestinas que han sido ocupadas por el Estado de Israel. De hecho, es un método de guerra que focaliza a sus objetivos de forma precisa como un «castigo ejemplar», considerado crimen de guerra.
La localización de las oficinas de AFP en Gaza, aseguró su presidente, Fabrice Fries, «era conocida por todos y fue recordada varias veces en estos últimos días, precisamente para evitar un ataque así y permitir que podamos seguir dando testimonio con imágenes en el terreno».
Los ataques del ejército de Israel contra la prensa no son nuevos. Hasta ahora se contabilizan más de 30 periodistas palestinos asesinados junto a corresponsales de agencias internacionales, sumado al asesinato de familiares de los ingenieros de transmisiones.
Inclusive, días antes la organización Reporteros Sin Fronteras demandó al Estado de Israel ante la Corte Penal Internacional por el asesinato de 34 reporteros durante el conflicto. Su director, Christopher Deloire, declaró:
“La escala, la gravedad y el carácter recurrente de los crímenes internacionales contra periodistas, especialmente en Gaza, exigen una investigación prioritaria por parte del fiscal de la Corte Penal Internacional”.
Para justificar el asesinato de periodistas, el ejército de Israel argumenta que Hamás utiliza a los reporteros como escudos humanos.
El secretario de estado de los Estados Unidos, Anthony Blinken, se reunió con Benjamín Netanyahu en Tel Aviv, Israel, para «abogar por una tregua humanitaria en Gaza».
Sin embargo, la reunión también fue para entregar 14 mil millones de dólares al Estado de Israel para comprar armamento.
Días atrás, un grupo de civiles protestó en el senado estadounidense, en la misma audiencia donde Blinken pidió presupuesto para ayudar a Israel en el conflicto armado.
Los manifestantes, con las manos pintadas de rojo simulando sangre, exigieron un cese al fuego. Algunos de ellos fueron detenidos.
Antes de la reunión, las fuerzas de la Resistencia Islámica en iraq se adjudicaron un ataque con cohetes contra el aropuerto internacional de Erbil. En ese aeropuerto se habían desplegado fuerzas militares estadounidenses. Más tarde, el mismo grupo islámico también reconoció un ataque a esa misma ciudad, pero ahora con drones.
Mientras tanto, el secretario general de Hezbollah, Hassan Nasrallah, emitió un primer discurso desde que inició el conflicto armado.
En su mensaje, el dirigente del grupo político militar libanés llamó a un bloqueo petrolero y de alimentos contra Israel orquestado por los países árabes. También, asumió que Hezbollah entró al conflicto desde que Hamás dio el primer ataque el 8 de octubre. Desde ese día, Nasrallah informa que 57 milicianos de Hezbollah murieron en enfrentamientos con el ejército israelí en la frontera de Líbano.
Concluyó su mensaje con una amenaza, diciendo que el conflicto entre Israel y Hamás puede escalar a nivel regional, si los Estados Unidos y el Estado de Israel no cesan el fuego en la Franja de Gaza.
Periodista independiente radicado en la ciudad de Querétaro. Creo en las historias que permiten abrir espacios de reflexión, discusión y construcción colectiva, con la convicción de que otros mundos son posibles si los construimos desde abajo.
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