Barbara Chiodeli creó un set en su sala. Durante 51 días retrató la cuarentena en un solo escenario: cocinando, jugando, trabajando; ni una sola vez repitió zapatos

Texto: Cynthia Rodríguez

Fotos: Barbara Chiodeli

MILÁN, ITALIA.- Durante 51 días instaló un set en su sala. En punto de las 8 de la noche posteaba su nueva idea en Instagram y comenzaban a llover los comentarios, una que otra crítica, pero sobre todo las alabanzas. No era para menos. Mientras todos en Italia desde los primeros días de marzo, comenzaron a sufrir el confinamiento, ella se divertía ideando la manera de reflejar la cuarentena, específicamente la suya.

Bárbara reposando, Bárbara brindando, Bárbara haciendo jardinería, Bárbara en el home office, Bárbara festejando San Patricio, Bárbara y su gata, Bárbara limpiando, Bárbara haciendo ejercicio, Bárbara jugando Turista; Bárbara tomando té con las muñecas, Bárbara haciendo la pizza, planchando, pintando, con las compras apenas hechas, armando torres de madera, ideando refugios en el diván…

Sí, en el mismo diván donde ella se colocaba vestida de mil formas pero sin mostrar su rostro. A veces armando rompecabezas, bailando flamenco o haciendo la pasta o también la pizza. Daba igual, lo importante era divertirse con las ideas que le surgían apenas mandaba en red su última foto y pensar en cómo prepararía la del día siguiente.

A veces se dejaba ayudar de las sugerencias de sus amigas y ella entonces perfeccionaba la escena con un detalle: el de no repetir pares de zapatos, que al final, según cuenta ella misma, fueron éstos el hilo conductor de sus fotografías.

“Cuando las iba viendo me quedaba claro dónde se habían ido todos estos años mis ahorros”, cuenta Bárbara Chiodeli divertida por descubrirse llena de zapatos de todo tipo. Un vicio quizá sólo comparable a su gusto por comer Gorgonzola a cualquier hora del día.

Desde su casa en Pavía, cuenta que antes de la pandemia ya había trabajado muchos años como Chef (al menos 12), luego se hizo Somelier, provó con la peluquería, hasta que comenzó a aplicarse en la fotografía. Entonces llegó el covid-19 a Italia y le hizo caso a su instinto que, se da el caso, también está lleno de zapatos.

Así ha participado a concursos internacionales de foto como el “Scavenger Hunt”, donde a los participantes se les asignan 10 palabras y tienen un mes y medio para desarrollar las ideas. En las de Bárbara, siempre están presentes los zapatos como se caracterizaron las fotos de su cuarentena.

El día que el gobierno italiano anunció el fin del confinamiento, en su cuenta de Instagram vuelve aparecer el mismo diván y ella (de la cintura para abajo) con una maleta y un letrro que decía: “Nos vemos pronto”.   

Han pasado más de 160 días de que en Italia se declaró la emergencia sanitaria por el Covid-19, Bárbara ya tiene otros proyectos que van más allá de reflejar la larga cuarentena, y sin embargo, no ha dejado de tomar fotos donde ella vuelve a ser la protagonista, esta vez en la cocina porque, como sea, si la segunda ola se presenta pronto, ella se vestirá de nuevo para matar la cuarentena.