¿Qué terror oculta la ampliación del Puerto de Veracruz?

6 septiembre, 2018

Texto y fotos: Itzel Villa

Anunciada como uno de los grandes logros del gobierno de Enrique Peña Nieto, la ampliación del Puerto de Veracruz se estaría realizando sobre restos de, al menos, 500 personas, acusan familiares de desaparecidos. Mientras varias empresas construyen patios, bodegas y estacionamientos para tráileres sobre la tierra donde podría estar una de las fosas clandestinas más grandes del país, el Colectivo Solecito pide permiso para entrar y excavar. Es una carrera contra el tiempo

VERACRUZ.- El Colectivo Solecito Veracruz tiene fuertes indicios de la ubicación de una fosa clandestina donde se realiza la ampliación del Puerto de Veracruz. Entre las pistas está un mapa que las madres de desaparecidos recibieron de forma anónima.

Hace dos años, con un croquis similar y con indicios muy parecidos, el Colectivo Solecito Veracruz encontró Colinas de Santa Fe, donde se han localizado 14 mil restos óseos y 295 cráneos en 151 fosas clandestinas, gracias a la tenacidad de las madres de desaparecidos. Colinas de Santa Fe se encuentra a pocos kilómetros de la ampliación del Puerto de Veracruz.

La fosa clandestina ubicada en los terrenos de la ampliación del puerto, en el kilómetro 13.5 de la carretera a Xalapa, podría tener las dimensiones de la hallada en Colinas de Santa Fe, aseguran las madres.

Desde hace cuatro años, el colectivo realiza los trámites necesarios para ingresar a la zona con la brigada de búsqueda. Sin embargo, la burocracia y los constantes movimientos de personal al interior de la Fiscalía General del Estado han retrasado este proceso.

En un recorrido, se pudo constatar que en la zona se encuentran las construcciones de las empresas que trabajan para la Administración Portuaria Integral (Apiver), que maneja el puerto. Miles de contenedores, cientos de tráileres y toneladas de mercancías circulan ya por encima de terrenos donde podrían localizarse los restos de 500 personas.

«Nos preocupa porque ya están construyendo ahí. Ya hay seguridad, ya no nos dejaron pasar», comentó Rosalía Castro Toss, madre de Roberto Carlos Casso Castro, desaparecido en diciembre de 2011.

La primera vez que integrantes del Colectivo Solecito acudieron al lugar fue hace cuatro años, a pesar de los señalamientos y los requerimientos de la agrupación de familiares de desaparecidos la construcción del puerto sigue avanzando.

«Hace como cuatro años no había nada de construcción. Había demasiada evidencia. Sólo que nosotros no sabíamos buscar como ya sabemos ahora».

En ese entonces, encontraron basura, ropa, zapatos, botellas de refresco y tierra removida. Todos estos, indicios de que hubo gente en ese lugar abandonado. A pesar de que en esa visita de 2014 fueron acompañadas por personal ministerial, los agentes no hicieron nada para agilizar los trámites para iniciar la búsqueda en el predio.

«Esta última vez que fuimos ya no nos permitieron el paso. Hay seguridad ahí, ya de las empresas de Apiver. Inmediatamente le llamaron al apoderado legal e incluso nos dijo, yo les presto gente. (…) Ellos están en la mejor disposición. (…) Con la nueva ley se deben agilizar las cosas» dice Rosalía Castro.

Hace unas semanas, el coordinador de Puertos y Marina Mercante, Guillermo Ruiz de Teresa, aseguró que la infraestructura básica de la primera etapa de la ampliación portuaria tiene ya un avance del 85 por ciento. Por lo que, al menos tres terminales estarán funcionando antes de que termine el sexenio.

El proyecto está pensado para completarse en su totalidad en 15 años, para que su última etapa entre en operaciones para el 2030.

Con una inversión total de 70 mil millones de pesos, la ampliación del puerto quintuplicará su capacidad de carga hasta las 95 millones de toneladas. El 80 por ciento de los recursos invertidos provienen de la iniciativa privada, nacional e internacional; el 10 por ciento, de recursos fiscales y el otro 10 por ciento, de recursos públicos.

Las excavaciones y la construcción del puerto podrían estar borrando indicios clave y dañando cuerpos sepultados clandestinamente.

Un buen puerto para la impunidad

En la marcha del 10 de mayo de 2016 unos hombres se acercaron a las madres del colectivo Solecito Veracruz para repartirles una hoja tamaño carta doblada en cuatro partes. Las mujeres estaban repartiendo hojas con una oración para sus hijos. Rosalía comentó que al recibir la hoja, la guardó. Sin embargo, hubo otras que la leyeron y llamaron la atención de las demás. La hoja contenía las ubicaciones en donde debían buscar en el predio de Colinas de Santa Fe.

«Dentro de la maldad, todavía tienen un poquito de compasión porque ya siquiera sabes en dónde buscar y sabes que ahí vas a encontrar».

En ese entonces, hubo más presión hacia las autoridades debido a que en la marcha se repartieron alrededor de 100 hojas. Con esto, las 100 mujeres ampliaron la declaración en cada uno de sus casos y pidieron entrar al lugar.

«Antes de que nos lo autorizaran, con otras compañeras ya habíamos ido a ver y también habíamos encontrado evidencia. De hecho, cuando nosotros fuimos, se supone que todavía estaban ahí porque encontramos comida. Dios iba con nosotros porque no nos hicieron nada».

Después de más de dos años de búsqueda en ese predio, el trabajo ha sido arduo, costoso y con un casi ningún apoyo de parte de las autoridades. La Fiscalía de Veracruz únicamente les prestó maquinaria que después de un mes se descompuso y no fue repuesta. Sin esa ayuda, el trabajo lo están haciendo los familiares de desaparecidos de forma manual.

«Por eso nos estamos retrasando un poco. Con otro mes que nos la prestaran, ya terminamos nosotros pero eso no nos va a parar. (…) En Colinas, puedo decir que hemos hecho un buen trabajo porque ya recuperamos 300 cuerpos, yo creo que 300 familias que tendrán un poco de paz en su alma, pero nos ha llevado nuestro tiempo. (…) Queremos que cuando salgamos de Colinas, salgamos con la certeza de que exploramos y exploramos bien. Con que el 99 por ciento se encontró».

La zona portuaria de Veracruz vive tiempos violentos desde hace años, pero uno de sus peores momentos fue cuando la Policía de Veracruz, en los tiempos de Javier Duarte, dirigida por Arturo Bermúdez actuó como brazo armado del Cártel de Jalisco Nueva Generación. Las desapariciones forzadas se extendieron por todo el estado.

Gracias a los familiares de desaparecidos se descubrieron predios con fosas clandestinas y se acreditó la participación de elementos policiacos en las desapariciones. Hoy, a dos años de que Colinas de Santa Fe fuera descubierta y explorada los familiares con sus propios recursos parece que concluyeron los trabajos en esos terrenos.

A pocos días de que finalice la búsqueda en Colinas de Santa Fe, el Kilómetro 13 y medio lugar donde se encuentra la ampliación del puerto podría ser el siguiente gran proyecto del Colectivo Solecito Veracruz y la brigada de búsqueda.

Debido a que el Estado no tiene personal especializado en búsqueda, la petición para el Kilómetro 13 y medio es que entre la brigada de búsqueda del Solecito.

«En Colinas tenemos ya dos años. La experiencia hace la diferencia» dice Castro.

El colectivo remarcó la importancia de que entre una brigada de búsqueda, en vez de que se hagan diligencias en el lugar. Y es que las diligencias se hacen en un par de días «y así no se encuentra mucho, tienes qué explorar bien el terreno».

La búsqueda en estos lugares requiere una atención mayor. Rosalía Castro ejemplificó que dos o tres días de búsqueda en el terreno de Colinas de Santa Fe no arrojaron resultados. Sin embargo, al quinto día comenzaron los impresionantes hallazgos.

«Empezamos a encontrar cinco o seis fosas. Hubo un día que se encontraron 15. Donde picabas con la varilla, ahí encontrabas».

Veracruz, tierra de fosas

En marzo de 2017, ocho fosas fueron halladas en la localidad de Arbolillo, en el municipio de Alvarado. Ahí se encontraron 47 cráneos y múltiples restos humanos. Aunque algunos de los restos fueron identificados, las madres del Colectivo Solecito consideran que el trabajo de búsqueda no se realizó de manera exhaustiva.

«Iban por dos marinos que habían secuestrado. Detuvieron a los secuestradores y les dijeron que ahí los habían enterrado. (…) La gente que fue, buscó, encontró a los marinos y ahí dejó todo botado. Entonces ahí hay más cuerpos. Por eso queremos también Arbolillo».

El colectivo ya ha iniciado también los trámites para que la brigada ingrese al lugar, por lo que por el momento sólo queda esperar a que avancen los trámites.

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