Los pueblos organizados del municipio de Juan C. Bonilla, en Puebla, pidieron al ayuntamiento la expropiación del terreno donde se encuentra una planta embotelladora de Bonafont, misma que tomaron y convirtieron en casa de los pueblos en agosto

Texto y foto: Arturo Contreras Camero 

Un comité de los Pueblos Unidos del municipio de Juan C. Bonilla, en Puebla, solicitó al gobierno de esa localidad la expropiación para utilidad pública del inmueble en el cual se encontraba la embotelladora Bonafont. 

En dicho inmueble se ubicaba un pozo de agua del que se extraía y embotellaba el líquido en garrafones que se vendían en toda la zona metropolitana de Puebla y de la Ciudad de México.

El pasado 22 de mayo un grupo de pobladores clausuró la entrada a la planta, impidiendo el paso de sus trabajadores. Después, el 8 de agosto los Pueblos Unidos tomaron las instalaciones para convertirlas en una Casa de los Pueblos, un espacio de creación comunitaria donde se imparten talleres y se realizan actividades culturales. 

Desde hace más de 20 años los pobladores del lugar vieron cómo la extracción desmedida de agua por parte de la empresa secó los pozos de la región, también los ríos y los árboles

La solicitud de expropiación se entregó al presidente municipal Joel Lozano Alameda, a la Secretaría de Gobernación del estado de Puebla, al Congreso del estado y a Luis Miguel Barbosa Huerta, gobernador del estado de Puebla.

«Hasta hoy, los Pueblos Unidos mantenemos en resguardo el inmueble realizando actividades educativas, artísticas y de salud. Esta acción jurídica es sólo una parte de un proceso mucho más grande, que es el camino hacia nuestra Autonomía», señalan los Pueblos Unidos en un comunicado de prensa. 

Desde el día que los pobladores de la región clausuraron la planta embotelladora, el representante jurídico de Bonafont, Fabrice Salamanca, declaró que interpuso una denuncia en contra de diversos miembros de Pueblos Unidos, quienes son vigilados y perseguidos en sus domicilios así como en las inmediaciones de la planta. 

En el mismo comunicado, los pobladores también denuncian el hostigamiento que han recibido por parte de la policía estatal, municipal y de Guardia Nacional.

Por su parte, miembros de los Pueblos Unidos aseguran estar siendo perseguidos, vigilados y agredidos por elementos de las corporaciones ya mencionadas, así como por vehículos sin identificación y personas vestidas de civil y con uniforme de la empresa.

La casa de los pueblos 

Desde los primeros días de junio las instalaciones de la embotelladora se usarán para realizar un encuentro internacional de mujeres y un encuentro internacional de científicos, donde se planteó la problemática ambiental de ese territorio.

En el lugar se han hecho eventos culturales y artísticos para niñas y niños así como encuentros con otras organizaciones. Han abierto, señalan, un espacio para la atención integral a las mujeres.  

Próximamente la Casa de los pueblos será sede de encuentros de educación, comunicación, deporte, arte y cultura; de ferias de salud; talleres de agricultura orgánica, de servicios de atención integral para la mujer, de tianguis de trueque, cineteca y otras actividades.