Para resistir al capitalismo se necesita espíritu

12 mayo, 2023

Foto: Juan Valerio para El Sur Resiste

El encuentro internacional El Sur Resiste reunió a pueblos de todo el país para compartir sus luchas contra proyectos industriales o de infraestructura; fue una oportunidad para repensar el espíritu que les anima

Texto: Arturo Contreras Camero
Fotos: Juan Valerio para El Sur Resiste

SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, CHIAPAS.- Por casi 600 años los pueblos de este continente han resistido contra todo tipo de despojo. Mantener las diferentes luchas sociales que eso ha representado, requiere, sobre todo, espíritu, mística. Esa es la reflexión con la que inició el encuentro internacional El Sur Resiste para compartir experiencias, pero sobre todo, aliento, para la defensa del territorio. 

El encuentro se realiza el 6 y 7 de mayo. Es el final de la caravana del mismo nombre, que durante dos semanas recorrió los territorios del sur de México atravesados por la construcción del Tren Maya y el Corredor Interoceánico. En ella viajaron representantes de pueblos indígenas, activistas, académicos y observadores internacionales; unas 200 personas. Al encuentro, que se realiza en el caracol zapatista Jacinto Canek, sede también de la Universidad de la Tierra, llegaron cerca de mil.

“Debo confesar que antes de venir, yo no pensé nada. Así de desfachatada soy. Me venía intentando inspirar con la gente con la que hablé en el camino para acá”, dice entre las risas de quien la escucha Vilma Almendra Quiguanás, escritora indígena experta en temas de autonomía y emancipación. 

“Nosotras hemos resistido porque la alegría está a pesar de la muerte, nosotras aguantamos porque nos reímos. Yo vengo del Cauca (en Colombia) que en nuestra lengua significa madre de los bosques”, comparte ante un auditorio repleto. “Es esa alegría la que nos ha ayudado a resistir en medio de la muerte. Es desde ahí que quiero compartir con ustedes. Más que una ponencia quiero expresar mis preocupaciones y alegrías”. 

Su preocupación primordial, como la de muchos pueblos originarios de Abya Yala (nombre con el que los pueblos Guna se refieren al continente americano), es la del despojo de sus tierras.

Nos quieren arrancar todo, nuestros idiomas, nuestras costumbres, que no todas son buenas, pero nos quieren quitar todas, las bellas y las que no lo son. Hasta nos quieren quitar la espiritualidad con, nos quieren cooptar y después se aprovechan del despojo del dolor y de la rabia”.

Antes de Vilma, el escritor Raúl Zibechi hizo un análisis del contexto mundial en que rodea a estos proceso de despojo que se repiten en la mayoría de los territorios indígenas del continente. En su análisis tanto Zibechi, como Almendra Quiguanás, recalcaron la necesidad de fortalecer las luchas desde el espíritu. 

Durante la caravana se escucharon diversas luchas de resistencia, pero que además, han demostrado una capacidad única para crear, explicó durante su discurso el escritor. Crear en los espacios, en las formas de vida distintas y en relaciones sociales diferentes.

Foto: Juan Valerio para El Sur Resiste

Ese elemento de crear es un elemento fundamental para nuestras luchas, para resistir no con guerra, no respondiendo a la violencia con violencia. Resistir, por supuesto, no significa que vamos a cruzarnos de brazos. Vamos a resistir, quienes con pañuelos, otros con capuchas, y algunos, claro, con armas. Pero ese elemento de crear es un elemento fundamental”, dijo. 

“La base de la autonomía eran las tierras en común ¡que por supuesto que son fundamentales!”, dijo Zibechi. “Pero hoy entendí que su base es una cierta espiritualidad de los pueblos. Esto sostiene la resistencia. Hablar de espiritualidad es hablar de la mujer; del vínculo mujer-vida- madre tierra. La espiritualidad es lo que nos permite sostenernos en el tiempo largo. Porque si llevamos 500 años resistiendo, tal vez haya que resistir otros 500 más”. 

La espiritualidad, mencionaron Zibechi y Almendra Quiguanás, es el componente necesario para resistir al paradigma de seguir con la milpa o irse al narco. Las tierras que aún no ha conquistado El capital, dijeron, viene por el despojo de las tierras indígenas, que aún resguardan 4 de cada 10 hectáreas, en promedio, en todo el continente. 

Por su parte, Vilma Almendra habla de la espiritualidad como pilar de la resistencia a un patriarcado de más de 5 mil años y a una colonización de más de 600 años; a un patriarcado que todas y todos tenemos dentro, que reproducimos porque se nos enseñó en la escuela y en la familia, que tenemos que conocer para quitárselo; porque detrás de él hay una historia milenaria que se ha querido borrar y no se ha podido. 

***

La ponencia completa se puede consultar en este vínculo https://www.youtube.com/watch?v=g_zkD1A5VD0&t=3503s

Periodista en constante búsqueda de la mejor manera de contar cada historia y así dar un servicio a la ciudadanía. Analizo bases de datos y hago gráficas; narro vivencias que dan sentido a nuestra realidad.