Claudia Sheinbaum se comprometió con la población jornalera para crear centros de bienestar infantil e incorporar a las familias a la seguridad social, sin embargo el compromiso no re ve reflejado en su propuesta de Presupuesto de Egresos para el 2025, pues destina 5 millones 360 mil pesos, para atender a una población de al menos 2 millones de jornaleros y jornaleras; esto es apenas 2.6 pesos por persona al año

Por Arelhí Galicia / Fundar. 

El 15 de noviembre se publicó el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2025. Este documento es el encargado de estimar y proyectar los ingresos y gastos del gobierno para el próximo año, el primero en el gobierno a cargo de la primera mujer presidenta del país y en el que deja sus prioridades claras, en tanto el dinero que va a enfocar para su cumplimiento.

En su toma de posesión, Claudia Sheinbaum mencionó en dos de sus compromisos a la población jornalera. El compromiso 55, en el que se habló de la “creación de centros de bienestar infantil para las hijas e hijos de jornaleras y trabajadoras de la maquila”, y el número 63, en el que menciona la “incorporación a la seguridad social de esta población trabajadora”.
De acuerdo al análisis del proyecto de presupuesto, no hay recursos asignados para la creación de un programa sectorial específico para esta población. La única mención para estos trabajadores y trabajadoras, se encuentra dentro del Anexo 13, con una acción específica para “Promoción del trabajo digno para Jornaleras y Jornaleros Agrícolas” dentro del programa “Ejecución de los programas y acciones de la Política Laboral” dentro de las acciones para promover la igualdad entre mujeres y hombres con un monto de $5,359,947. ¡Esta cantidad es la única comprometida para atender a por lo menos 2 millones de personas que sufren por la violación a sus derechos laborales durante todo un año!

Dentro del Proyecto de Presupuesto no existe tampoco alguna partida específica destinada a garantizar el acceso a la población a la seguridad social, ni tampoco hay acción para la creación o adecuación de centros de bienestar infantil.  Una de las instituciones encargadas de velar por el respeto de los derechos laborales de jornaleros y jornaleras es la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, a través de la Dirección General de Inspección Federal del Trabajo, encargada de supervisar a las empresas agrícolas que emplean a esa población; sin embargo, para el 2025 el presupuesto asignado presenta una disminución del 8.9% respecto del año anterior.

Además, de ese presupuesto, únicamente un $1,570,581, se destinará a gasto operativo, lo cual es insuficiente para cubrir las visitas de inspección al enorme número de empresas del país, de las cuales las empresas del sector agrícola son tan solo una parte. 

Desde la creación de la Alianza Campo Justo, hemos señalado la falta de recursos para las dependencias encargadas de atender a esta población. Cuando las mujeres jornaleras escucharon de la voz de la presidenta que serán prioridad, elevaron sus expectativas, pero ahora es claro que no se ve reflejada esta prioridad en las acciones
gubernamentales, ya que no aparecen dentro de los recursos.

En conferencia de prensa de la Alianza Campo Justo en la que mujeres jornaleras levantaron su voz para dejar saber al nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum sus reclamos y exigencias, Rocío, mujer nahua de la comunidad de Ayotzinapa, notó muy claramente esta contradicción entre los discursos y las acciones:

«Dicen que va a haber salud, y seguridad social, pero en las comunidades no vemos nada.
Nosotros como mujeres indígenas (…) parece que nos ven, pero seguimos siendo invisibles (…) trabajamos no solamente en los campos agrícolas, el trabajo es de todos los días y todo el día, se nos va la vida ahí, discriminación tras discriminación.” “Dice el gobierno que voy a hacer eso y lo otro pero en las comunidades no hay nada, yo
invito personalmente a la presidenta que nos visite en las comunidades, que no solo vaya en los municipios, porque a las comunidades no llegan los programas, no llegan los apoyos”. “La presidenta es mujer, es madre de familia, es cuidadora, dice que para las mujeres cuidadoras habrá apoyo pero no nos llegan los programas a los pueblos; o
cuando llegan nos piden un montón de requisitos que no sabemos a dónde encontrarlos”

A Rocio le quedó claro: no habrá apoyo en el primer año de gobierno para las que cuidan y trabajan dejando su vida en los surcos. El IMSS no presenta recursos para la creación de centros de bienestar o para el programa de incorporación, la Secretaría del Trabajo presenta una disminución, por lo que no habrá recursos para que los inspectores lleguen a los campos y no se vislumbran modificaciones a las reglas de operación de los programas sociales “universales”, por lo que jornaleros y jornaleras seguirán sin poder acceder a esos apoyos que les ayudarían a mejorar un poquito su calidad de vida.

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