Los Ardillos terminaron desterrando a los Rojos en todo el corredor que va desde Mártir de Cuilapa, Zitlala y Ahuacuotzingo hasta la mitad del territorio de Chilpancingo. Pasa por Chilapa y Tixtla, de acuerdo con el último mapa criminal del gobierno estatal
Texto: Margena de la O
Foto: Portales oficiales de candidatos
CHILPANCINGO, GUERRERO.- Las únicas dos víctimas de actores en este proceso electoral del 2024 en la Montaña baja de Guerrero, eran simpatizantes de Morena, Tomás Morales Patrón, aspirante a la alcaldía de Chilapa y Antonio Crespo Bolaños, quien era regidor. Los asesinaron en marzo pasado, en pleno contexto de campañas, en dos episodios diferentes, siete días distante uno de otro.
Desde entonces hasta hoy, dos días antes de las votaciones, que serán este domingo 2 de junio, no hay un solo indicio de violencia física contra actores políticos de frente al proceso electoral, contrario a las últimas dos jornadas electorales (2018 y 2021), donde la región, con Chilapa como principal cabecera municipal, fue el puntero de estas agresiones.
A propósito de este cambio abrupto, es importante mostrar cómo quedó la jugada electoral en la región en estas votaciones.
La violencia física contra los actores políticos de los procesos pasados quedaba enmarcada en la violencia criminal que distinguía a la zona, causada, según la evaluación de las autoridades, por una rivalidad entre los grupos criminales de Los Ardillos y Los Rojos.
Los primeros terminaron desterrando a los segundos, de acuerdo con el último mapa criminal del gobierno estatal, que pinta de azul cielo, el color que les asignó como distintivo a Los Ardillos, todo el corredor que va desde Mártir de Cuilapa, Zitlala y Ahuacuotzingo hasta la mitad del territorio de Chilpancingo. Pasa por Chilapa y Tixtla.
La aparente calma de ahora quizá tenga que ver con cómo quedaron las fichas para esta contiendaelectoral. Las candidaturas más visibles son las de Morena y de la alianza PRI-PAN-PRD.
En Morena, para el sexto distrito federal, que abarca gran parte de los municipios de esa zona, la candidata es María del Carmen Nava García; para el vigésimo quinto distrito local, con cabecera en Chilapa y José Joaquín de Herrera, la candidata es Sandivel Bautista Tacuba; para la alcaldía de Chilapa, planteada como el municipio más importante de la zona, la candidata es Paula Angélica Miranda Silva.
Toda esta planilla hizo una marcha como parte de sus actividades proselitistas que, se supo fueron escasas y poco públicas, el 27 de mayo pasado en la cabecera municipal de Chilapa, vigilados por la Guardia Nacional, por el temor que ellas mismas expresaron por el asesinato de quienes fueron sus compañeros, de acuerdo con lo que documentó el periódico El Sur sobre esa actividad.
En el lado de PRI-PAN-PRD, el candidato del sexto distrito federal es Gerardo Lara Villa; en el distrito local 25, es Jesús Parra García, quien busca la reelección; y por la alcaldía de este municipio, la candidata es Mercedes Carballo Chino.
Los antecedentes electorales de Chilapa exponen que existe una tradición –o imposición– priista en el municipio, porque los alcaldes de las últimas décadas provienen de ese partido, sólo uno fue postulado por lo que en ese momento era la izquierda, encabezada por el PRD, Maclovio Arias Acevedo (2002-2005).
Ahora estos partidos son lo mismo y se observa desde nivel nacional, con su alianza, hasta en la región, con sus candidatos, porque a quienes no pudieron registrar por su partido origen, lo hicieron desde los otros institutos sin problema.
Pero los tres candidatos de la alianza que compiten son priistas arraigados, hasta el más joven de ellos, Lara Villa, quien su experiencia está basada, de acuerdo a lo que ha publicado en sus propias redes sociales, en ser cercano al exgobernador Rubén Figueroa Alcocer, porque es la primera vez que compite por el cargo a elección popular. En el caso de Parra García fue seis años alcalde de Chilapa (2015-2018 y 2018-2021), porque se reeligió y de ganar la elección actual repetiría en el Congreso local.
De la candidata Carballo Chino no hay mayores antecedes, ni siquiera en su portal oficial como candidata, donde en unas líneas expone su militancia en el PRI, y con ello su trayectoria: “Desde 1995 soy militante activa en el Partido Revolucionario Institucional, con diferentes funciones como: representante seccional, representante general, coordinadora de zona que corresponde a la Sección 1202 y 1203. Representante político de zona”.
Pero hay otra vinculación mayor que expuso hace unas semanas el periodista Héctor de Mauleón en una columna en el contexto también del arranque de campañas, un par de días después del asesinato del morenista Morales Patrón: es cuñada de Celso Ortega Jiménez, el líder de Los Ardillos.
Los hermanos Ortega Jiménez no sólo se mueven de manera pública en los terrenos de la criminalidad, también en el campo político. Bernardo Ortega Jiménez es diputado local por el distrito 24, con sede en Tixtla; el cargo lo ha ocupado en tres periodos anteriores (2018-2021, 2012-2015 y 2005-2008), y antes fue alcalde de Quechultenango (2002-2005), de donde son originarios.
En esos cargos ha tenido destacados encargos para la toma de decisiones. En el periodo 2012-2015 fue presidente de la Comisión de Gobierno, la principal representación en el Congreso local, de acuerdo con lo que está publicado en los portales de las legislaturas de esos periodos. En 2015 se vivía un año complicado en Chilapa: en mayo irrumpió a la cabecera municipal un grupo armado que vinculaban con Los Ardillos; ese episodio está documentado por periodistas como el momento en que este grupo armado comienza a expulsar a Los Rojos.
Para esta elección de 2024, el candidato a diputado local del vigésimo cuarto distrito por la alianza PRI-PAN-PRD es uno de sus hijos, Jorge Iván Ortega Jiménez, quien hizo campaña, al igual que sus compañeros de Montaña baja sin problema por la zona, según se observa en las redes sociales, uno de los principales termómetros de difusión.
El diputado Ortega Jiménez siempre ha dicho de manera pública, en declaraciones a medios de comunicación, que tiene una diferencia con sus hermanos que forman parte del grupo criminal, pero todos sus cargos públicos los ha conseguido por votaciones en el área que controlan sus hermanos, con los que se supone no se lleva.
En la elección de 2018, de los nueve distritos federales que había en Guerrero, en esta elección son ocho, la alianza Morena-PT-PES, que en ese momento lanzó al actual presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), sólo perdió el distrito 06, el que cubre gran parte de la Montaña baja.
De los 13 municipios que cubría el distrito, cinco de ellos conforman la Montaña baja. Esta es una subregión nutrida de dos de las regiones oficiales, Centro y Montaña, conformada por Chilapa, Zitlala, Ahuacuotzingo, José Joaquín de Herrera y Atlixtac. Algunos incluyen hasta Mártir de Cuilapan.
En esas elecciones de 2018, el estado era considerado de gran simpatía a López Obrador, de acuerdo con los resultados de las dos elecciones anteriores donde participó. Aquí reunió en la presidencial un millón,18,163, de los 30 millones, 113 mil,483 votos sumados en todo el país.
En el sexto distrito electoral federal en Guerrero ganó la elección el perredista Raymundo García Gutiérrez. Morena rompió con el PRD en esa elección.
Este distrito federal guarda los dos distritos locales antes mencionados, el 24 y 25. El primero, lo ganó entonces Ortega Jiménez, y el segundo la priista Alicia Zamora Villalba, quien antes de ese cargo fue alcaldesa de Chilapa (2005-2008), diputada federal (2008-2011) y también diputada local (2002-2005).
Jesús Parra García por segunda vez consecutiva lograba la alcaldía de Chilapa y ahora busca su segundo periodo como diputado local.
En 2021, los cargos de elección popular se quedaron entre los mismos personajes, ahora con el cobijo de la alianza local entre el PRI y el PRD, dos partidos que fueron adversos: Bernardo Ortega con el distrito 24–su cuarta vez– y el ex alcalde de Chilapa, Jesús Parra García, con el distrito 25. Alicia Zamora Villalba repitió en el Congreso local desde un espacio de representación proporcional para el PRI.
La alianza PRI–PRD ha hecho buena mancuerna en la región.
Estas dos jornadas en medio de una violencia que alcanzó a otros actores políticos. El día de la votación en 2018, el 2 de julio, Guerrero llegaba a 14 víctimas con alguna asociación al proceso electoral, y seis de ellas eran de la Montaña baja, y en 2021, el panorama tampoco fue bueno en la región, porque el 25 de noviembre del 2020 mataron al aspirante perredista a la alcaldía de Chilapa, Antonio Hernández Godínez, quien coqueteaba con Morena. Aquí hay más datos del contexto de ese momento.
En el contexto están las claves de lo que hoy ocurre.
Esta es la segunda entrega de la serie Guerrero 2024: decisión sin elección, realizada por AMAPOLA PERIODISMO, que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes consultar la publicación original
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