Entre el río de colores que cada año toma Paseo de la Reforma, también hubo protesta social, espacio para la memoria y para pedir alto al genocidio
Texto y fotos: Isabel Briseño y Camilo Ocampo
CIUDAD DE MÉXICO.- “Este día las calles son nuestras. Somos nosotras mismas y podemos ser libres”, expresa un tanto cohibida Karla, una joven de 19 años que vive en Iztapalapa y estudia terapia respiratoria junto con su pareja, Montse. Ambas son distintas a toda la gente que inunda con sus atuendos coloridos; ellas visten ropa oscura.
Para Montse, en la actualidad, ya es más posible expresar a quien amamos, a quien nos gusta, a quien deseamos sin ser objeto de estigmatización. “Sí se han ganado derechos y se ha avanzado en muchas cosas pero hay que seguir saliendo a las calles a exigir respeto” expresan las chicas, rodeadas de colores, lentejuelas, plumas, cuero y pelucas.
La marcha alrededor de Karla le da la razón; si algo se respira a cada paso en el Pride 2024 es libertad. Como cada año, el último domingo de junio la comunidad LGBTIQ+ hace gala de sus mejores y más atrevidos atuendos llenos de creatividad.
Esta es la edición 46 de la marcha y tiene por objeto la reivindicación de derechos. El lema de la marcha es “Alto a los discursos y crímenes de odio, de orientación sexual, expresión o identidad de género”.
Un ataúd blanco destaca entre tanto color. La caja con una bandera trans del Bloque Disidente representa un dato preocupante: México es el segundo país con más crímenes de homofobia, lesbofobia y transfobia.
Por primera vez en el recorrido se implementa un “tramo del silencio” para honrar a las víctimas de crímenes de odio. Los gritos, aplausos y cantos; la algarabía enmudece durante un tramo destinado al silencio; de la Glorieta de las mujeres que luchan al Antimonumento de los 43.
En lo que va de 2024 han desaparecido en el país alrededor de 23 personas de la comunidad y 38 de sus integrantes han sido asesinados. 31 son transfeminicidios; en general, 80 por ciento de las víctimas son mujeres trans.
La fiesta por los derechos y demandas abraza la diversidad pero también a los vendedores ambulantes, que cada año venden las clásicas sombrillas de colores, los collares de flores, los abanicos, las coronas, los taquitos de suadero, de longaniza y sobre todo, mucho alcohol.
Los carros alegóricos y las marcas esta vez tuvieron una menor relevancia a lo largo de la marcha pues los tradicionales carros llenos de artistas salieron varias horas después de que salieron los primeros continentes. La intención es que por primera ocasión las personas tuvieran una mayor relevancia. 170 organizaciones de la sociedad civil de varios estados de la república mexicana participaron en el PRIDE 2024.
Entre abanicos que se agitan al compás de los tambores, familias, amigos y parejas caracterizados de la Sirenita o de la famosa muñeca Barbie, todo mundo posa para la selfie grupal.
La familia Garduño acompaña a su hija y su novia. “Me siento súper contenta de que estén aquí mis dos padres”, expresa la joven. Sus padres confiesan que al principio fue complicado aceptarlo, pero ahora están para todo con ella.
Iván Cruz carga con pancartas que refieren al VIH mientras posa para una foto en grupo. “Alzamos la voz por las personas que vivimos con VIH, queremos recordar a quienes ya no están. Hablamos por los que estamos y levantamos mucho más la voz, por quienes vienen atrás de nosotros”, dice.
Con 32 años de edad, lleva alrededor de 12 años acudiendo a las marchas. Lleva 5 años viviendo con VIH y para él es muy importante acudir para hablar sobre la enfermedad. Su transitar ha sido duro debido a que hay mucho estigma.
“En este andar me he encontrado con personas increíbles que me han ayudado a mejorar mi calidad de vida y que me han ayudado a transformar vidas”, dice el integrante de la Red Mexicana de jóvenes y adolescentes positivos.“Estamos viviendo y resistiendo”
“Mientras haya genocidio habrá coraje, mientras haya muerte habrá rabia, mientras haya desaparecides habrá indignación, una que atraviese todas las fronteras. Si son ciegos ante el genocidio, la muerte y la desaparición forzada, si no han visto la violencia, si no han sufrido la deshumanización, marchen con orgullo a lado de las marcas que mañana se quitarán los colores y durante meses les olvidarán, pero si los crímenes no les son ajenos, únanse y marchemos con digna rabia para que el mundo nos escuche“.
La lucha de las disidencias sexuales, además de priorizar la agenda LGBTIQ+, se caracteriza por hermanar a movimientos anticoloniales, antirracistas y antiimperialistas,es por ello que, hicieron un llamado a quienes integran la comunidad sexodiversa para protestar contra del genocidio perpretado por Israel, en contra del pueblo palestino. Además hicieronun llamado para detener el “pinkwashing” de Israel, una campaña de propaganda que coloca al ente sionista como un país de libertades.
Durante la “Contramarcha” que partió del Ángel de la Independencia con rumbo a la embajada de Israel, las personas que participaron hicieron hincapié en que “Israel se vende como un país ´gay friendly´ y muchas de las marcas que son embajadoras de la comunidad (en Israel) se han estado beneficiando del asesinato de miles de infantes, mujeres y hombres, por eso les decimos que no en nuestro nombre.”
Mientras la movilización avanzaba sobre Paseo de la Reforma, colectivas trans hicieron uso de la palabra para visibilizar y denunciar que desde enero de este año, hasta la fecha, 36 mujeres trans fueron asesinadas, lo cual indica que desde el año pasado han incrementado en 280% las cifras de personas trans asesinadas.
Al llegar a la Embajada israelí en México, las personas que protestaban se toparon con un centenar de policías que resguardaban el edificio, por lo cual hicieron un llamado a no caer en provocaciones por parte del cuerpo policiaco .
Una vez frente al inmueble ubicado en Lomas de Chapultepec, las personas que protestaban realizaron un acto político-cultural en el cual reiteraron que lo que ocurre en Gaza, no es una guerra, es un genocidio.
Al finalizar el acto de protesta, un grupo perteneciente al Bloque Negro se enfrentó con el cuerpo de granaderos, en respuesta a la represión del 29 de mayo, frente al mismo edificio, en donde fue golpeado un reportero integrante de la comunidad LGBTIQ+ por el cuerpo antimotines.
Al grito de “fuimos todes”, el contingente comenzó a retirarse para tomar nuevamente las vialidades, mientras continuaban con las consignas de repudio contra lo que sucede en Palestina
De acuerdo a información publicada por la SSC, durante la protesta dos oficiales de policía tuvieron quemaduras leves en las piernas.
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