Los reyes punk llevan felicidad a los invisibles del sistema

24 diciembre, 2023

Desde hace 30 años los Reyes Magos son más de tres y también son punk. José Luis Escobar, el Pikos, recolecta y reparte risas, abrazos, regalos, juguetes, ropa y zapatos a infancias y personas que viven en la calle, migrantes y en condiciones de vulnerabilidad  

Texto: Isabel Briseño

Fotos: Ernesto Álvarez 

CIUDAD DE MÉXICO.-

“Nosotros siempre vamos con los invisibles del sistema, con los que nadie quiere ver, con los que están debajo de un puente cagados, meados, vomitados en una esquina, con ellos vamos”, José Luis Escobar, Pikos, fundador del movimiento Reyes Magos Punk. 

Desde hace poco más de tres décadas, cada 5 de enero, el Pikos, recorre la Ciudad de México en compañía de más banda solidaria. 

Los Reyes Magos Punk visitan y entregan presentes y felicidad a los chavos de la lleca, como le dice a la calle, a morritos que viven en predios tomados, a trabajadoras sexuales, a personas adultas mayores y este año, los migrantes también están en la lista. 

“Siempre a un morro de la lleca se le tiene que dar el respeto adecuado al chavo; son tan escupidos, tan maltratados, tan aborrecidos, que cuando llegamos y les pedimos permiso de pasar a su espacio, aunque sea la calle, se sacan de onda, pero hay hacerles saber que también valen y que son importantes”

El punk y lo que la gente ha olvidado: ser feliz 

La entrega debe ser durante la madrugada. Esa ilusión de esperar y recibir a los Reyes Magos se la debe a la jefa, como le dice a su mamá, quien durante toda su vida trabajó como costurera. 

El hombre delgado y de cabellos color cobre recuerda que su jefa hasta les daba unos trancazos para que se fueran a dormir él y su hermana para que los Reyes Magos llegaran a su hogar. 

“Era bien chingón levantarte y ver que habían llegado todas las cosas que habías pedido, sin saber todos los esfuerzos que la jefa había hecho”. 

Cuenta que estudió en una escuela de Tlatelolco donde también estudiaban hijos de funcionarios del Estado. A sus compañeros, los reyes les llevaban muñecos originales y a él imitaciones, lo que desataba las burlas de algunos, a quienes llamaba burgueses. 

“Ahí yo creo que empezó el pedo punky”, dice. 

Para Pikos el punk es la forma más chingona de vivir alegre donde tomas el control de tu vida y donde procuras hacer lo que toda la gente se olvidó: ser feliz. 

La primera colecta, en Ecatepec

El Pikos hizo su primera recolecta en 1990. Vivía en la unidad habitacional del Infonavit en la colonia Valle de Ecatepec en el Estado de México. 

Es la entrega de 1997 la que más se le quedó grabada. Llegó a repartir junto con Los Desordenados de Atizapán, banda de punk, al zócalo capitalino. 

Recuerda que había un templete con gente del PRD pero Los Desordenados se apropiaron del escenario donde comenzaron a repartir y niños indígenas y de la calle se subieron a brincar y bailar. “Fue la explosión”, dice.

“Llegaron los Reyes Magos, llegaron los punks”, dicen los niños y Pikos ha visto que en lugar de que les de miedo su vestimenta, les dicen que les gustan sus chamarras de piquitos. 

“A huevo, vas por buen camino”, les responde el Pikos

Es entonces el momento en que los morros corren a recibir a los Reyes Magos Punk el que más atesora el punk. 

“Te deja una satisfacción bien mamona, te recarga bien machin para todo el año ver a la gente unida, las familias, los niños, sus caras”.  

“La gente ahora es más sensible“ 

La sensibilización de la gente, la tecnología y la dificultad para ayudar a la población de la calle, son algunos cambios que ha observado el Pikos durante estos años de Rey Mago Punk. 

En los años 90 no había nada de esto, señala.

“La gente era más ojete, todo el mundo tenía en la mente competir, aplastar” 

Ahora dice que las personas se sensibilizan un poco más y que hay quienes se unen y  tienen la misión de apoyar año con año. 

Durante 10 años repartieron cargando en sus hombros las bolsas con lo donado pero ahora gracias a la difusión que ha tenido en los medios de comunicación su labor altruista, hay personas que prestan transportes y hasta la gasolina. 

También dice que ya no son tan ariscos como punks y eso ha ayudado a que la gente se solidarice más. 

“Como punks éramos supermamones, no hay registro de nosotros porque yo no dejaba que nos documentaran porque era un asunto subterráneo, autogestivo de ideología. Sobre todo que no queríamos reconocimiento”. 

Pero él se dio cuenta de que la difusión sí ayuda. 

“Ha crecido un chingo este pedo, nunca creí que iba a ser algo tan cabrón lo que inicie en los 90”.  

El movimiento de los reyes magos punk ya llegó hasta El Salvador. Un grupo de punks le pidieron autorización al Pikos para usar su logo y reproducir en aquel país del Sur, la iniciativa que posiblemente llegue también hasta Perú, Brasil y Chile. 

Las drogas de hoy roban el alma

Hay drogas que son durísimas y cuesta más trabajo sacar a la gente del vicio.

“Ahora es más difícil ayudar a los morros, antes no existían las drogas duras que existen hoy, esa madre los vuelve grises, pa pronto, les roba el alma y los deja absolutamente sin nada”. 

Este año, uno de los objetivos es llegar también a la niñez migrante. Pikos sabe que es una población estigmatizada y olvidada. 

“Este año es diferente, vamos sobres con los morritos haitianos, venezolanos, con todos los migrantes”. 

¿Quieres ayudar?

Quien desee convertirse en Rey Mago puede contribuir a la colecta con lo siguiente: 

•Ropa para frío (niños y adultos)

•Cobijas

•Peluches

•Juguetes en buen estado

•Aguinaldos de dulces

• Cajas de galletas 

• Piñatas llenas

A quien quiera acompañar a estos Reyes Magos Punk, pueden unirse. La salida será el próximo 5 de enero a las 10 de la noche en Av. Lázaro Cárdenas 155 cerca de la estación de metro Garibaldi, donde también es uno de los centros de acopio. 

Para mayor información sobre dónde entregar donativos, ponerse en contacto a través de la cuenta de Facebook: Luis Spike Durrutti Punk 

Nunca me ha gustado que las historias felices se acaben por eso las preservo con mi cámara, y las historias dolorosas las registro para buscarles una respuesta.