Un encuentro en San Cristobal de las Casas reunió a comunidades chiapanecas para escuchar las problemáticas que viven las infancias y juventudes en ese estado, y reflexionar sobre posibles soluciones

Texto y fotos: Isabel Briseño

SAN CRISTOBAL DE LAS CASAS, CHIAPAS. – Infancias y juventudes de distintas comunidades como San Juan Chamula, Berriozábal, Villa Corzo, Teopisca, Trinitaria, Sitalá, Chenalhó, San Juan Cancuc entre otros, expresaron sus necesidades, desafíos y experiencias relacionadas con el ejercicio de los derechos humanos al agua y saneamiento.

En uno de los dos estados con mayor población joven en México, los derechos humanos al agua y saneamiento siguen siendo asignaturas pendientes del Estado mexicano.

La falta de garantía de estos servicios ha tenido un impacto significativo en el desarrollo, la salud, la educación, y la calidad de vida de niñas, niños y adolescentes.

Con la participación de más 100 menores de edad que se reunieron en las instalaciones de Sueniños, compartieron sus testimonios y presentaron propuestas que se sumarán a la demanda de un Plan de Justicia Hídrica para Chiapas, presentada en el 1er Encuentro realizado en septiembre pasado en Berriozabal.

Un plan de justicia para llevar agua al campo de Chiapas

Chiapas es una de las tres entidades federativas con menor cobertura de acceso al agua en México (CONAGUA, 2017), lo que resulta en un suministro diario de agua de menos del 50% en las viviendas (CONEVAL, 2018)”.

Chiapas también es uno de los dos estados con la mayor mortalidad infantil por enfermedades diarreicas agudas.

En busca de la atención pública de esta situación, 11 organizaciones de la sociedad civil, entre ellas Cantaro Azul, UNICEF, la Comisión Estatal de Derechos Humanos y las autoridades gubernamentales se sentaron a escuchar lo que tenían que expresar estas infancias y juventudes chiapanecas.

Ceremonia, canto, juegos y reflexión.

Frente a un pequeño ojo de agua, el señor López y su familia realizaron una ceremonia tseltal para pedir que nunca les falte el recurso.

Encendieron 13 velas que representan, cada una, 28 días. Aunque también representa las 13 articulaciones que tiene el cuerpo humano; colocó 4 veladoras mas que significan los 4 puntos cardinales.

Rezaron en tseltal, bebieron pox, que es una bebida alcohólica destilada de un fermento de piloncillo y maíz originaria de Chiapas. Lo compartieron, pues eso significa la reconstrucción del ser humano.

Después, en un acto de unión, niños, niñas, padres, madres, profesores, autoridades y representantes de las organizaciones se tomaron de las manos formando un gran círculo para entonar una bella canción que los integró.

“Somos unidos como el río, somos unidos, seguimos en paz. Suben las olas poderosas, suben las olas, seguimos en paz”, corearon felices y con las manos sujetadas.

En un ejercicio de escucha atenta, se presentaron diversos testimonios y exposiciones sobre los obstáculos que enfrentan en sus comunidades para tener acceso a su derecho al agua.

Sus emociones también fueron expuestas:

“Sentimos impotencia y enojo cuando le hacen pruebas al agua y sale contaminada. Tenemos una gran responsabilidad, sanar y reparar el daño que se ha hecho”.

Hablan las infancias

Problemas como la basura, la mala calidad en el agua, la falta de sistemas de captación de agua de lluvia, falta de contenedores que permitan almacenar el agua, distancias largas para acarrear el agua y la inasistencia a las escuelas por la falta del líquido son temas que niños, niñas y jóvenes pudieron exponer.

“El agua es fundamental. En mi casa tenemos un huerto. Nosotros rapeamos y bailamos, necesitamos energía y de mi huerto sacamos las frutas y verduras para comer sano pero si no hay agua, no tenemso tampoco alimento”.

Las propuestas llegaron con un rally por el agua en donde los participantes se reunieron en equipos para aportar posibles soluciones mediante el ejercicio de lluvia de ideas.

De forma alterna, la organización convocante, Cántaro Azul, presentó la plataforma “Aguas con tu escuela” que será puesta a disposición de la comunidad educativa que desee aportar datos que permitan tener un mejor conocimiento sobre la situación específica de cada institución educativa.

Las ideas que surgieron durante el rally, fueron escuchadas por el comité de escucha conformado por diversas  autoridades que brindaron sus observaciones y compromisos que ayuden al fortalecimiento de políticas públicas y mejoras legislativas para el avance en el derecho humano al agua y saneamiento.

Casi al final del Foro, las infancias y juventudes expresaron su felicidad al ser escuchados, así como la tarea de regresar a casa con una reflexión y compromiso firme para seguir contribuyendo desde estos espacios y desde sus hogares al cuidado del agua.

Feliz, fortalecido, seguro, esperanzada, comprometido, sorprendida, preocupada, ocupada, reflexiva y consciente, fueron parte del sentir final que expresaron algunas de las infancias y juventudes participantes en el 2do Encuentro por el Agua convocado por la organización Cántaro Azul.