La violencia en las comunidades indígenas

18 octubre, 2023

Tatyi savi

En la Montaña de Guerrero las mujeres viven en estado de indefensión porque los gobernantes poco hacen por mejorar la situación de precariedad de los indígenas que viven en condiciones de esclavitud y sin acceso a la justicia. Cuando se organizan no les permiten construir un espacio libre de violencia

X: @Kausirenio

El asesinato del fundador de Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio evidencia el descarrilamiento del gobierno de Evelyn Salgado en materia de seguridad.

De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el primer semestre de 2023 se fue el más violento en Guerrero; De enero a junio fueron asesinados 800 personas, lo que representa un incremento de 20% respecto el mismo periodo del año anterior, cuando sumaron 666 muertes intencionales.

Las calles de Chilpancingo, Acapulco, Iguala y Chilapa son escenas de crimen: asesinatos, enfrentamientos entre grupos rivales, bloqueos e incendios de vehículos son algunas muestra de la ingobernabilidad en Guerrero.

La violencia no es solo entre grupos civiles armados que se pasean campantemente en las principales ciudades, sino que hay otra violencia que carcome en las comunidades indígenas y es poco visibilizada.

El Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan documentó el caso de 49 personas desaparecidas: “13 son mujeres indígenas, y de estas 7 son niñas, de los municipios de Tlapa, Zapotitlán Tablas, Cochoapa el Grande, Atlamajalcingo del Monte, Tlacoapa, Alpoyeca, Iliatenco, Copanatoyac, Alcozauca, así como Chilpancingo y Aguascalientes”.

El documento señala: “En un conteo que realizamos de las denuncias en redes sociales y de familias coincidentemente se registraron 45 personas desaparecidas, de estas 16 son mujeres y niñas, de los municipios de Zapotitlán Tablas, 28; Acatepec, 6; Cochoapa el Grande, 6; Olinalá, 2; Metlatónoc, Huamuxtitlán y Tlalixtaquilla fueron uno respectivamente. Las cifras de las personas desaparecidas son más elevadas, pero porque temen por sus vidas al denunciar y buscar a sus seres queridos”.

Mientras, los feminicidios siguen al alza en la Montaña, donde la violencia machista ha cobrado vida de mujeres.

“Desde el 2016 a la fecha Tlachinollan acompaña a 27 víctimas de feminicidios de mujeres indígenas de los municipios de Acatepec, Tlapa, Malinaltepec, Alpoyeca, Tlacoapa, Copanatoyac, Cochoapa el Grande, Zapotitlán Tablas y Acapulco”.

Tlachinollan señala que hay nueve órdenes de aprehensión en contra los feminicidas. Sin embargo, las autoridades judiciales no han detenido a una sola persona. Por ejemplo, el caso del municipio de Copanatoyac, donde hubo seis feminicidios, pero solo tres cuentan con orden de aprehensión y tres están en la etapa de investigación.

Otro caso preocupante es la desaparición de niñas y adolescentes de los municipios de Cochoapa el Grande y Metlatónoc, esto para evitar matrimonios forzados: “También huyen de la violencia machista en sus hogares y en sus comunidades. La vulnerabilidad es mayor. En Tlapa hay personas que contratan a los grupos de la delincuencia organizada para asesinar y desaparecer a las personas, por ejemplo, en el caso de Atlamajac desaparecieron a la abuela, a la hija y a la nieta”.

En el caso de los feminicidios, sus agresores generan condiciones adversas para dejarlas en estado de indefensión con la violencia económica, psicológica, cultural, simbólica, vicaria y física; las mujeres separadas, divorciadas son las principales víctimas porque no pueden defenderse, ni pedir auxilio.

Así las cosas, por una parte, en la Montaña las mujeres viven en estado de indefensión porque los gobernantes poco hacen por mejorar la situación de precariedad de los indígenas que viven en condiciones de esclavitud, sin acceso a la justicia, y cuando se organizan no les permiten construir un espacio libre de violencia.

Periodista ñuu savi originario de la Costa Chica de Guerrero. Fue reportero del periódico El Sur de Acapulco y La Jornada Guerrero, locutor de programa bilingüe Tatyi Savi (voz de la lluvia) en Radio y Televisión de Guerrero y Radio Universidad Autónoma de Guerrero XEUAG en lengua tu’un savi. Actualmente es reportero del semanario Trinchera.