29 agosto, 2024
Además de expulsar provisionalmente a 7 estudiantes que protestaron contra la violencia porril, la UNAM ahora busca castigar a un profesor
Texto: Camilo Ocampo
CIUDAD DE MÉXICO. – La UNAM busca despedir al profesor de asignatura Facundo Jimenez Pérez, acusado de ser el autor intelectual de la toma de la Dirección General de Colegios de Ciencias y Humanidades que tuvo como finalidad exigir la desarticulación de los grupos porriles al interior de la Universidad.
Durante 39 años, Facundo Jimenez se ha desempañado como profesor, y por más de 25 se ha caracterizado por llevar una lucha contra el porrismo al interior de CCH Naucalpan y en la UNAM. Ahora su carrera se ve en riesgo por su activismo, y acusa que las autoridades lo quieren despedir por protestar.
Los hechos ocurren después de que la UNAM informara sobre su expulsión a 7 estudiantes que se manifestaron por la muerte de un estudiante en CCH Naucalpan durante un ataque porril. El docente protestó, y después le llegó un citatorio de investigación administrativa, acusado de falta de probidad y de honestidad, así como de actos violentos.
El 22 de mayo, al acudir a las oficinas jurídicas del CCH, Facundo se enteró de que la UNAM lo acusó de instigar a quienes tomaron la dirección general y también de agredir verbalmente a la secretaria del director general del CCH. Sin embargo, según relata el profesor, en las pruebas que presentaron, únicamente aparece en dos videos en los cuales solo está protestando. También aparece en dos fotografías en las que está parado en el estacionamiento.
La denuncia en su contra es por instigar a la toma, asegura en entrevista para Pie de Página. Dice que se debe a que como docente se ha encargado de apoyar a estudiantes en sus decisiones y en sus exigencias de erradicar a los grupos de choque de la UNAM
“Mi línea de investigación es ´violencia escolar, convivencia escolar y la cultura de la paz´, sería muy incongruente que yo planteara la violencia. Al contrario, nosotros los profesores del CCH Naucalpan siempre planteamos ante las autoridades el diálogo y el consenso, siempre».
Asegura también que existen pruebas, como cartas a las autoridades en las que les ha planteando mesas de diálogo, lo cual no ha ocurrido; además de no responder al pliego petitorio que presentaron estudiantes y profesores, sobre eso menciona:
“Las mesas de trabajo o los encuentros que se dieron en el CCH Naucalpan fueron pura simulación y los chavos fueron los que decidieron (Tomar las instalaciones) y entonces estamos en el conflicto permanente entre las autoridades y la comunidad”.
Según relata el profesor, no es la primera vez que las autoridades lo persiguen.
En 2005 lo despidieron por lo mismo, pero gracias a diversos paros en la UNAM se logró su reinstalación. Las autoridades en ese momento, no habían respetado su adscripción en el Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Naucalpan, y lo enviaron a la Dirección General del Colegio de Ciencias y Humanidades, sin que él pudiera hacer algo.
Durante esa etapa, en 2006, las autoridades capitalinas de la alcaldía Iztacalco, pertenecientes al sector Tlaloc, llegaron hasta el apartamento de su madre buscándolo sin una razón específica. esto ocurrió “en pleno conflicto en el CCH Naucalpan, no sé por qué” se cuestiona el profesor.
El profeso, además de caminar junto al movimiento que emerge de estudiantes contra el porrismo, tiene publicada una tesina sobre la violencia estudiantil al interior de CCH Naucalpan por la Federación de Estudiantes de Naucalpan (FEN) durante 1997 y 2006.
Asimismo, también en 2006, luego del asesinato de otro joven en CCH Naucalpan por la FEN, se organizó con otros profesores, trabajadores, estudiantes y padres y madres de familia para formar un comité autónomo para desterrar y erradicar al porrismo.
Ahora, su nueva lucha es lograr que la UNAM reincorpore a 7 estudiantes que como él, le han plantado cara a los movimientos contrainsurgentes qué hay al interior de la máxima casa de estudios.
Y finaliza “a mi me preocupa que ya estoy grande, una compañera me decía que me van a quitar los medicamentos para la diabetes, le van a quitar a mi madre su tanque de oxígeno y todas las prestaciones y todos los doctores especialistas y eso no me lo pueden quitar, o bueno, habría que verlo”
La entrevista con el profesor se da en medio de una protesta frente al Centro Cultural Universitario mientras se llevaban a cabo las audiencias de los estudiantes que la UNAM expulsó tentativamente, previo al comienzo de clases en Ciudad Universitaria.
Durante la movilización pacífica, además de exigir que se deje de criminalizar estudiantes, se presentó un “Balance de la represión en la UNAM” en el que se contabilizaron 19 expulsiones desde la salida de Enrique Graue hasta la llegada de Leonardo Lomelí en noviembre de 2023.
Los estudiantes contabilizaron 5 expulsiones de la Facultad de Artes y Diseño en 2023 tras la toma de sus instalaciones por más de un semestre. Ademas de 5 expulsiones de Prepa 5 en 2023 tras haberse manifestado en Rectoría por diversas coyunturas en los CCHs, y en apoyo a la FAD.
Aunado a esto, la cifra de expulsados es:
1 expulsado de la Facultad de Contaduría y Administración, víctima del ataque porril del 23 de noviembre de 2023; donde gentes del equipo Búfalos y administrativos sometieron a dos estudiantes.
1 expulsado de la Facultad de Economía por denunciar a las autoridades y presuntos vínculos con figuras porriles.
7 expulsiones provisionales de la Facultad de Ciencias Politicas, Filosofía, Trabajo Social y de dos FES, quienes desde el pasado 5 de agosto de este año están provisionalmente fuera de la UNAM. Formaban parte del Movimiento Antiporril.
Quienes se manifestaron, hicieron un llamado a las autoridades estudiantiles para frenar los intentos de criminalización en contra de profesores y estudiantes que exigen que los grupos porriles dejen de acosar a las instituciones, como lo han hecho históricamente.
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