30 junio, 2024
Después de que el presidente Emmanuel Macron adelantó las elecciones legislativas en Francia para zanjar el avance de la derecha, esta se impuso con un tercio de los votos
Texto: Redacción Pie de Página
Foto: Redes sociales de Marine Le Pen
CIUDAD DE MÉXICO.- Según los datos de France Television y Radio France el partido Agrupación Nacional (RN en francés por Rassemblement National) encabezado por Marine Le Pen, logró cerca del 33 por ciento de los votos en la primera ronda de los comicios legislativos en ese país.
En segundo lugar quedó la coalición de izquierda Nuevo Frente Popular que alcanzó el 28 por ciento de los votos aproximadamente, mientras que la coalición del presidente Emmanuel Macron, Ensemble, que encabeza la Asamblea Nacional actualmente, solo obtuvo alrededor del 21 por ciento.
El presidente Macron pidió adelantar los comicios legislativos después de la abrumadora victoria de la derecha en las elecciones del parlamento europeo el 9 de junio pasado. En esta elección se determinarán los 577 miembros de la Asamblea Nacional, o diputados electos por cinco años.
Si el candidato de una circunscripción gana por mayoría absoluta (más del 50 por ciento) con una participación mayor al 25 por ciento se le entrega una diputación en la primera ronda; si no se hace una segunda vuelta con los dos primeros lugares.
Los sondeos sitúan en una posición de ventaja al partido de Le Pen para ser la primera fuerza parlamentaria tras la segunda vuelta, el próximo domingo 7 de julio. El presidente Macron ha dicho que no renunciará a su cargo a pesar del resultado de las elecciones y terminará su periodo en 2027.
El excandidato presidencial de izquierda Jean-Luc Mélenchon, que dirige uno de los partidos que hacen parte de la coalición Nuevo Frente Popular, aseguró que de ninguna forma permitiría la victoria de RN, por lo que se retirará de la contienda en los casos donde han quedado en tercer lugar, según reportó BBC
Después de que se conozcan los resultados definitivos del próximo domingo, el presidente Macron nombrará un nuevo primer ministro, si los resultados de este domingo se repiten y resulta vencedor el partido RN, se espera que Jordan Bardella, presidente del partido, quede en el cargo.
Bardella, considerado el “delfín” (un título que antaño designaba a los príncipes herederos) de Marine Le Pen es un político de 28 años que ha hecho su carrera desde los 16 bajo su abrigo y la sucedió en la presidencia del partido cuando se lanzó a la presidencia en 2022.
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La primer respuesta al triunfo de la ultraderecha ocurrió en las calles, cuando miles de franceses salieron a las calles para reclamar el ascenso de Agrupación Nacional en la primera vuelta de las elecciones.
Miles reunidos esta noche en París ante la amenaza de la extrema derecha que llegó primera en las legislativas con 33.2%. Le siguió la alianza de izquierda Nuevo Frente Popular con 28.1% y el partido de Macron con 21%. Era lo esperable: Macron al disolver la Asamblea Nacional le… pic.twitter.com/1iYlYazJtO
— Marco Teruggi (@Marco_Teruggi) July 1, 2024
En caso de que el partido de extrema derecha logre conseguir la mayoría de escaños, y el joven Bardella sea elegido como Primer Ministro, en el gobierno francés podría haber un periodo de cohabitación entre líderes de distintas ideologías. Tal y como ocurrió entre 1997 y 2002, cuando el conservador Jacques Chirac estuvo junto a el primer ministro socialista Lionel Jospin
La cohabitación política representaría un trabajo “en conjunto”, por lo cual, el Poder Ejecutivo estaría dividido. Si esto lega a pasar, existirían funciones del presidente que son transferidas temporalmente al primer ministro.
Sin embargo, pese a los resultados de la primer vuelta, aún falta esperar los resultados de la segunda el 7 de julio. En entrevista con Radio Francia Internacional, el analista político, Arsenio Cuenca, explicó por qué el triunfo de Agrupación Nacional no implica necesariamente un gobierno de extrema derecha.
“Podemos llegar a una situación en la que Bardella sea primer ministro, pero se podría llegar a un compromiso en la que implique un bloqueo institucional o un gobierno técnico en el que haya un compromiso de mínimos y no haya grandes reformas”.
El bloqueo institucional significa que, en caso de que no haya una mayoría absoluta de ninguno de los tres bloques (Agrupación Nacional, la izquierda y el marqcronismo), existe una parálisis absoluta durante un año, ya que al adelantar los comicios, Macron no puede disolver nuevamente la asamblea, hasta un año después.
Esto, explica el analista, representaría una probabilidad de nombrar un gobierno “tecnócrata”, como Mario Draghi en 2021 para evitar el bloqueo.
No obstante, Macron podría evitar un bloqueo institucional apelando al Art.16 de la La Constitución de la Quinta República de 1958. Ese artículo le otorga al presidente poderes extraordinarios en situaciones de crisis “para garantizar la continuidad del Estado”.
Es decir, este artículo le da la facultad de dictar y formular leyes sin el consentimiento del parlamento francés.
Si Macron llega a usar esta figura, esta sería la segunda vez en la historia de Francia que se implemente. La primera (y única) fue durante la quinta República, en 1961, como respuesta al golpe en Argel.
La posible llegada al poder de la extrema derecha ha puesto los ojos de toda Europa en los comicios franceses, pero especialmente los de Rusia, quien de acuerdo al portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov: “Siguen muy de cerca las elecciones en Francia”.
El triunfo de Agrupación Nacional, explican medios europeos, podría representar un debilitamiento en las políticas proucranianas impulsadas desde el gobierno de Macron.
De hecho, también afectaría los compromisos que entabló durante una reunión con líderes europeos a principios de año, donde expresó que el triunfo de Ucrania es clave para la estabilidad de Europa. Y afirmó:
«Haremos todo lo posible para evitar que Rusia gane esta guerra. Estamos convencidos de que la derrota de Rusia es necesaria para la seguridad y la estabilidad en Europa”.
Le Pen, la dirigente de extremaderecha, también ha vacilado en sus posiciones. Pues aunque se le considera prorusia debido a los préstamos contraídos con bancos rusos o por su reunión con Vladimir Putin, dijo que apoya a Kiev y planea evitar la escalada con Moscú.
Sin embargo, y pese a estas declaraciones, la cercanía de Agrupación Nacional con Rusia preocupa bastante al gobierno ucraniano dado que París ha sido uno de los apoyos más constantes en cuestiones bélicas.
Jordan Bardella, el probable próximo primer ministro, también se ha pronunciado respecto al tema.
En una entrevista con periodistas en la feria armamentística Eurosatory indicó el deseo de que «Ucrania tenga a su disposición las municiones y el equipamiento que necesita para defender el frente».
Sin embargo, añadió: «Mi línea roja no cambiará, que es enviar equipamiento que podría tener consecuencias de una escalada en Europa del Este”. La declaración de Bardella se produce después de que Volodimir Zelenzky hiciera una solicitud de autorización explícita para atacar instalaciones militares en territorio ruso.
Aunado a estas posturas, la inclinación de la balanza para una Francia prorusa en caso de que gane Agrupación Nacional también puede verse en los integrantes del probable próximo gabinete ultraderechista.
Se tratan de quince candidatos que están sujetos a sanciones por parte del gobierno ucraniano. Esto después de haber visitado Crimea, la Federación Rusa o el Donbás, durante las elecciones. Entre los nombres de estos políticos resaltan Thierry Mariani y Pierre Gentillet, quienes en caso de que desempeñarán roles prominentes en el gobierno, podrían provocar problemas diplomáticos extremadamente graves entre Ucrania y Francia.
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