Danone, Nestlé, Tyson Foods y Danish Crown están entre las 22 empresas transnacionales de ganadería y lácteos que, con campañas desinformativas y falseando información científica, buscan distraer y descarrillar las acciones climáticas que reclaman la reducción del gas metano

Texto: Kau Sirenio

Foto: Max Saelling / Unsplash

CIUDAD DE MÉXICO.- . Una veintena de firmas trasnacionales de ganadería y productos lácteos usan una campaña de desinformación, con tácticas similares a las que usa la industria tabacalera, para distraer y descarrilar las acciones contra el cambio climático, señala un reporte de la Fundación Changing Markets.

Entre las 22 empresas reportadas, de las cuales 11 operan en México, se encuentran Danone, Nestlé, Tyson Foods, Danish Crown (productora de Tulip), JBS (Pilgrim’s), Fonterra, FrienslandCampina (Fiso, Kroon y El Gallo Azul).

Estas compañías han logrado influir en las políticas públicas, minimizando su impacto climático al falsear la información científica que hay sobre las emisiones de metano que producen estas compañias y promoviendo sus propias soluciones tecnológicas..

En conferencia de prensa la gerente de Campañas Changing Markets Foundation, Alma Castrejón-Dávila dijo que hace tres años científicos alertaron al mundo que la mejor estrategia para disminuir el calentamiento global es la reducción del gas metano, mientras se trabaja para la carbonización; sin embargo, no se alcanzó el objetivo.

“El metano es un gas que aunque es 80 veces más potente que el dióxido de carbono su presencia en la atmósfera es por sólo 12 años, encontraste con el dióxido de carbono que es de 100 años; cuando empezamos a ver las formas de reducir el metano vemos que el 60 por ciento de estas emisiones se originan por las actividades humanas y el 30 por ciento de estas emisiones se debe a la ganadería” explicó Castrejón.

Agregó: “En el caso de México, la agricultura es la principal fuente de emisiones de metano con más de una tercera parte, le sigue la Industria, basura y la energía; en la Cumbre Climática de Dubai, más de 100 países se integraron al compromiso global para disminuir el metano, incluyendo México pero la agricultura sigue sin ser regulada a nivel mundial”

Sostuvo que hay un movimiento global que trabajan para reducir las emisiones de gas metano en el sector cárnico y lácteo, pero enfrentan a los nuevos mercaderes de la duda y sus tácticas para seguir contaminando el planeta.

Dijo que los cálculos fueron hechos a los equivalentes de más del 80 por ciento de las emisiones europea que consideran como emisiones de efecto invernadero: “Cuando comparamos con otro sector contaminante como con las empresas de combustible con las empresas cárnicas y lácteas encontramos que a nivel mundial es critica la contaminación”.

Detalló que de las 22 empresas transnacionales más importantes de la ganadería, 11 hacen negocios de distracción demora y descarrilamiento en siete regiones del mundo, además de utilizan marketing en el que hacen ver a sus productos como si fueran sanos.

Estas empresas recurren a campaña de desinformación en redes sociales como tiktok, Instagram y YouTube donde los influencers promocionan el consumo de carne y lácteos; engañando que engañándolos para creer que la carne y los lácteos son opciones sostenibles o más saludables.

De las 22 empresas mundiales de carne y productos lácteos, ubicó en primer sitio a Tyson Foods, JBS y Nestlé, junto a sus poderosos grupos de presión comercial que hacen lobby ganadero y han bloqueado los intentos de regulación, con lo que descarrilan políticas medioambientales.

“De las 22 empresas tienen objetivos netos de cero, pero ninguna cumple con las normas de la ONU. Los planes se basan en gran medida en compensaciones y techno-fixes. La inversión en soluciones climáticas es mínima, con JBS gasta sólo el 0.03 % de sus ingresos en su plan neto cero”, acusó Castrejón.

Dijo que estas empresas cárnicas y lácteos usan la ciencia a su conveniencia para no asumir sus responsabilidades con los compromisos medioambientales. “Los grupos industriales promueven una métrica de metano que minimiza el impacto climático del ganado. Las corporaciones presionan dudosas afirmaciones sobre la compensación de las emisiones y promueven el biogás del estiércol de ganado como una fuente de energía preferible”.

Mientras que el especialistas en alimento sano, Juan Rivera Donmarco advirtió que urge retomar el sistema de alimentación ancestrales para dejar de contaminar el medioambiente: “Esta dieta tiene que ser más granos enteros, más verduras para evitar enfermedades crónicas; el consumo de carne no es necesaria cuando se balancea las leguminosas”.