En el sur del continente se escuchó la situación de  impunidad y el panorama de graves violaciones a los derechos humanos que se ha vivido en México desde hace décadas. Estos encuentros evidencian lo necesario que es el diálogo entre pueblos para compartir formas de resistencia para andar por la senda de la memoria, la verdad y la justicia

Texto Andrés Hirsch Soler / ReverdeSer Colectivo

Durante dos semanas a finales de abril e inicios de mayo del presente año, un grupo de 5 personas viajamos hacia el sur rumbo a la Argentina, con el fin de encontrarnos con un gran número de personas, movimientos y comunidades de nuestro continente y así estrechar lazos con referentes populares de estas tierras australes, con quienes  compartimos  el horizonte político de entender nuestras verdades, construir memoria y alcanzar anhelados procesos de justicia.

Lo que motivó este viaje fue atender la invitación que recibimos para participar en la III Asamblea Continental de ALBA Movimientos, así fue como en ese y algunos otros espacios  nos acercamos a una amplia gama de formas de lucha y organización social como se puede apreciar en el presente relato.

Esta asamblea, que ocurrió del 27 al 30 de abril, con sede en el Centro Nacional Recreativo (Ce.Re.Na) en Ezeiza, Buenos Aires, fue un encuentro de más de 300 representantes de agrupaciones sociales de 23 países de América Latina y el Caribe.

Fotos: https://www.flickr.com/photos/195531108@N05/52066834301/

[Fotos: “Imágenes de la III Asamblea Continental de ALBA Movimientos”. ALBA Movimientos, 11 de mayo del 2022]

En las jornadas conformadas por plenarias expositivas, mesas de trabajo y momentos festivos y emotivos, escuchamos e intercambios con referentes regionales como Camile Chambers de PAPDA (Haití), Misselene Gorete y el resto de los integrantes del MST (Brasil); Llanisca Lugo y Joel Suárez del Centro Martin Luther King (Cuba), Bertha Zúñiga Cáceres del COPINH (Honduras), Sascha Llorenti del ALBA TCP, además de representantes sindicales de Estados Unidos, lideresas políticas de Zambia así como militantes, integrantes de la UTEP y del Frente Patria Grande (Argentina) así como especialistas, obreros/as, académicos/as y activistas que integran la Articulación Continental de Movimientos Sociales y Populares hacia el ALBA (ALBA Movimientos).

“¡Fora bolsonaro!”

“La OEA no va más”

“Berta no murió ¡se multiplicó!”

“¡Viva Cuba!”

Fueron algunas de las consignas de las luchas presentes. En esta asamblea resaltó la vigencia del sueño bolivariano de la unión de todos los pueblos de Nuestramérica y el Caribe. Premisa necesaria y urgente para enfrentar las crisis humanitarias, financieras y medioambientales que nos atraviesan en tanto territorios como comunidades y de poder para agrietar al sistema capitalista global. 

En estos días de profundo análisis e intercambio de ideas fueron planteadas prioridades y desafíos que se plasmaron en la Declaración Final de la III Asamblea, en la que se manifestó que “Desde el sur del mundo, lanzamos un llamado continental a la organización y la lucha. Estamos seguras y seguros de que, aún en tiempos difíciles, o mucho más en ellos, es tiempo de Nuestra América, porque el tiempo de América, el tiempo de los pueblos, nunca acaba.”

Con el ánimo avivado por el reencuentro y la convivencia cercana en el otoñal bosque de Ezeiza, los días posteriores continuamos participando en diversos eventos de diálogo que realizamos recorriendo lugares que han sido bastión de resistencias de la capital argentina y sus alrededores.

En el sur también buscando nos encontramos

Por iniciativa de María Herrera, fundadora de la Red de Enlaces Nacionales y la Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, establecimos contacto con Norita Cortiñas, una de las máximas referentes de la línea fundadora de Madres y Abuelas de plaza de mayo que a la fecha tiene 92 años y a quien la dictadura le arrebató a su hijo Gustavo.

El  primer intercambio ocurrió en el marco de la presentación del libro Norita: la madre de todas las batallas, después en el 45° aniversario de las rondas de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, y por último, en el conversatorio convocado por el Comité Argentino de Solidaridad con el pueblo de Haití. 

En una de sus participaciones, Norita señaló que: “Todos los días queremos que termine la impunidad acá en la Argentina. Sabemos que los archivos no se abren porque hay genocidas todavía participando en actividades y civiles que siguen sin querer que los enjuicien. Todavía hay mucho para hacer, pero ya lo vamos a lograr”.

[45° años de las rondas en Plaza de Mayo]

[Con Norita: la madre de todas las batallas]

Voces y miradas entrecruzadas

Gracias a la invitación de integrantes y militantes de Marabunta, una corriente social y política que a lo largo de toda la Argentina, territorio ancestral y plurinacional, se organiza para cambiar el mundo de raíz, conocimos una de las expresiones del Frente Socioambiental; la reconocida Cooperativa de Producción Agroecológica, la Co.P.A: 

Como parte de ello, participamos en el “Encuentro Memoria, Verdad y Justicia”, un diálogo interregional con sede en la Fundación Rosa Luxemburgo del Cono Sur, y que fue organizado por Marabunta (Argentina) y Jóvenes ante la Emergencia Nacional (México). En este espacio participaron Marisol Vázquez del Comité 68, María Herrera de la REN y representantes de SERPAJ. 

Este diálogo público nos permitió presentar la situación de impunidad y el panorama de graves violaciones a los derechos humanos que se ha vivido en México desde hace décadas. Además de conocer una lectura crítica de la vulnerabilidad y la situación en la que se encuentran en Argentina, en voz de Adolfo Pérez Esquivel, activista y acreedor del Premio Nobel de la Paz, y de familiares de Luciano Arruga, quien fue desaparecido por la policía en el 2009 y encontrado sin vida en 2014.

Fue una jornada de profunda reflexión y entrañable solidaridad. Como parte de los acuerdos, quedó nombrado el compromiso  de impulsar una vía colectiva hacia  la construcción de una verdadera democracia popular en toda Nuestra América.

[Conversatorio: Experiencias de resistencia frente al genocidio y las políticas de impunidad]

A modo de reflexión, más allá de lo anecdótico, estos encuentros resultan una muestra de cuan necesario es que los movimientos del sur y el norte continúen en un fraterno e indispensable diálogo, aprendiendo de sus experiencias pasadas, de sus formas de resistencia presentes para poder andar por la senda de la memoria, la verdad y la justicia.

Finalmente, agradecemos a la delegación mexicana que detonó esta travesía: Marisol, Doña Mary, Magdiel y Julieta y al grupo operativo de la organización Familiares en Búsqueda María Herrera que lo posibilitó y animó desde su arranque.

Del Río Bravo a la Patagonia, en NuestrAmérica gritamos y exigimos sabiendo que unidos somos más fuertes ¡Venceremos!